Sistema de comunicación codificada y de vigilancia entre una aeronave y una estación terrestre .
El sistema permite el control automático del estado del avión en vuelo, enviado datos hacia el centro de mantenimiento del propietario del avión, pero también el encaminamiento de comunicaciones operativas y logísticas. Así, por ejemplo, los encargados de mantenimiento saben bien antes de la llegada del avión, su estado, sus averías eventuales y por consiguiente, las intervenciones a efectuar.
Antes de la introducción del datalink en la aviación, todas las comunicaciones entre un avión y el personal de tierra eran llevados a cabo a través de comunicación por voz utilizando VHF o HF.
Toda esta operación requeriría operadores de radio dedicados para esta función, lo que significaba dinero. Además, los salarios de los tripulantes dependía de si la aeronave estaba en el aire o en tierra; información que era enviada por voz a estos operadores de radios. Por lo tanto, para evitar inexactitudes, accidentales o cualquier situación que pusiera en riesgo las operaciones, las aerolíneas necesitaban de un sistema para ejecutar este trabajo.
Una de las principales funciones del ACARS es detectar y reportar el comienzo de cada fase de vuelo automáticamente. Estos eventos son detectados por medio de sensores instalados en la aeronave. Al comienzo de cada etapa de vuelo, un mensaje ACARS se transmite al suelo mediante la descripción de la fase de vuelo, el momento en que ocurrió y otras informaciones relacionadas, tales como la cantidad de combustible a bordo, el origen y destino del vuelo.
Estos mensajes se utilizan para el seguimiento del estado de las aeronaves y de sus tripulantes.