Con Mujeres Desempleadas

Año 2021

Taller

Construye tu marca personal



Debido a la socialización de género hay algunos valores que se han inculcado de generación en generación a las mujeres entre ellos:

la humildad, la discreción, la dedicación desinteresada a los demás (madres, hijas, esposas, cuidadoras de personas dependientes…), que no encajan muy bien con el concepto de vender nuestras capacidades.

La mayor inestabilidad económica y las reestructuraciones a las que se ven abocadas las empresas configuran un ambiente extremadamente volátil. De un día para otro podemos perder nuestro trabajo, nuestros ahorros y nuestras propiedades. En este contexto, nuestro nombre es más importante que nunca y se convierte en un valor seguro. Además, asistimos a un fenómeno de flexibilización y variedad contractual en el que están de moda las carteras de carreras.


La construcción de marca personal tiene sus desafíos particulares para las mujeres.


Pareciera que no tenemos permiso para desarrollar una marca fuerte de manera coherente e inteligente. Nos arriesgamos a ser calificadas de «agresivas», «mandonas» o «individualistas», pero es esencial asumir ese riesgo en un mundo tan volátil e incierto. Sheryl Sandberg describió este dilema en su libro Vayamos adelante (Lean in):

«El éxito y la simpatía están positivamente relacionados para los hombres y negativamente para las mujeres. Cuando un hombre triunfa, gusta tanto entre hombres como mujeres. Cuando lo hace una mujer, gusta menos entre ambos sexos».


Es lo que se conoce como el dilema de la simpatía (en inglés, likeability conundrum). Esta afirmación se basa en un estudio conocido como «Howard vs. Heidi» y realizado en 2003 entre estudiantes estadounidenses, a los que se les presentó la historia de un emprendedor exitoso. A la mitad de los estudiantes se le dijo que se trataba de Heidi y a la otra mitad, de Howard. Después, se les pidió que evaluaran a Heidi y a Howard. Mientras que Heidi fue calificada de egoísta y el tipo de persona para la que no trabajarías, Howard ganó en comparación. Otros estudios posteriores parecen indicar que esta preferencia por líderes hombres es más teórica que práctica.


En el plano teórico o práctico, ¿qué podría explicar esta preferencia? Los mandatos de género indican que las mujeres deben ser cálidas, protectoras y agradables. Y se penaliza a las mujeres si se violan estas normas y tienen que tomar una decisión difícil o promoverse a sí mismas. Se las califica de «demasiado agresivas», «trepas» o «ambiciosas». Cuando un hombre hace lo mismo, se lo califica de «seguro de sí mismo», «fuerte» o «confiable».


Todas las personas tenemos una marca personal, algo que nos diferencia de las demás y que hasta ahora puede que solo lo supieran en nuestra familia o entorno profesional más cercano.


De manera práctica en este curso vamos a estructurar


Año 2018


Visibilización situación laboral de mujeres desempleadas en el municipio

El objetivo es visibilizar la situación laboral actual de mujeres que, tras la dedicación a responsabilidades familiares en los últimos años, y las dificultades que encuentran cuando deciden reincorporarse al mercado laboral.


Enlaces a las entrevistas publicadas en el Diario de León