Como docentes tenemos que preguntarnos si es adecuado mandar deberes o no. En secundaria todos los niños desean disfrutar, pasar tiempo con su familia, sus amigos, sus juguetes o simplemente jugar y los deberes pueden ser una carga de trabajo. Pero...
¿Y si un deber puede ser divertido?
La física y la química son divertidas, eso no lo podemos evitar. Entonces, nosotros, como futuros docentes tenemos que aprovechar eso.
La controversia de los deberes ha surgido desde hace mucho tiempo y es importante que nosotros, como docentes, la tengamos presente y nos hagamos las preguntas adecuadas ya que los deberes se pueden realizar de muchas maneras. Por ello es importante abrir el debate de si los deberes reflejan lo aprendido y los alumnos adquieren el rendimiento acorde con el nivel escolar, o por el contrario si en muchos casos los hacen los padres por la cantidad de deberes que mandan y, por lo tanto, los alumnos no acaban aprendiendo nada.
Aquí muestro un estudio que responde estas preguntas tratando el tema de manera psicológica: Valle Arias, A., Regueiro, B., Núñez Pérez, J. C., Piñeiro, I., Rodríguez, S., & Rosário, P. J. S. L. D. F. (2018). Niveles de rendimiento académico e implicación en los deberes escolares en estudiantes españoles de Educación Secundaria. European Journal of Education and Psychology.
En el artículo una de las principales conclusiones es que sí existe un aumento del rendimiento académico del alumno que realiza deberes en las tres asignaturas analizadas. Esto puede aportar ayuda a la decisión nuestra de "mandar" deberes para casa a nuestros futuros alumnos.
Es increíble que una mano pueda saludar cuando la colocamos en agua. Hoy aprendí que si introducimos un globo (un guante en la imagen) en agua de tal forma que atemos la muñeca a una superficie que se pueda introducir en un líquido y que flote, claramente, entonces al introducirlo en un recipiente con agua... ¡Se va a hinchar! Parece flipante.
Esto es debido a la presión atmosférica, que siempre está presente entre todos nosotros, y básicamente lo hemos aprendido con un globo o un guante y un recipiente donde podamos echar el agua, es decir, materiales que podemos perfectamente encontrar en un chino.
Es común entre los profesores plantearse si mandar deberes beneficia el aprendizaje de los alumnos. Nosotros también nos lo hemos planteado con una actividad. Primero lo hemos comentado por grupos y después hemos puesto en común nuestras opiniones respecto al tema. En mi caso, creo que los deberes deberían ser moderados, teniendo en cuenta no saturar a los alumnos ya que cuentan con más asignaturas y sobre todo: su tiempo libre ya que el tiempo es oro. También es destacable que los deberes sean no evaluables ya que se los puede realizar alguien o los alumnos lo pueden copiar de internet. En mi opinión, creo que los deberes deberían ser un pequeño enigma semanal que recopile lo aprendido durante la semana de trabajo para así, estimular lo que se ha aprendido y no olvidarlo, es decir, seguir recordando las cosas.