11.3.- VERIFICACIÓN Y CONTROL SISTEMA ALUMBRADO.

Los motivos para realizar una verificación del circuito de alumbrado son muy diversos, pero pueden clasificarse en los siguientes grupos:

a) Alguna de las luces no se enciende en la posición adecuada del mando.

1º.- Se procederá a verificar las hipótesis más sencillas de avería:

- Fusible fundido.

- Lámpara fundida.

2º.- Si los elementos verificados anteriormente estuviesen en buen estado habría que proceder a localizar la avería con la ayuda de una lámpara de pruebas o un voltímetro, que iremos conectando a los distintos puntos del circuito, para detectar el tramo del mismo al que no llega tensión.

Las comprobaciones se realizarán siempre partiendo del final del circuito para terminar en el principio del mismo, siguiendo su recorrido en orden inverso al de la corriente.

Hay que hacer notar que resulta básico el conocimiento del esquema eléctrico al realizar las comprobaciones, pues según sea la avería, podemos descartar algunos tramos del circuito.

Por ejemplo, en el circuito de alumbrado que se presenta en la figura siguiente, si es la luz de cruce del lado derecho la que no luce y sí lo hace la del izquierdo, la avería está localizada en el tramo comprendido entre el fusible (J) y el faro derecho.

El problema no puede ser del mando de luces en este caso, puesto que se enciende la luz de cruce del lado izquierdo.

Por el contrario, si no luciera ninguna de las luces de cruce, es lógico pensar que la avería está localizada en el tramo entre el fusible y el mando de luces.

Si no se enciende luz alguna para cualquiera de las posiciones del mando, es lógico pensar que la avería esté en el tramo comprendido entre la llegada al mando de luces y el borne positivo de la batería.

La existencia de avería en un tramo del circuito, implica que el voltímetro o la lámpara de pruebas no indiquen tensión en el extremo final del mismo y sí lo hagan en el principio.

b) Verificación de la intensidad luminosa de los faros.

Se realizará con la ayuda del comprobador correspondiente, fotómetro y si la intensidad luminosa es escasa se procederá de la siguiente manera:

1º.- Se probará a sustituir las lámparas por si fueran éstas las causantes debido al desgaste natural que sufren de acuerdo con las horas de funcionamiento.

2º.- Si no se nota mejoría alguna, se comprobarán los reflectores, cuya superficie cromada debe estar en perfectas condiciones y exenta de polvo. Un reflecto picado o sin brillo, es suficiente para que disminuya notablemente la intensidad luminosa.

3º.- Si el defecto no es debido a ninguna de estas causas, se procederá a verificar las caídas de tensión.

c) Verificación de caídas de tensión:

Vamos a explicar el procedimiento suponiendo defectuosa la intensidad luminosa de la luz de cruce.

1º.- Se conectará el voltímetro entre el borne positivo de batería y la llegada de corriente a cada una de las luces de cruce.

¡¡ En esta comprobación el circuito ha de estar alimentado, pues estamos midiendo tensiones !!.

La máxima caída de tensión admisible es de 0,3 V. Lecturas mayores indican resistencias de contacto en las conexiones, que habrán de comprobarse individualmente (pinzas del voltímetro a la entrada y salida de la conexión).

¡¡ En las conexiones (conectores) no es admisible caída de tensión alguna, ésta ha de ser 0 V !!.

2º.- Si los valores obtenidos anteriormente son inferiores a 0,3 V, antes de considerar correcto el circuito de alumbrado, deberá comprobarse si el retorno de corriente y las tomas de masa son correctos.

Para esta comprobación se conectará el voltímetro entre el terminal de masa de la lámpara que se está probando (la de cruce en nuestro caso) y el borne negativo de la batería. La lectura del voltímetro ha de ser 0 V, pues en caso contrario, indica que existe una conexión defectuosa que hay que subsanar (limpiar la conexión de masa).

d) Verificación de un mando de luces:

Aunque el mando de luces que vamos a utilizar en la explicación no es actual, el procedimiento a seguir para la verificación es válido para cualquier mando.

La verificación del mando de luces se puede realizar de dos formas:

a) Verificación del mando conectado en el vehículo:

1º.- Teniendo conectado el cableado se comprobará si llega corriente a uno de sus bornes, utilizando la lámpara de pruebas o el voltímetro, que se conectará entre cada uno de ellos y masa.

El borne de llegada de corriente es generalmente al que va conectado el cable de mayor sección. Si no llega corriente a ninguno, la avería es del cableado, cuyas conexiones deben ser revisadas.

2º.- Manteniendo las conexiones mencionadas, se comprobará que a cada posición del mando (situación, cruce y carretera) se tiene corriente en uno de los bornes de salida. Si para alguna posición no se enciende la lámpara, al conectarla en las diferentes salidas, el mando es defectuoso y deberá sustituirse.

b) Verificación del mando desconectado del vehículo:

En algunos vehículos el mando de luces forma un conjunto con el de intermitencias, como se muestra en la figura siguiente, en cuyo caso existen dos conectores, uno de los cuales pertenece a la función de intermitencias.

El de cinco bornes corresponde al de intermitencias y el de cuatro al de alumbrado.

Siendo el borne (1) el de llegada de corriente y los restantes las diferentes salidas para situación, cruce y carretera, (2), (3) y (4), respectivamente.

Teniendo el mando desconectado se comprobará su correcto funcionamiento con ayuda del óhmetro siguiendo los siguientes pasos:

1º.- El óhmetro se irá conectando entre el borne de entrada y cada una de las salidas, en las cuales se obtendrá señal en función de la posición del mando.

2º.- Accionando el mando hasta la posición de luz de posición, debe haber continuidad entre los bornes (1) y (2) solamente.

3º.- Al pasarlo a la posición de cruce debe existir continuidad entre los bornes (1), (2) y (3).

4º.- Al cambiar a carretera debe haber continuidad entre los bornes (1), (2) y (3).

5º.- Si los resultados no son los indicados anteriormente, el mando es defectuoso.