Francisco Mendoza

Francisco Mendoza: Primer Presidente de Venezuela

Nuestro Primer presidente.....

Fue quien propuso el titulo de “Libertador” para Simón Bolivar.

Fue el primero en promover la construcción de un verdadero camino entre Caracas y la Guaira

Escribió la primera obra histórica para el estudio de Bolívar y su época..

Su nombre era Francisco Mendoza. Abogado, un hombre quien tuvo una terrible suerte ( o fortuna, como quiera verse) con las mujeres, ya que enviudo en tres oportunidades. Era un hombre brillante, quien, con tan solo 29 años, se convirtió en presidente de Venezuela, en 1811.Actualmente, Francisco Mendoza esta sepultado por el peso de la historia y el paso de los siglos, sin embargo, si llegamos a escudriñar un poco en su vida, nos encontraremos con una persona proba y brillante, quien se convertiría, según mi opinión personal, en el primer político “bolivariano” de la historia.

Cuando estalla el movimiento de 1810, fue uno de los primeros en sumarse a la causa de Caracas. Es Mendoza para ese entonces, es un respetado abogado en la ciudad de Barinas. El 5 de mayo de ese mismo año, se organiza una Junta de Gobierno en esa ciudad, de la cual Mendoza es vocal secretario. Posteriormente, para representar la provincia de Barinas en el Congreso Constituyente de 1811, son elegidos diputados, entre otros, Cristóbal y su hermano Luis Ignacio Mendoza. El 5 de marzo de 1811 el Congreso lo designa a la cabeza del Triunvirato Ejecutivo que ejercería el gobierno del país. Formaban el Triunvirato, además de Cristóbal Mendoza, Juan Escalona y Baltasar Padrón, quienes se turnaban semanalmente en el ejercicio de la presidencia. Al instalarse el Poder Ejecutivo en la tarde del 6 de marzo de 1811, le correspondió a Mendoza, como primer nombrado, ejercer la presidencia, mientras que Manuel Moreno de Mendoza, lo sustituía interinamente. Asimismo, cuando el Congreso Constituyente declaró la Independencia el 5 de julio de 1811, Mendoza ejercía también la presidencia. Le correspondió igualmente, en su calidad de presidente del Triunvirato firmar el Acta de la Independencia que una comisión del Congreso presentó al Ejecutivo Plural el día 8 de julio.

Cuando cae la Primera República, a mediados de 1812, Mendoza logra refugiarse en la Nueva Granada (Colombia). En 1813 se une al brigadier Simón Bolívar, quien se aprestaba a libertar a Venezuela, convirtiéndose asi en uno de sus principales colaboradores. Bolívar lo designa gobernador político de Mérida, ciudad que se incorporó en mayo de ese año a la causa republicana. Allí se encuentra Mendoza, cuando llega Simón Bolívar, que hace su entrada triunfal el 23 de mayo. Con el cargo de gobernador político de la provincia de Caracas entra junto a Bolívar a la capital, el 6 de agosto de 1813. Durante el desarrollo de la guerra a muerte, Mendoza se desempeña en diversas funciones: administración política, impuestos, víveres, pertrechos y vestuarios para el ejército, hospitales, patrullaje cívico y vigilancia de espías. En el Cabildo Abierto celebrado en Caracas el 14 de octubre de 1813, es él quien propone formalmente que se le confiera a Simón Bolívar el título de “Libertador”, lo cual es aprobado por los miembros del municipio, los notables y el pueblo.

En 1825 renuncia a un puesto en la Corte Superior y se dedica al ejercicio de su profesión, a la vez que promueve actividades de utilidad pública tales como la construcción de una carretera entre Caracas y La Guaira, en lugar del camino de recuas que existía para entonces; empresa que no obstante no llegó a concretarse. En 1826, Mendoza y Yánez inician la edición de la primera obra histórica de gran envergadura para el estudio de Bolívar y su época, titulada Colección de documentos relativos a la vida pública del Libertador de Colombia y del Perú, Simón Bolívar, la cual llegó a tener 22 tomos...

Bolivar siempre vio en Mendoza un hombre de confianza y gran colaborador, sin embargo, y debido a multiples circunstancias, a los 55 años ya estaba enfermo y envejecido. A comienzos de 1828, a pesar de estar enfermo, instado por Bolívar, se prepara para asistir a la Convención de Ocaña, como representante de Mérida, pero Páez se opuso. De todos modos su grave enfermedad le impidió viajar. Finalmente, a mediados de 1828 renunció a su cargo de intendente. Moriría al año siguiente, sumergiéndose su legado lentamente en el olvido de la historia.