Metodologías y orientaciones

¿Por dónde empezar?

Si bien puede dar la impresión que las modalidades de docencia no presencial son más simples que sus símiles en aula; la docencia no presencial efectiva demanda experiencias de aprendizaje cuidadosamente diseñadas que no sólo faciliten el acceso a los contenidos, sino que desafíen a las y los estudiantes, a la vez que permitan recabar datos para su evaluación.

Uno de los recursos más extendidos y a los que mayormente se recurre en docencia no presencial son los videos. Su uso permite el acceso a una amplia diversidad de recursos y el enriquecimiento de la experiencia de aprendizaje de las y los estudiantes.

El uso de foros, redes y otros espacios virtuales de reflexión y discusión son instancias valiosas para el enriquecimiento de las experiencias de aprendizaje no presenciales. Aquí entregamos orientaciones para su integración y su evaluación.

Las videoconferencias y las transmisiones de lecciones en vivo y en directo mediante plataformas de internet son recursos interesantes y efectivos para dictar una clase, realizar evaluaciones formativas, entregar de retroalimentaciones y generar sesiones de consulta o ayudantías.

Uno de los desafíos permanentes de la docencia no presencial es la evaluación, tanto aquella dirigida a la retroalimentación y mejora progresiva como aquella dirigida a la evaluación y calificación de un producto final. Aquí encontrarás orientaciones para facilitar este proceso.

Las lecciones, ya sean estas clases en aula o videoclases, son parte fundamental de la experiencia de aprendizaje de las y los estudiantes, y como tales debe responder aun diseño con fundamento educativo. Un aspecto esencial es la organización o planificación de la lección.