Ahora te toca a ti preparar un discurso y... ¡lo más difícil! Pronunciarlo ante tu clase o tu centro.
Pero no te asustes, ya has visto varios y aquí encontrarás las pautas para que tu discurso sea un éxito. Pondrás así tu granito de arena en el camino de la lucha por los derechos civiles.
Lo primero que te debes plantear es ¿sobre qué quiero hablar? Para ayudarte en la decisión, aquí tienes una serie de enlaces a noticias que informan o denuncian algún aspecto relacionado con los derechos civiles. Elige uno sobre el que te apetezca investigar e informarte a fondo para luego poder elaborar tu discurso. Puedes usar también otras noticias, reportajes, estudios, etc. Pero antes de empezar, háblalo con tu profesor o profesora. Es importante que te acompañe a lo largo de todo el proceso de preparación de tu discurso.
Igual de importante es saber desde dónde lo quieres contar. Pregúntate: ¿qué punto de vista adopto?
Mira este vídeo. Tres personajes adoptan una postura que claramente se manifiesta contraria a los derechos humanos. Si alguno de ellos pronunciara un discurso esgrimiría algunos de los argumentos que aquí se ven: argumentos falaces, esto es, engañosos. Evidentemente se puede adoptar también la postura contraria, es decir, argumentar desde otro punto de vista y defender los derechos humanos ante todo.
Elige que punto de vista quieres adoptar:
Muy relacionado con el punto de vista que vas a adoptar, debes preguntarte: ¿Qué objetivo pretendo? ¿Solo informar de una situación? ¿Pretendo también mover conciencias? ¿Busco solo cumplir con un trabajo escolar o voy a intentar que mis compañeros se sientan involucrados y sean conscientes de la importancia del derecho civil sobre el que hablo? Tener claro el objetivo te ayudará a montar tu discurso.
Una vez decididos el tema, el punto de vista y el propósito, tendrás que buscar información: fechas, lugares, datos estadísticos, ejemplos del pasado, ejemplos actuales, citas de noticias o documentos oficiales como la ONU….
CONSEJOS PARA REALIZAR BÚSQUEDAS EN INTERNET
Internet puede ser un laberinto si no se sabe buscar bien. Fíjate en estas indicaciones.
Realiza una búsqueda en internet con palabras clave.
Ejemplo: “refugiado”, “sin papeles”, “discriminación mujer”
Para encontrar una frase concreta ponla entre comillas.
Ejemplo: “discriminación homosexual”
Utiliza las herramientas de búsqueda para seleccionar el país, el idioma, intervalo de fechas...
Si quieres evitar una palabra en tu búsqueda, pon el signo menos (-) delante de esa palabra (sin espacio).
Ejemplo: esclavitud infantil -África (si quieres que te salgan búsquedas de otros continentes).
No todo lo que encuentres te valdrá, luego habrás de realizar importante labor de selección. A veces, saber elegir la información es una de las partes más difíciles de un trabajo. Pero no por ello hay que dejar de buscar. A la hora de seleccionar la información hay algunos criterios que te pueden resultar de utilidad:
El discurso es un género fronterizo entre la oralidad y la escritura. Aunque lo vas a pronunciar, antes habrás de escribirlo. Para ello es deseable que te hagas un esquema para distinguir claramente las PARTES. Fíjate bien y a partir del esquema elabora tu discurso.
1. COMIENZO Y SALUDOS
Ejemplo: Directora del centro, Jefe de Estudios,Tutora, compañeros y compañeras…
Fuente: Naciones Unidas
2. CUERPO DEL DISCURSO
Recuerda estos aspectos:
a. Divide el discurso en párrafos para que al pronunciarlo se noten las partes, que subrayarás con pausas más largas.
b. Para ello usa conectores.
c. Aporta datos, ejemplos, citas, contraargumentos, causas y consecuencias…
d. También puedes idear una frase-estribillo, es decir, palabras que repites a lo largo del discurso y que servirán para atraer la atención del público y unir los apartados.
Ejemplo: Malala dice muchas veces “Estimados hermanos y hermanas”
O Emma Watson repite: “Si no yo…¿quién?”
3. CONCLUSIÓN Y FINAL
Ejemplos:
No quiero terminar sin decir que…; Por último…; Para finalizar…; Acabo ya con la esperanza de que…; Solo me queda añadir que…; Espero que haya quedado claro que el propósito de mi discurso…; etc.
¿Cómo lo digo? Esto también requiere un proceso de preparación.
Mide el tiempo: si te sale muy largo, tendrás que cortar algo, y al revés. Cuanto más lo ensayes, mejor te saldrá.
Haz un ensayo general delante de tu familia o de tus amigos para que te digan en qué puedes mejorar y qué has hecho muy bien.
Y llegó el momento de pronunciarlo.
Probablemente os será de utilidad consensuar de antemano qué ítems, qué aspectos hacen que un discurso nos resulte interesante y ameno o... un auténtico tostón. Os invitamos a elaborar entre todos una rúbrica para la evaluación. Os sugerimos algunos elementos que pueden aparecer en ella, pero sois vosotros quienes tenéis la última palabra.
La idea es que tras cada una de las intervenciones rellenéis individualmente la rúbrica con una puntuación de 1 a 3 para valorar el grado de dominio de cada uno de los apartados (1- iniciando/ 2- en proceso/ 3- consolidado). Así todos sabréis cuáles son vuestros aciertos y cuáles vuestros desaciertos, aquello que debéis aún mejorar antes de presentaros en Naciones Unidas.