Hace más de un año mi mente, mi cuerpo, mi espíritu pararon. No puedo continuar en el mismo derrotero.
La primera pregunta que me tendría que haber hecho era: ¿Quiero recuperarme? Y ¿Para qué?
Y mientras no responda a esas preguntas, todas estas terapias, consejos... no harán efecto en mí.