¿Qué se entiende por ayuda humanitaria?

El humanitarismo se asienta en el principio de ayuda a una persona para aliviar su sufrimiento y para proporcionarle unas condiciones de vida dignas.

En un primer momento, la ayuda humanitaria se concreta en una ayuda de socorro o de emergencia proporcionada a víctimas de conflictos bélicos, catástrofes naturales, persecuciones políticas…

Pero no sólo hay que garantizar la supervivencia y subsistencia inmediatas, sino que también hay que contribuir a la rehabilitación de esas personas en situación de desamparo y garantizar su inserción y desarrollo posteriores en el seno de una sociedad.

PRINCIPIOS ÉTICOS QUE ORIENTAN LA AYUDA HUMANITARIA

1. Necesidad de socorrer a una persona en situación de desamparo ante la inhibición, imposibilidad o negativa de

quienes tendrían que hacerlo

2. Independencia o no injerencia de estados y gobiernos en quienes realizan esa labor

3. Imparcialidad o neutralidad que implica la no discriminación por cuestión racial, de nacionalidad, religiosa,

política…

La ayuda humanitaria debe prestarse de manera desinteresada y voluntaria y canalizarse a través de organizaciones.

Del 8 al 29 de noviembre de 2017

Sala hipóstila de la Biblioteca Central

CONFIGURACIÓN DE LA AYUDA HUMANITARIA “MODERNA”

La ayuda humanitaria es un concepto que se fue configurando de manera progresiva en Occidente a lo largo de los siglos XVI a XVIII sobre la base de preceptos filosóficos y religiosos.

Durante el siglo XVIII el concepto empezó a evolucionar desde la idea de la caridad cristiana hacia la filantropía. En este proceso, en unos casos se ha mantenido vinculado a creencias religiosas y en otros ha derivado hacia actitudes laicas.

La práctica de la ayuda humanitaria precedió a su regulación jurídica en el Derecho Internacional y, en particular, en el derecho relativo a la guerra orientado en principio hacia el socorro a los soldados que luchaban en el frente.

FASES EN EL DESARROLLO DE LA AYUDA HUMANITARIA “MODERNA”

Una primera etapa se inicia con la Guerra de Crimea hasta el final de la Primera Guerra Mundial (1853-1919).

Una segunda fase se extiende hasta la promulgación de la Convención sobre el Estatuto de los Refugiados en 1951.

Se puede hablar de una nueva fase en los años sesenta enmarcada en el contexto de la descolonización.

En los años noventa del siglo XX y hasta la actualidad, se abre un último periodo caracterizado por la injerencia político-militar y la conversión de la ayuda humanitaria en “espectáculo” a través de unos medios de comunicación que se mueven en el mundo global.