El volumen es uno de los elementos de la expresión plástica más complejos. Vamos a estudiarlo desde dos puntos de vista distintos:
El claroscuro: es la capacidad de recrear el volumen mediante la reproducción fiel de la luz sobre los objetos.
La escultura y el relieve : es la creación de obras en las que el volumen es un elemento tangible.
Aquí hay volumen que se puede de verdad ya que es una obra que puedes contemplar desde todos los ángulos
Este trabajo recrea un espacio. No puedes meterte dentro ni cambiar el punto de vista.
El claroscuro es una técnica que consiste en disponer de manera adecuada las luces y las sombras en un dibujo o pintura, generalmente para proporcionarle mayor expresividad. Existen diversas técnicas y materiales para producir claroscuro, pero lo más importante es entender de qué manera funciona la luz sobre los objetos y superficies. Observa el siguiente ejemplo para entenderlo.
Con lápices de distintas durezas y graduando la presión se puede conseguir fácilmente reproducir las luces y las sombras
Los carboncillos son ramas de sauce carbonizadas que producen un polvo negro que puede matizarse mediante difuminos, gomas y gamuzas para conseguir una rica escala de grises
La tinta china mezclada con agua también nos permite conseguir una gama infinita de grises para poder reproducir con ella el volumen
La grisalla es una técnica de claroscuro que utiliza un tono medio en el soporte o papel y va añadiendo tanto las luces (con tiza o pastel blanco) como las sombras mediante carboncillo, grafito o barras compuestas.
El uso de líneas de distintos grpsores y más o menos juntas o cruzándose entre sí puede ser una gran opción para conseguir el efecto de volumen
Tridimensional hace referencia a cualquier objeto que tiene tres dimensiones, alto, ancho y fondo, también se suele utilizar para referirse a tridimensional los sinónimos volumen, corpóreo o el tan conocido 3D.
Para empezar vamos a conocer algunos cuerpos tridimensionales que tienen como caras polígonos regulares, a estos cuerpos tridimensionales que tienen todas sus caras iguales y que puedes construir con cartulina se les llaman poliedros regulares.
Poliedros regulares son 6:
El Tetraedro: tiene 4 caras que son triángulos equiláteros
El Octaedro: tiene 8 caras que son triángulos equiláteros
Hexaedro: tiene 6 caras que son cuadrados
Icosaedro: tiene 20 caras que son triángulos equiláteros.
Dodecaedro: Tiene 12 caras que son pentágonos regulares.
Para construir un poliedro debes usar su desarrollo. El desarrollo de un poliedro es el dibujo en un plano del mismo.
Combinando poliedros puedes formar una escultura
A partir de dobleces y basándonos en los pliegues básicos del origami también podemos dar un ligero volumen a nuestros trabajos mediante el relieve de dichos dobleces.
Aquí tienes el paso a paso de cómo hacer los pliegues de las figuras con las que he realizado la composición que puedes ver en esta página
Combinando distintas piezas plegadas podrás hacer composiciones muy atractivas