Constelaciones literarias para Literatura Universal

Material didáctico para el desarrollo de la educación literaria crítica en Bachillerato 

Constelaciones de literatura universal es un proyecto de educación literaria orientado al alumnado de bachillerato. Con él pretendemos abrir el currículo de la asignatura, exclusivamente centrado en la literatura occidental, a otras voces y otros entornos culturales, y dar cabida al fin también a la literatura escrita por mujeres. Al tiempo que proponemos una apertura de nuestra mirada al firmamento literario, renunciamos de entrada a toda ambición enciclopedista. Frente a ello, nos inclinamos por el diseño de un puñado de constelaciones o itinerarios de lectura trazados desde el horizonte lector de sus destinatarios –jóvenes entre los 16 y los 18 años– con el objetivo de conciliar el desarrollo de su hábito lector y su educación literaria. Nuestro deseo es que chicas y chicos puedan seguir siendo lectores autónomos, cultos y comprometidos más allá de los años de la escolarización obligatoria. 

El título de cada una de las constelaciones –Encerradas, Frente al poder, Identidades, Carta al padre, Alta tensión, etc.– hace referencia al hilo conductor escogido en cada caso. Ofrecemos a continuación las obras organizadas en una línea del tiempo, por añadir una perspectiva que pueda ser de utilidad a la hora de acercarse a los textos. 

El itinerario se abre con una secuencia titulada "Aproximación a los clásicos" desde la voluntad de acercar a los más jóvenes algunos de los hitos de lo que tradicionalmente se han considerado clásicos universales, por más que ahora ya sepamos de su carácter eurocéntrico (y androcéntrico).  

Una constelación literaria no es otra cosa que un itinerario de lectura diseñado desde el punto de vista del observador, del lector. Como en el caso de las constelaciones trazadas caprichosamente por el ser humano entre las estrellas, decisivas para que seamos capaces de  leer el firmamento, así también una constelación literaria establece vínculos caprichosos entre unas obras y otras que no están en la historia de la literatura sino en la mente de los lectores.

De esta manera, una constelación literaria puede estar integrada por obras alejadas entre sí en el espacio o en el tiempo, pero que abordan sin embargo una misma cuestión concerniente a la condición humana, o que aprovechan un mismo procedimiento narrativo, o que están ambientadas en un mismo lugar o en una misma época. El único requisito necesario en el diseño de una constelación es que hagamos explícitos los criterios que nos llevan a vincular unas obras y otras.

Nuestra propuesta de constelaciones literarias se levanta sobre tres presupuestos. En primer lugar, privilegiar como criterio de selección de los textos la calidad de los mismos y su adecuación al horizonte lector adolescente. En segundo lugar, recuperar la centralidad de la lectura en el aula y subrayar la importancia de la conversación —una conversación mediada por el docente— en la construcción de la interpretación de las obras. Y en tercer lugar,  una apuesta por la intertextualidad, por la literatura comparada, que permita profundizar en los puntos de intersección y de fractura entre unas obras y otras, tanto en lo relativo a universales temáticos como en lo relativo a las formas estéticas, y que establezca diálogos entre el ayer y el hoy. 


Aproximación a los clásicos nos lleva hasta algunos clásicos indiscutibles de la literatura occidental. Cuatro son las secuencias que la integran: Mitología grecolatina (narración oral), El teatro de Shakespeare (texto dramático), El arte del relato (narración escrita), que recoge los cuentos de Griselda, de Boccaccio; La Bella y la Bestia, de Jeanne-Marie Leprince de Beaumont; Bola de sebo, de Maupassant; Vanka, de Chejov; Es que somos muy pobres, de Juan Rulfo; y La fiesta ajena, de Liliana Heker y A la literatura por el cine (novela), que propone el análisis de Las amistades peligrosas, Frankenstein, Orgullo y prejuicio, Germinal, Matar un ruiseñor y El lector. Pendiente queda una Antología de la poesía universal.

Encerradas ofrece un recorrido por textos ensayísticos, narrativos y teatrales que abordan la situación de encierro de las mujeres a lo largo del tiempo y en muy distantes geografías. Un encierro que les ha impedido el acceso a la condición de escritoras o que las ha confinado a unos modos de vida impuestos, no exentos a menudo de violencia física incluso. Un cuarto propio, de Virginia Woolf; Madame Bovary, de Flaubert; Casa de muñecas, de Henrik Ibsen; Oficio de tinieblas, de Rosario Castellanos; Grandes pechos, amplias caderas, de Mo Yan y El harén en Occidente, de Fatema Mernissi son los títulos en que nos detendremos.

El acto de escribir es, también, un emplazamiento moral. En esta constelación nos aproximamos a obras que establecen un diálogo explícito con el Poder: un diálogo a veces complaciente, a veces crítico. El itinerario nos ofrece un repaso histórico por la cultura Occidental (y un contrapunto africano), y nos acerca a tres géneros diferentes: el teatro -Antígona, de Sófocles y Pedro y el capitán, de Mario Benedetti-, la novela -Rebelión en la granja, de Orwell y Todo se desmorona, de Chinua Achebe-, y el ensayo -El Príncipe, de Maquiavelo, y Mujeres y poder. Un manifiesto, de Mary Beard.

¿Qué rasgos de nuestra biografía conforman nuestra identidad? ¿Nuestro origen geográfico y cultural, nuestro color de piel, nuestra religión, nuestra orientación sexual, nuestra clase social? Esta constelación nos acerca a textos literarios que depositan en la identidad -a veces diversa, a veces conflictiva, a veces contradictoria- el peso de su historia: Identidades asesinas, de Amin Maalouf; Fuera de lugar, de Edward Said; El buen nombre, de Jhumpa Lahiri; Sula, de Toni Morrison; Deja de decir mentiras, de Philippe Besson; La creación del mundo, de Miguel Torga; Persépolis, de Marjane Satrapi; y El peligro de una historia única, de Chimamanda Ngozi Adichie.

¿Qué sería de nosotros sin el humor? Nos encanta reirnos; y si es en grupo, mejor. Quizá por eso, y quizá también porque en lo que nos hace reir influye tanto lo verbal como lo no verbal, una constelación en torno al humor ha de detenerse por fuerza en el teatro y en el cine. En este itinerario basculamos entre la Antigua Grecia, para acercarnos a Lisístrata, de Aristófanes, y el siglo XX, en el que nos detendremos en el cine cómico; La cantante calva, de Ionesco; y Aquí no paga nadie, de Dario Fo.

Línea del tiempo de las obras estudiadas