Etruscos:
Eran un pueblo itálico que se desarrollo en la toscana, primero fueron llamados Tyrrhenoi (tirrenos) por los griegos, luego Tusci, y más tarde Etrusci, por los romanos, aunque ellos mismos se denominaban; Rasena.
Este pueblo era posiblemente de origen ario, procedentes de oriente. Y presenta como rasgos, una mescla de la cultura helena pues los griegos emigraban constantemente a los territorios donde se asentaron, y la oriental propia de Anatolia.
Sus tumbas revelan una compleja mitología, quizás comparable a la egipcia y otras de oriente. Mescladas con la arquitectura de los montículos propias de otras culturas europeas.
En cuanto a su religiosidad es bastante notable su obsesión por el mundo de ultratumba. los etruscos buscaban la manera de llevarse consigo al mas allá todo aquello que les permitiese mantener los mismos goces que disfrutaban en su vida mortal.
Cada vez se volvieron más estrictos en cuanto a observar y mantener ceremonias y rituales repetitivos.
Favorecían los cultos de la fertilidad, e imploraban a sus deidades para mantener la buena salud.
También estaban obsesionados con la interpretación de los indicios que revelaban la voluntad de los dioses. Así estos indicios debían ser interpretados de manera meticulosa para no contradecir a las deidades.
Panteón de Dioses Etruscos.
Aita: dios que gobierna el submundo, los infiernos, el más allá. Gobernante de la muerte, se equipara al griego Hades.
Alpan: Diosa del amor, gobernante del más allá, equiparable a la diosa griega Perséfone.
Ani: dios del cielo, moraba en los cielos de los cielos, puede estar vinculado lingüísticamente al dios Mesopotámico Aún, y al romano Jano.
Aplu: dios del rayo y el trueno, equiparable al dios griego Apolo.
Ati Cel y Apa Cel: padre tierra, y madre tierra, equivalente a la griega Gaia.
Artume: diosa de la noche la luna, la naturaleza, el mundo silvestre, la fertilidad y la muerte, se asocia con la diosa helena Artemis.
Atunis: dios de la regeneración, de la vida y la muerte. De los siclos constantes de la naturaleza y el universo. Comparable al dios Adonis.
Cautha: diosa del sol, diosa del inicio del amanecer, y también diosa de la estrella de la mañana del Phosphorus (Lucifer) que guía a los marinos por el océano.
Charontes, y Charum: demonios que transportaban las almas de los muertos hacia el inframundo, asociados a Caronte.
Culsans: dios de puertas y portales, equivalente al Jano romano.
Culsu: deidad infernal femenina, asociado a las puertas de la muerte. Poseía una antorcha para iluminar el camino, y una tijera para cortar el hilo del destino y la vida de los mortales.
Evan: Dios de origen celta, de la inmortalidad personal de cada etrusco.
Februus: dios de la muerte y la purificación, equivale al fauno romano.
Feronia: diosa de la magia.
Fufluns: dios de las plantas, la felicidad, y la salud, el que preside el crecimiento de todas las cosas equivale al griego Dionisio.
Hercle: héroe legendario, que equivale al mismo Heracles.
Horta: diosa de la agricultura, cuyo nombre forma parte de la raíz latina de Hortaliza.
Laran: dios de la guerra, su consorte era la diosa del amor Turan, que equivale a la griega Afrodita.
Lasas: dioses y diosas que formaban el sequito de de Turan, y custodiaban las tumbas.
Leinth: diosa infernal sin rostro que custodiaba las puertas a los infiernos.
Lethans: diosa proyectora del inframundo.
Losna: diosa de la luna, y las mareas, guiaba a los marinos y pescadores. Era comparable a la leucotea griega.
Mania: diosa de la muerte, era la madre de los lares, manes, fantasmas, y otros espíritus de la noche.
Mantus: dios del inframundo, esposo de Mania. Eran especialmente reverenciados en la ciudad de Mantua.
Maris: dios de la agricultura, la fertilidad. Y deidad salvadora. Que más tarde asumiría un carácter guerrero comparable al Ares Griego.
Menrva: diosa virgen de la sabiduría, la guerra, el arte, el comercio y la educación, era hija de la triada de dioses nacionales Tinia, y Uní. Era equiparable a la diosa griega Atenea.
Nethuns: dios de las fuentes, y de todos los tipos de agua, similar al Poseidón heleno.
Nortia: diosa del destino y la suerte.
Persipnei: diosa infernal comparable a Perséfone.
Satres: dios del tiempo y la necesidad, igual que el cronos Griego.
Selvans: dios de los bosques.
Semia: diosa de la tierra madre de Fufluns.
Sethlans: dios del fuego, la fragua, y la forja, igual que el Hefestos griego.
Tages: hijo de Tinia, dios que les trajo los secretos de la adivinación a los hombres, es un joven que tiene dos serpientes en lugar de piernas.
Tecum: dios de los lucomenes, es decir la clase gobernante.
Thalna: diosa del alumbramiento.
Thesan: diosa del amanecer, y de la generación de la vida. Se identifica con la diosa aurora.
Thethlumth: dios del inframundo y del destino final de todos los mortales.
Thufltha: diosa de la justicia divina, equivale a la diosa griega Némesis.
Tinia: rey del cielo y de los dioses etruscos. Es el esposo de la diosa Uní, y padre del héroe Hercle… este dios está asociado con el Zeus griego.
Tiv: dios de la luna, quizás relacionado con el dios Tyr, de Germania.
Tluscva: pareja de dioses de la tierra tellus, y telluno.
Tuchulcha: demonio femenino del inframundo, que era en parte humana, tenia cabello de serpientes y pico de buitre.
Turan: diosa del amor, y la vida. Era representada como una joven muchacha alada, tenia consagrados para si las palomas, y los cisnes negros, tenía un sequito de dioses y diosas conocido como lasas. Estaba asociada al a afrodita griega. El centro de su culto estaba en la ciudad de Vulci.
Turms: Dios del comercio y los viajeros. También era el mensajero de los dioses estaba relacionado con el dios Hermes, también se le denominaba el líder de los muertos.
Tvath: diosa de la resurrección de las almas, y el amor por los difuntos. Está relacionada con la griega Deméter.
Uní: diosa etrusca del hogar, esposa de Tinia. Junto a este dios y a Menrva eran patrones de Etruria. Esta diosa equivale a la griega Hera.
Usil: dios del sol.
Vanth: heraldo de la muerte, demonio con ojos en las alas. Era el que Asia espirar a las personas en el lecho de muerte, se alimentaba del último aliento de los mortales. También representaba la justicia, sus atributos eran las llaves, las serpientes, y las antorchas.
Veive: dios de la venganza, relacionado con maris, es un joven que sostiene una corona de laurel, y va armado con dardos o flechas.
Veltha: dios de la tierra, de carácter Ctonico. Más tarde se convirtió en dios principal de los etruscos. Como patrón de este pueblo y de su avanzada civilización, se equipara a la deidad romana Vertumnus.
Vetis: dios del caos, la muerte y la destrucción. Que debía ser aplacado con sacrificios de animales negros.
Otros aspectos de su cultura:
Su arte es bastante sofisticada, nos han llegado frisos, pinturas, y esculturas de exquisito acabado. Que revelan una sociedad con un gusto por el lujo, que promovía los matrimonios monógamos; con esculturas de los mausoleos donde aparecen los dos esposos juntos, y sonrientes.
Mientras que en muchas vasijas podemos encontrar imágenes sexualmente explicitas, de prostitución, y otras depravaciones.
Sin embargo debemos entender que para el mundo antiguo el ver o plasmar una imagen de esta naturaleza en una básica u objeto, no se hacía con un fin morboso, si no con uno ritualista, casi a modo de talismán para alejar el mal.
Poseen una metalurgia bastante avanzada en artículos de bronce con un acabado exquisito.
Y debido a la abundancia de sus campos se podían permitir mantener un comercio creciente, y además el desenfreno propio de gentes que no temen calamidad.
En la sociedad etrusca se elevaba la figura de la mujer, pues en las inscripciones cuando se nombra a algún personaje importante se dice que este era hija de Su Padre… y su Madre…
Este pueblo emigro a la península italiana, alrededor del año 1.000 a de C. el historiador griego Herodoto de Halicarnaso en libro I, Clío capitulo XCIV nos dice que ellos emigraron desde lidia en Anatolia, Hasta la Italia, en tiempos de una gran carencia de víveres cuando gobernaba el rey Atis hijo de manes (es decir; descendiente de Manes, el fundador de esa dinastía).
Herodoto dice:
“Pero no cediendo el mal, antes bien agravándose cada vez más, determinó el Rey dividir en dos partes toda la nación, y echar suertes para saber cuál de ellas se quedaría en el país y cuál saldría fuera.
Él se puso al frente de aquellos a quienes la suerte hiciese quedar en su patria, ynombró por jefe de los que debían emigrar, a su mismo hijo, que llevaba el nombre de Tirreno.
Estos últimos bajaron a Esmirna, construyeron allí sus naves, y embarcando en ellas sus alhajas y muebles transportables, navegaron en busca de sustento y morada, hasta que pisando por varios pueblos llegaron a los Umbros, donde fundaron sus ciudades, en las cuales habitaron después.
Allí los Lidios dejaron su nombre antiguo y tomaron otro derivado del que tenía el hijo del rey que los condujo, llamándose por lo mismo Tirsenos (Tirrenos). En suma, los –otros- Lidios fueron reducidos a servidumbre por los Persas.”
Así mismo lo refiere el gran historiador romano Publio Cornelio Tacito, en los Anales libro IV, Capitulo LV:
“César, por divertir esta fama, dio muy largas audiencias a los embajadores de Asia, que contendían entre sí sobre en cuál ciudad se había de edificar el templo a Tiberio y al Senado. Once ciudades con igual ambición, aunque con fuerzas desiguales, contrastaban sobre esto, sin que entre ellas se descubriese diferencia notable en lo que referían de su antigüedad y nobleza, y en la afición con que habían procurado servir al pueblo romano en las guerras”.
(Finalmente):
“se redujo todo el juicio entre los sardianos y esmirneses. Recitaron los de Sardis un decreto de los etruscos, como de su misma sangre, en que constaba que Tirreno y Lido, hijos del rey Atis, dividieron entre sí sus gentes por su gran muchedumbre, y quedándole a Lido su país natal, le fue necesario a Tirreno buscar nuevas tierras que poblar; y de que los nombres de estos dos capitanes le habían tomado estas dos naciones, la una en Asia y la otra en Italia. Que aumentada otra vez la opulencia de los lidios, enviaron a Grecia aquellos pueblos, que después se llamaron de Pélope, mostrando a más de esto cartas de emperadores, ligas hechas con nosotros en la guerra de Macedonia, anteponiendo la fertilidad de sus ríos, la templanza de su cielo y la riqueza de los pueblos vecinos”.
No me cabe más objeción posible, y debo aceptar, lo enseñado por Herodoto, lo creído por los emperadores, y testificado por tacito.
Esto ocurrió en el contexto de la guerra de Troya. Con esto los etruscos estarían relacionados con los pueblos del mar del siglo XII a de C. alrededor de la misma época en que se fundó Cartago, y en Italia prosperaba la cultura de villanova.
Así entendemos según el padre de la historia; como los tirrenos o etruscos descienden de los lidios, y llegaron a la región de umbría, de la cual fueron apropiándose, y así fueron formando una nueva nación: Etruria.
Los etruscos establecieron varios sistemas de gobierno en sus ciudades autónomas e independientes, que le rendían respeto y obediencia a una especie de jurisdicción Teocrática.
Así la religión mantenía la Unidad, y uniformidad entre las distintas ciudades estado etrusca.
Estas ciudades se unían a confederaciones de Dodecapolis (12 ciudades), en cada ciudad había un rey que ejercía funciones de comandante supremo, y de sumo sacerdote. Más tarde esto evoluciono a la tiranía, y más tarde repúblicas oligárquicas.
Que siguió expandiéndose hasta el norte donde se encontraron con los galos; al sur, donde entraron en contacto con el lacio. Y En el centro con los griegos de la Campania.
Después en el siglo VII a de c. se fundó la ciudad de roma. Mientras los etruscos experimentaban su auge comercial y marítimo. Ya que los etruscos desarrollaron una buena marinería, ejercieron influencia en Córcega, y Cerdeña, teniendo así contacto con la potencia del Mediterráneo occidental Cartago.
Alrededor del 546 a, de C. cuando Ciro II el Grande conquistaba Lidia. Se desarrolla los siguientes acontecimientos que nos narra Herodoto de Halicarnaso, en su libro I, en el contexto de la colonización de Córcega de los Focenses…
En el capitulo CLXVI, nos cuenta como los Focenses continuaron su campaña, pero que no eran amables con los nativos, y estos se aliaron con los Tirrenos, y cartaginenses. Para hacerles la guerra.
Y se enfrentaron en una batalla naval en Cerdeña. 60 naves de los Tirrenos, y cartaginenses. Contra 60 naves de los Focenses, estos resultaron vencedores, aunque perdieron 40 naves, y las 20 que aun flotaban tenían los espolones dañados, con lo cual tomaron sus mujeres y sus niños y navegaron hasta Regio.
Muchos prisioneros tomaron los cartaginenses, y más los Tirrenos, estos fueron muertos a pedradas.
Más tarde los etruscos y cartagineses, demarcaron sus zonas de influencia en el occidente del mar Mediterráneo, por ejemplo a los etruscos les correspondía la isla de Córcega, mientras que para los cartagineses la de Cerdeña. Mientras que en Italia los etruscos tenían frontera con los griegos de la magna gracia en el rio vulturno.
Los etruscos ya consolidados, comienzan a explotar sus dominios como Córcega de donde obtienen esclavos, madera, cera y miel.
Lo que le permite armar sus ejércitos para expandirse hacia el norte de Italia. Donde fundan numerosas ciudades a modo de colonias, donde ellos instruían y guiaban a las poblaciones nativas a adoptar su estilo de vida, y su manera de ver el mundo más sofisticado y elegante que sus antiguas formas.
El conflicto con roma, pronto comenzaría hasta el fin mismo de la civilización etrusca tras la expulsión del último rey, tarquinio el soberbio, por bruto, ya que los etruscos interpretaron que la expulsión de los tarquinios de roma, era un síntoma notable de que los romanos estaban repudiando toda influencia extranjera, lo otro que les movía a la guerra era el hecho de que roma estaba muy cerca de otras ciudades leales a los etruscos, así que el germen de independencia pronto se encendería.
Así In Site, Bruto, consolida su revolución, y se crea la República Romana (SPQR), el Senatus Populus Quiritium Romanorum, lo que significa del Senado y el pueblo armado romano.
El poder absoluto lo liderarían dos hombres, dos cónsules que gobernarían por un año. Luego habría elecciones para darles el poder a otros dignos varones.
Tito Livio, historiador romano nos explica en el tomo I, libro I, Capitulo XI; de sus Décadas – Ad Urbe Condita (desde la fundación de roma)… como empezó la guerra entre los etruscos, y romanos.
El primer enfrentamiento ocurrió alrededor del 508 A, de C. cuando tarquinio el soberbio se alió con el rey etrusco, de los clunios; Porsena.
Quien después de vacilar decidió apoyar la causa de tarquinio, y levanto un gran ejército en armas, como no se había visto antes en Italia, pues avanzaba con la coalición de ciudades etruscas.
Los romanos no se atrevieron a hacerle frente, y se mantuvieron en los límites defensivos de la ciudad. El único paso a roma era un puente, y allí los romanos establecieron una cohorte, para defenderlo.
Pero cuando Porsena dio la orden de ataque, los romanos retrocedieron, sin embargo un soldado, llegaría a ser héroes este era Horacio clocles (tuerto), pues mantuvo la integridad y emulo a sus compañeros, y dio la orden de destruir el puente con todas las herramientas disponibles.
Y los demás al ver su valor continuaron resistiendo, y matando a muchos etruscos, que no podían usar la ventaja de su superioridad numérica ya que se veían reducidos a marchar en estrecha columna por el puente.
Llegado el momento, ya no se podían acercar más a los romanos, por la cantidad de cadáveres amontonados, hasta que después de todas las cargas desesperadas de los etruscos el puente termino cediendo hasta que se derrumbo, en el rio.
Así la victoria le sonrió al bando romano, gracias a aquel soldado, que quiso ser héroe, desafiar a la muerte, y contagiar su bravura y valentía a sus compañeros de armas.
Tras esto los etruscos se retiraron, pero más tarde volvieron a acosar a la ciudad, así que los romanos tuvieron que rendirse, y quedar sometidos totalmente alrededor del 497 a, de C.
Hasta que se reanudaron los conflictos… al poro tiempo
Según Tito Livio, los etruscos y romanos alcanzaron intensificar sus sentimientos negativos, pues cuando se trabaron en combate por primera vez después de una larga tregua, que cuando acometieron salieron tan deprisa al campo de batalla que ambos lo hicieron sin ningún orden.
Esto ocurrió en tiempo del cónsul, Quincio Fabio, y el cónsul manilio. Quincio Fabio murió en esta batalla, aunque los romanos ganaron, y el senado le otorgo el triunfo al cónsul vencedor.
Pero este no lo acepto, pues como podía celebrar mientras su “hermano” yacía muerto.
Alrededor del siglo V compensaron las invasiones de los celtas en su territorio las cuales no podrían frenar con total efectividad, y ante tal ímpetu fueron perdiendo prestigio. Mientras la república romana ya hacía tiempo había comenzado las conquistas de territorios y ciudades etruscas.
En el 435, se aliaron con otros pueblos. E invadieron los territorios latinos, según Tito Livio, décadas, tomo I, libro IV, Capítulo VI.
Los etruscos invadieron a roma, justo en un periodo de gran dificultad, y peste. Los romanos en cuarentena decidieron no salir a sus campos, con lo cual los etruscos comenzaron a saquearlos.
Entre tanto el cónsul, Cayo Julio Julo preparaba a los soldados sobre la muralla, y en las defensas, su colega el cónsul Lucio Verginio Tricosta, se dirigió al templo de Quirino, y por voluntad del senado de roma SPQR, nombro dictador a Quinto Servilio Prisco.
Este a su vez escogió como Magister Equitum, a Póstumo Ebucio Helva Cornicine. Hecho esto Servilio en su facultad de dictador ordeno que al alba todos estuviesen apostados en formación de batalla frente a la puerta colina, es decir al frente de los enemigos.
Tras el choque inicial de la batalla, los romanos hicieron huir al ejercito Etrusco, hasta su ciudad de Fidena.
Pero Servilio, se dio cuenta de que sus defensas eran solidas. Con lo cual decidió asediarla. Y mando a los zapadores a minar la muralla de la ciudad en la sección menos protegida de la misma.
Mientras su ejército lo dispuso en 4, cuerpos. Para que atacasen los muros. Pero no dio orden de avance, con lo cual los etruscos veían a los romanos formados y permanecían alertas en sus puestos esperando. Mientras ellos entretenían su atención en esto, no vieron a los zapadores que cavaban un túnel bajo la muralla.
Y cuando menos lo esperaban, la ciudad cayo, tras esto los romanos repoblaron la ciudad, convirtiéndola en colonia, y la noticia se esparció por toda Etruria. Y a los tirrenos les dio gran consternación tal infortunio.
Con lo cual las 12 ciudades estado etruscas, entraron en concejo sobre qué hacer ante tal situación, así que en roma decidieron nombrar dictador a Mamerco Emilio Mamercino.
Este nombro Magister Equitum a Aulo Postumio Tuberto, y se recluto un gran ejército, ya que se pelearía contra todos los pueblos de la Etruria.
Mamerco, procuro que el enfrentamiento fuera rápido y eficaz, pues como dijo él: “Oh mis ciudadanos, a mi no me agradan los imperios, y señoríos perpetuos, yo renuncio a la dictadura”.
Más tarde los etruscos cruzaron el tiber, y se asentaron en Fidena en orden de batalla.
Con esto Mamerco dio órdenes, y exhorto a sus huestes, y salió de roma, se puso enfrente de los enemigos a 1.500 pasos, a su derecha los montes, y a la izquierda el tiber.
A tito Quincio Peño, legado de su ejército lo envió con parte del ejercito a posicionarse sobre los montes de la derecha. Para luego abalanzarse sobre la retaguardia de los enemigos.
Al día siguiente como los etruscos se hallaban confiados, y valientes, movilizaron sus contingentes a la batalla, y acudían de manera poco usual, con antorchas encendidas, lo cual fue algo espantoso a la vista de los romanos.
Las tropas romanas, se acobardaron por semejante imagen, y flaqueaban, por lo cual el dictador les recordaba de los honores, y virtud de sus padres, y su nación.
Con lo cual los exhorto a volverse contra sus enemigos, y así lo hicieron, entre tanto el Magister Equitum, mando a quitar los frenos de los caballos, y poniéndose delante todos, dando con las espuelas al caballo, salto en medio de los fuegos, y por manera semejante hicieron los otros, tan grande polvareda se levanto, y se mesclo con el homo, que cegaba los ojos de los hombres, y de los caballos.
Y así evito que les diera más temor a estos animales. Que cargaban sin dificultad, ante los etruscos, al ver esto Mamerco le ordeno a Quincio, y a los hombres que estaban bajo su mando a acometer a los etruscos desde sus posición en la retaguardia enemiga.
Y estos dieron gritos, y desplegaron sus banderas, lo cual hiso sucumbir de terror a los etruscos que estaban trabados en combate con la fuerza principal romana.
Con lo cual no podían huir hacia su campamento, y tuvieron que dirigirse hacia el rio. Muchos cayeron muertos a filo de espada, mientras que otros fueron muertos, y arrastrados por la corriente del caudaloso tiber, incluidos entre los muertos muchos que sabían nadar, pero el cansancio les venció.
Los fidenatos, huyeron a su ciudad. Muchos conducidos por el legado Quincio, tomaron la ciudad y los muros. A donde llego Mamerco, tras haber saqueado los despojos del campamento de los etruscos, con eso el dictador volvió a roma, con un
Ejército fuerte, vencedor, y muy rico.
Más adelante en el capitulo IX, del mismo libro IV, Tito Livio nos menciona que la ciudad etrusca de Vulturna, fue conquistada por los Samnitas, y estos la rebautizaron con el nombre de Capua.
Tras varias batallas, los etruscos fueron conquistados y vivieron en la ciudad obedeciendo a sus señores Samnitas.
Continúo la guerra y Cuando los romanos atacaron a los etruscos de la ciudad de Veyes, iban confiados. Y no prestaron atención a la disciplina, ni al orden. Mientras que los etruscos se defendieron con tesón.
Y Al atardecer ambos bandos se retiraron creyéndose vencidos.
Pero durante la noche los etruscos se retiraron, y por este simple hecho resulto vencedor el bando romano.
Durante la guerra de los romanos contra los Volscos, estos temían la intervención de los reinos etruscos, como aparece evidenciado en la oración de apio Claudio contra los tribunos del pueblo, por Tito Livio en Las Décadas, tomo I, libro V, capítulo II.
El 322 a de C, traería nuevas guerras… Décadas de tito Livio, tomo I, libro IX, capitulo XV.
Los etruscos avanzaron con un gran ejército a la ciudad de Sutrio, por lo cual el cónsul romano Quinto Fabio Máximo Ruliano salió a su encuentro, al verlo los etruscos atacaron pero era tal el orden de los romanos, y además la venida de los reales de Umbría en defensa de la ciudad que estos huyeron a las montañas, de esta manera los romanos pudieron saquear libremente su campamento.
Después de otra batalla, en la que los romanos igualmente resultaron vencedores. Los etruscos enviaron sus emisarios a pedir la paz, que se extendería por un espacio de 30 años.
En el capitulo XII y XIII; al estallar la guerra nuevamente. En roma la situación era critica pues había una guerra con mis samnitas, que les había obligado a aceptar un dictador, en la persona de Lucio Papirio Cursor, para cuando salieron al encuentro ambos ejércitos estaban muy animados por combatir, mas sin embargo prevaleció el romano, ya que sus soldados consiguieron matar a los que portaban los estandartes, y los etruscos se vieron muy afectados por dicha derrota.
Ya que perdieron gran caudal de dinero, hombres, y enclaves estratégicos importantes.
Los romanos más tarde decidieron atacar a la ciudad de percusio ya que el cónsul Fabio consideraba que esta ciudad siempre incumplía las treguas y tratados, por lo que fue conquistada, de esta manera se sumaron las victorias de tan insigne líder, y el senado desidia prolongar su consulado, mientras este sometía al tributo a la ciudad de tarquinia, y el resto de los estados etruscos enviaban sus embajadores pidiendo la paz, para sus ciudades, paz que se mantendría 40 años.
Las hostilidades continuaron pasado el tiempo, como vemos en el libro X, capítulo II. Los etruscos reunieron un gran ejercito con el que amenazaron a los romanos, y estos nombraron dictador a Valerio máximo, quien les derroto y conquisto 3 ciudades, pero poco después mientras se hallaba en roma un ejército romano fue emboscado y murieron muchos romanos.
Más tarde en el 295 a de C. a esta alianza anti romana se añadieron los Sabinos, Umbros, y galos cisalpinos. Como bien expresa Lucio Anneo Floro, en su compendio de la historia romana, libro I, Capitulo XVII
Roma solo había luchado contra un pueblo a la vez, mas en lo sucesivo lucharía contra todos los pueblos (itálicos) reunidos los 12 pueblos que habitaban la Etruria, el umbrío el más antiguo de Italia, y los restos de los samnitas.
“fue esta guerra imagen de aquellas en que, desde las nubes y el cielo, se arrojaban rayos sobres los hijos de la tierra”.
Según tito libro, década I, libro X, capítulo VI… quinto Fabio máximo es nombrado cónsul junto a Publio decio. (VII) Y Fabio reúne un ejército de 4000 soldados de infantería y 600 de caballería.
Y en este momento y en este lugar, ocurre lo que sería una de las batallas más memorables, y magnificas. Donde quedaría evidenciado a máximo grado los ideales del general romano por excelencia.
Por eso les invito a escuchar una lectura que he hecho de esta batalla directamente de la obra de Tito Livio…
“no se alcanzo esta victoria sin efusión de sangre; el cónsul dacio. Acorralado por el enemigo en el fondo del valle, entrego su vida consagrada de antemano. Según costumbre patria a los dioses Manes; consiguiendo el triunfo a costa de tan solemne y acostumbrado sacrificio de familia”. Floro
Desde entonces la guerra se encarnizo, y poco a poco fueron cayendo las ciudades una a una, primero pagando tributo, y después afrontando el mas inmisericorde exterminio.
Finalmente Tito Livio, nos informa en su Década II, libro II, que los samnitas, lucanos, brucios, y etruscos fueron vencidos finalmente en el año 453 ad urbe Condita. Que corresponde al 265 a de c. los romanos conquistan la última ciudad etrusca independiente que quedaba Volsinia.
Tras estos hechos los etruscos son obligados a luchar como tropas auxiliares en las legiones, lo que conllevaría su romanización que se terminaría de llevar a cavo en la época de Octavio cesar augusto, en el siglo I.