Este proyecto surge de la necesidad de sensibilizar a los estudiantes sobre el impacto ambiental del plástico, especialmente en zonas costeras como Piriápolis, donde la contaminación marina y el manejo de residuos sólidos constituyen preocupaciones locales. A través del estudio de los efectos del plástico en los ecosistemas y su resignificación mediante el arte, se propone transformar residuos en recursos, promoviendo valores de sostenibilidad y participación activa.