¿Qué es la Competencia Digital?
En este siglo tenemos nuevas herramientes de aprendizaje, por lo que tendremos que utilizar metodologías más acordes a las característcias de nuestro alumnado; un alumnado acostumbrado a múltiples soportes de lectura y aprendizaje. Si está claro que la educación del siglo XXI es una educación basada en competencias y no en contenidos, tendremos que trabajar con nuestro alumnado su competencia digital.
“La competencia digital es aquella que implica el uso creativo, crítico y seguro de las tecnologías de la información y la comunicación para alcanzar los objetivos relacionados con el trabajo, la empleabilidad, el aprendizaje, el uso del tiempo libre, la inclusión y participación en la sociedad”
Tenemos que procurar que nuestro alumnado:
Se comunique y colabore, contribuyendo al aprendizaje propio y al de otros.
Se integren en la cultura participativa, en un marco de responsabilidad, solidaridad y compromiso cívico.
Investiguen y desarrollen proyectos, resuelvan problemas y tomen decisiones de forma crítica, usando aplicaciones y recursos digitales apropiados.
Promuevan prácticas innovadoras asociadas a la cultura digital, produzcan creativamente conocimiento a través de las TIC.
Busquen, organicen y produzcan información para construir conocimiento, reconociendo los modos de representación.
Y que comprendan el funcionamiento de las TIC y las integren a proyectos de enseñanza y de aprendizaje.
Cinco áreas de la Competencia Digital
La Competencia Digital (CD) es aquella que implica el uso creativo, crítico y seguro de las tecnologías de la información y la comunicación para alcanzar los objetivos relacionados con el trabajo, la empleabilidad, el aprendizaje, el uso del tiempo libre, la inclusión y participación en la sociedad.
Requiere de conocimientos relacionados con el lenguaje específico básico: textual, numérico, icónico, visual, gráfico y sonoro, así como sus pautas de decodificación y transferencia. Esto conlleva el conocimiento de las principales aplicaciones informáticas. Supone también el acceso a las fuentes y el procesamiento de la información; y el conocimiento de los derechos y las libertades que asisten a las personas en el mundo digital.
Igualmente precisa del desarrollo de diversas destrezas relacionadas con el acceso a la información, el procesamiento y uso para la comunicación, la creación de contenidos, la seguridad y la resolución de problemas, tanto en contextos formales como no formales e informales. La persona ha de ser capaz de hacer un uso habitual de los recursos tecnológicos disponibles con el fin de resolver los problemas reales de un modo eficiente, así como evaluar y seleccionar nuevas fuentes de información e innovaciones tecnológicas, a medida que van apareciendo, en función de su utilidad para acometer tareas u objetivos específicos
La adquisición de esta competencia requiere además actitudes y valores que permitan al usuario adaptarse a las nuevas necesidades establecidas por las tecnologías, su apropiación y adaptación a los propios fines y la capacidad de interaccionar socialmente en torno a ellas. Se trata de desarrollar una actitud activa, crítica y realista hacia las tecnologías y los medios tecnológicos, valorando sus fortalezas y debilidades y respetando principios éticos en su uso. Por otra parte, la competencia digital implica la participación y el trabajo colaborativo, así como la motivación y la curiosidad por el aprendizaje y la mejora en el uso de las tecnologías.
Para el adecuado desarrollo de la competencia digital resulta necesario abordar:
La información y alfabetización informacional.
La comunicación y colaboración.
La creación de contenidos.
La seguridad.
La resolución de problemas.
Información
Conlleva la comprensión de cómo se gestiona la información, analizar e interpretar la información que se obtiene; además de conocer y manejar diferentes formas de búsqueda y bases de datos.
Como docentes no debemos presuponer que nuestros alumnos, aunque sean mayores o de Enseñanza Secundaria, son capaces de realizar búsquedas de información. Aparentemente parecen competentes en este campo, pero realmente, la mayoría no lo son.
Desde el aula debemos enseñarles que para realizar una buena búsqueda de información que sea veraz y fiable hay buscadores específicos y bases de datos que probablemente desconocen, que más allá de Google o Wikipedia.
Comunicación
Supone tomar conciencia de los diferentes medios de comunicación digital y de varios paquetes de software de comunicación y de su funcionamiento. Saber qué recursos pueden compartirse públicamente y el valor que tienen. Es decir, comunicar en entornos digitales supone compartir recursos a través de herramientas en línea, conectar y colaborar con otros a través de herramientas digitales, interactuar y participar en comunidades y redes; conciencia intercultural. En este ámbito, muchos de los alumnos creen erróneamente que comunicar en entornos digitales es escribir un Tweet, dar un like en Facebook o subir una foto o un comentario a Instagram. Una adecuada guía docente conforme a la edad del alumnado sería realizar distintas tareas con el uso de herramientas variadas como, por ejemplo:
Uso de herramientas de trabajo colaborativo online.
Participación en proyectos con otros centros utilizando herramientas de videoconferencia.
Participación en foros de entornos virtuales de aprendizaje…
Publicación en blog o en la bitácora del centro de producciones multimedia o trabajos de aula.
Creación de de contenido
Implica saber cómo los contenidos digitales pueden realizarse en diversos formatos (texto, audio, vídeo, imágenes) así como identificar los programas/aplicaciones que mejor se adaptan al tipo de contenido que se quiere crear. Así como, saber aplicar los derechos de propiedad intelectual y las licencias de uso.
Aunque a simple vista este ámbito resulta sencillo, en la práctica no lo es; alumnos que “aparentemente” saben crear y editar contenidos nuevos porque realizan comentarios en foros o redes sociales, no saben usar herramientas ofimáticas simples.
Por esta razón, se hace necesario desde el aula “alfabetizar” a los alumnos en este ámbito. Una propuesta motivadora podría ser la creación de contenidos en distintas tareas o situaciones de aprendizaje que se lleven a cabo en el aula: recetarios, prensa escolar, escritura de un diario, composiciones escritas, carteles, itinerario de viaje (planos, mapas), resúmenes, mapas mentales, collages, posters, murales, etc.
Seguridad
Implica conocer los distintos riesgos asociados al uso de las tecnologías y de recursos online y las estrategias actuales para evitarlos, lo que supone identificar los comportamientos adecuados en el ámbito digital para proteger la información, propia y de otras personas, así como conocer los aspectos adictivos de las tecnologías. En este ámbito, sería conveniente que desde el colegio se desarrollen las competencias digitales en ciberseguridad que necesitan los menores, ya que “el conocimiento y la educación son la principal arma de seguridad”.
Desde el aula se pueden diseñar situaciones de aprendizaje en las que se trabajen:
Pautas para la protección de los dispositivos electrónicos como por ejemplo, utilizar contraseñas robustas (no fechas de cumpleaños, nombre de pila….), no realizar descargas de webs dudosas, tener la webcam tapada, etc.
Transmitir a los alumnos la necesidad de mantener un “bienestar digital” ayudándoles a gestionar el tiempo de uso de los dispositivos electrónicos y advirtiéndoles de los peligros que conllevan: adicción, problemas de sueño, ansiedad… para que sepan cómo evitar los riesgos generales para la salud física y el bienestar psicológico del mal uso de los medios digitales.
Diseño de situaciones de aprendizaje a través de las cuales se pueda construir una identidad digital positiva, que mejore su reputación digital y futura empleabilidad y éxito personal.
Protección de datos personales y de la privacidad: los menores están ya acostumbrados a tener perfiles en redes sociales, en varias webs y en otras herramientas de comunicación como Whatsapp. Esto implica que comparten con millones de personas desconocidas datos y contenido personal que puede ser fácilmente sustraído por personas con malas intenciones Por ello, se les debe explicar para que se conciencien que lo primero que deben hacer es configurar la privacidad de las herramientas y webs que utilizan, no publicar contenido que pueda llevar a alguien a identificarlos y no aceptar la amistad de personas que no conozcan.
Resolución de problemas
Esta dimensión supone conocer la composición de los dispositivos digitales, sus potenciales y limitaciones en relación a la consecución de metas personales, así como saber dónde buscar ayuda para la resolución de problemas teóricos y técnicos, lo que implica una combinación heterogénea y bien equilibrada de las tecnologías digitales y no digitales más importantes en esta área de conocimiento.
Desde el aula se pueden diseñar situaciones de aprendizaje para este ámbito como:
Enseñar a tomar decisiones a la hora de elegir la herramienta digital apropiada, acorde a la finalidad o necesidad.
Proporcionar una amplia gama de formas creativas e innovadoras de utilizar las tecnologías para su aplicación en tareas diversas en situaciones cotidianas y escolares.
Estos cinco ámbitos, conllevan el desarrollo de una competencia digital, sin embargo, la adquisición de esta competencia digital requiere de una serie de actitudes y valores que permitan la adaptación a las nuevas exigencias que traen consigo las TIC. Esto proporcionará al alumno el desarrollo de una actitud crítica y realista con el entorno en el que se encuentre que le permita ya no solo valorar sus posibilidades sino el hecho de saber utilizarlas de una manera responsable.