4.4 - UN GRAN PROCENTAJE DE AGUA: LA HIDROGRAFÍA

Nuestro planeta puede parecernos gigantesco, pero solo un 30% aproximadamente se corresponde con la superficie terrestre. ¡El resto es agua! Quizás debas plantearte llevar el bañador...

Durante el apartado anterior hemos conocido los diferentes continentes, pero solo nos hemos quedado en la superficie terrestre, y ya sabes que también existen formaciones del relieve submarino (aunque estas no podemos verlas  a simple vista). Lo que sí podemos estudiar es la hidrosfera, es decir, el conjunto de las aguas que forman parte de la Tierra. Lo primero que tenemos que recordar son los océanos y para ellos vamos a practicar con este actividad:

Por otro lado, antes de acercarnos a las características de cada continente con respecto a sus aguas, tenemos que tener clara la distribución del agua en el planeta:

Agua dulce

Agua salada

Tanto el agua dulce como el agua salada se subdivide en diferentes masas:


El agua salada se caracteriza por tener diferentes sales disueltas y por estar en continuo movimiento debido a las olas, las mareas y las corrientes marinas. 


Podemos encontrarla en oceános y mares, diferenciándose los últimos de los primeros en que están más cercanos a la costa y tienen una menor profundidad, además de poseer nombres propios por razones históricas o culturales.


Por otro lado, el agua dulce se asocia a las aguas continentales. Se puede encontrar en cuatro tipos de acumulaciones de agua, tanto en estado líquido como sólido:

Los glaciares se encuentran las altas montañas, la Antártida y Groenlandia, donde existen acumulaciones de hielo.


Los ríos son corrientes continuas de agua que fluyen por un cauce desde manantiales o fuentes de agua subterránea hasta otros ríos, un lago o un mar, donde desembocan tras alimentarse de las aguas de las precipitaciones, la fusión de las nieves u otros afluentes.


Cuando se crean acumulaciones de agua procedente de las precipitaciones o de los aportes de los ríos y aguas subterráneas en zonas deprimidas de la corteza terrestre se forman lagos


El agua subterránea se acumula en bolsas llamadas acuíferos a causa de la infiltración desde la superficie.

Además, este agua está constantemente en circulación, lo que se conoce como el ciclo del agua. Se trata de un circuito constante y equilibrado que provoca que el agua cambie de un estado (físico, líquido o gaseoso) y lugar a otro. Esto podemos contemplarlo a simple vista a través de la evaporación (paso de líquido a gaseoso) y de la precipitación (paso de gaseoso a líquido o sólido).

Pasamos ahora a hacer un recorrido por los ríos, lagos  y mares de cada continente. Recuerda la importancia que han tenido muchos de ellos a lo largo de la historia por convertirse en uno de los elementos creadores de la civilización (civilizaciones fluviales), por lo que es fundamental conocerlos.

AGUAS DE ASIA

Los mares principales de Asia son el Kara, el Mar de Bering, el Mar de Ojotsk, el Mar del Este o de Japón, el Mar de China y el Mar Arábigo, los cuales se concentran en la costa oriental y sur. En el interior del continente hay lagos tanto de agua dulce (Baikal, el más profundo del mundo) como de agua salada (Mar de Aral, Mar Muerto y Mar Caspio, éste último el más extenso de la Tierra). 

Con respecto a los ríos, en Asia son largos y caudalosos aquellos que nacen en cordilleras interiores, pues recorren grandes llanuras hasta su desembocadura, aunque los que desembocan en el Ártico están helados varios meses del año, como el Lena, además del Obi y el Yenisei (que desemboca en el interior). Los ríos de la vertiente pacífica también son largos y atraviesan grandes llanuras, como el Amur, el Mekong, el Huang He o Río Amarillo y Yangtsé o Río Azul (que es  el más largo del continente con 5.800 km) y los de la vertiente índica se caracterizan por su amplio cauce y por ser más cortos ya que las montañas están más cercas de la costa, como el Ganges y el Indo al sur, y el Tigris y el Éufrates al oeste.

Río Obi

Río Mekong

Río Éufrates

AGUAS DE AMÉRICA

Río Amazonas

Río Colorado

Río Mackenzie

Los mares principales de América son el Labrador (al norte) y el Caribe (en el centro). Son más abundantes los lagos, especialmente en la zona de los Grandes Lagos de América del Norte (Lago Superior, Lago Michigan, Lago Hurón, Lago Erie y Lago Ontario), aunque también destacan en Sudamérica los lagos Maracaibo y Titicaca, de menor tamaño.

En cuanto a los ríos, se encuentran condicionados por la situación respecto a las cordilleras orientales. Por ello, los que desembocan en el Océano Atlántico son muy largos y caudalosos tanto en América del Norte (Río Misisipí y Río Grande) como en América del Sur (Amazonas, que es el más largo del mundo con 7.062 km, además del Orinoco y del Paraná). Los ríos de la vertiente pacífica son cortos por la cercanía de las montañas, como ocurre con el Yukón y el Colorado, mientras que los que desembocan en el Océano Glacial Ártico suelen ser cortos y permanecer helados la mayor parte del año (salvo excepciones), destacando el Mackenzie. Otros ríos importantes son el San Lorenzo y el Misouri, que desembocan en el interior.

Río Congo

Río Zambeze

Río Nilo

Wadi en el Sáhara

AGUAS DE ÁFRICA

En África, los mares son escasos debido a que sus costas son poco recortadas. Aún así, cuenta con el Mar Mediterráneo y el Mar Rojo, una de sus fronteras naturales con el continente asiático. En cuanto a los lagos, se concentran en torno a la fractura del Valle del Rift (Lago Victoria, Lago Tanganika, Lago Malawi) y también pueden aparecer en la cubetas o zonas hundidas de las mesetas, como el Lago Chad.


Con respecto a los ríos, estos están condicionados por la existencia de grandes desiertos. Podemos encontrar algunos largos y caudalosos como el Níger, el Congo y el Orange que desembocan en el Oceáno Atlántico y se situan en torno al ecuador, por lo que recogen gran cantidad de agua en ciertas épocas del año. Otros son cortos, aunque con abundante caudal, como el Zambeze, que desembocan en el Océano Índico. Por último, en el Mar Mediterráneo desembocan ríos cortos, excepto el Nilo, el segundo más largo del mundo (6.671 km) y se concentran en sus costas algunos wadis de los desiertos, que se encuentran secos la mayor parte del año. 

AGUAS DE EUROPA

Las costas de Europa están bañadas por numerosos mares tanto en la zona norte (Mar de Barents, Báltico, Mar del Norte) como en la atlántica (Mar Cantábrico) o la del sur (Mediterráneo, Tirreno, Adriático, Jónico, Egeo y Mar Negro). Al mismo tiempo, son abundantes los lagos del interior, destacando el Onega y el Ladoga al noreste y el Lago Constanza al norte de los Alpes.

Europa posee una amplia red fluvial aunque con ríos bastante cortos si se comparan con el resto de continentes. Los de la vertiente atlántica son caudalosos gracias a las constantes lluvias, permitiendo que sean navegables, como el Elba, el Rin y el Sena, así como el Oder, el Vístula y el Dvina Occidental, que desembocan en el Mar Báltico. También en el norte encontramos los ríos de la vertiente ártica, que son caudalosos y están helados en invierno (Pechora, Onega y Dvina Septentrional). Los ríos más largos son los que desembocan en el Mar Caspio, que es un lago -el mayor del mundo- compuesto de agua salobre (Volga, Ural) y el Mar Negro (el Danubio, el Dniéster, el Dniéper y el Don) , puesto que atraviesan grandes llanuras centroeuropeas, por eso son las principales vías de comunicación del continente. Por último, la vertiente mediterránea acoge ríos cortos e irregulares que sufren sequía en verano, como el Ródano y el Po. Esto mismo le ocurre a algunos ríos españoles, como el Guadalquivir, aunque desemboca en el Océano Atlántico.

Río Rin

Río Dvina

Río Pechora

Río Volga

Río Danubio

Río Ródano

AGUAS DE LA ANTÁRTIDA

Mar de Weddell

Mar de Ross

Mar de Amundsen

En la Antártida, aunque toda la superficie está cubierta por una densa capa de hielo que puede alcanzar los 2.000 metros de espesor, cuenta con mares que bañan sus costas, como son el Mar de Ross, el Mar de Amundsen y el Mar de Weddell.

AGUAS DE OCEANÍA

En el caso de Oceanía, se trata de un continente que, aunque está rodeado de agua tiene una gran aridez debido a esa insularidad que evita las lluvias. En Australia se encuentran los elementos más destacados, como son el Mar de Tasmania y el Mar del Coral, separando a esta isla de los archipiélagos cercanos. En cuanto a los ríos, solo se originan en las regiones centrales y hay que mencionar el Darling y el Murray, así como el Lago Eyre, que, además de se el punto más bajo del continente, es su lago más extenso.

Mar de Tasmania

Mar del Coral

Río Darling y Murray

AGUSA DE ESPAÑA Y ANDALUCÍA

En España, las aguas se distribuyen de forma diferente  dependiendo de las precipitaciones en cada zona, por lo que puede diferenciarse entre una España húmeda (Submeseta Norte) y una España seca (Submeseta Sur, excepto los sistemas montañosos), lo que influye la presencia de las masas de agua: Mar Cantábrico, Océano Atlántico y Mar Mediterráneo.

Los ríos son generalmente cortos e irregulares, aunque existen diferencias según donde desembocan: los de la vertiente cantábrica son muy cortos porque las montañas están prácticamente en la costa pero muy caudalosos por las constantes lluvias (Nalón, Nervión); los de la atlántica son muy largos porque atraviesan casi toda la península desde las sierras en las que nacen (menos el Miño) mientras recogen aguas de las lluvias y de otros afluentes, aunque sufren estiaje en verano (Duero, Tajo, Guadiana); y los de la mediterránea son cortos, irregulares y con poco caudal que sufren estiajes en verano e inundaciones en otoño (Turia, Júcar, Segura, Llobregat), excepto el Ebro, que es el más largo y caudaloso de España. En las islas apenas existen ríos, pero se forman torrentes (en Baleares) y barrancos (en Canarias) que son corrientes discontinuas. Además, en todo el país aparecen numerosos lagos y lagunas originadas por diferentes causas: volcánica, tectónica, glaciar, kárstico o litoral.

Los ríos de Andalucía son, generalmente, cortos y poco caudalosos, con un régimen irregular debido a las sequías y escasas precipitaciones, y van discurriendo por el camino que marca el relieve, así que desembocan o en el Mar Mediterráneo (más cortos y con gran pendiente, como el Guadalhorce, el Guadalfeo, el Guadiaro, el Andarax y el Almanzora) o en el Océano Atlántico (más largos, destacando el Guadalquivir y algunos de sus afluentes como el Genil, el Viar, el Guadarrama, el Guadiato, el Corbones, el Guadalimar, el Guadaíra y el Guadiato, además del Guadiana, que marca la frontera natural entre Andalucía y Portugal y otros como el Tinto, el Odiel, el Guadalete y el Barbate).

Río Guadalquivir

Río Tinto

Río Andarax

🧩 TRABAJO EN EQUIPO: ¡MANOS A LA OBRA!

Como ya se indicó en el apartado anterior, el puzzle de los continentes no estaba terminado solo con el relieve, sino que faltaba por añadir las aguas. ¡Ahora es el momento!. Los elementos que hay que añadir a las plantillas son los ríos, mares, lagos y océanos escritos en negrita a lo largo de todo el apartado.

📝 ¿LO RECUERDAS?: REALIZA A LAS SIGUIENTES ACTIVIDADES EN TU CUADERNO

🧳PREPARA TU VIAJE:

La próxima tarea de tu cuaderno de viaje es completar el sexto apartado (el anterior) con los ríos correspondientes. Pero además tendrás que hacer el séptimo apartado. Éste se titula El baúl histórico de los recuerdos y consiste en buscar la civilización más antigua que habitó el país que vas a visitar y hacer una pequeña reseña con los datos más importantes sobre ella, en la que no puedes olvidar mencionar el río más cercano en torno al cual surgió.