Comprende la disposición afectiva, la inclinación, el interés que el alumno siente en relación al estudio. Sin duda que cuando el alumno enfrenta, por ejemplo, el subsector de Matemáticas, se espera de él una actitud positiva, entusiasmo, voluntad de aprender y conocer. De hecho, un estudiante aprovechador es aquel que aprende a trabajar. Se aprende mejor aquello que tiene un significado para nosotros, conocer la importancia de las Matemáticas le colocará en una posición más abierta al estudio. Algunos autores a esa “disposición afectiva” le han llamado Motivación.
LA MOTIVACIÓN
Entendida como lo que causa el comportamiento , lo que le da energía y dirección a la conducta. Es una experiencia subjetiva con tres tipos de manifestaciones: Conductual, fisiológica y cognitiva. La acepción científica se refiere a una fuerza del organismo que le impulsa a actuar y a perseguir determinados objetivos; la motivación es un proceso que provoca determinado comportamiento o que modifica uno ya existente. Desde el punto de vista psicológico, el comportamiento siempre es motivado, ya sea que este dirigido hacia una meta previamente fijada o no. Todo comportamiento esta determinado por transformaciones de energía provocadas por estímulos internos o externos. En psicología general, la motivación se trata cuando se estudian los fundamentos del comportamiento, pero no se puede colocar el estudio motivacional al lado de otros procesos, como los cognoscitivos o kinéticos, porque toda la actividad del organismo esta motivada unas veces más y otras menos.
Aun cuando el planteamiento científico de la motivación es reciente, se deben distinguir dos grandes etapas en la elaboración del concepto motivación: la etapa precientífica, que abarca desde los principios de la humanidad hasta mediados del siglo XII, y la etapa científica, que se inicia con la obra de Darwin y se desarrolla particularmente durante los últimos 30 o 40 años de la psicología científica. Las metodologías antiguas buscaron dar explicación al comportamiento humano y lo atribuyeron a los espíritus que dominaban al hombre. Los griegos, en cambio, dieron explicaciones racionales; así, Sócrates trató de encontrar el porqué de la búsqueda de la felicidad del hombre. Con la obra de Darwin se inicia la etapa científica en el desarrollo de la concepción del proceso motivacional; las tesis darvinistas dieron lugar a una nueva orientación en las investigaciones biológicas y psicológicas, las apartaron de las especulaciones filosóficas e hicieron que se centraran en la observación sistemática y la experimentación. Como esta concepción teórica estuvo acompañada del surgimiento de los primeros laboratorios universitarios, se iniciaron investigaciones acerca de los mecanismos y procesos biológicos.
Según K. B. Madsen, la influencia de Darwin en la psicología de la motivación se hace patente en la obra de W. McDougall, E. I. Thorndike y S. Freud; estos tres autores han influido de manera especial en la formación de marcos conceptuales para el estudio científico del proceso motivacional.
Los autores contemporáneos estudian las variables motivacionales que conducen al logro de la metas propuestas. Últimamente, las hipótesis de las motivaciones de logro tienen mucha aplicación en la satisfacción, en el trabajo y el estudio. Las características básicas de estas investigaciones consiste en que todo organismo busca satisfacer sus necesidades, las cuales están acompañadas de un efecto agradable o desagradable; por consiguiente, el motivo lo forma la parte afectiva del comportamiento, que conduce a la satisfacción de sus necesidades básicas o aprendidas en el proceso de adaptación. Para la psicología precientífica la motivación humana se reducía a la actividad voluntaria, en cambio para la científica existen, por un lado las tendencias, los impulsos y los instintos que dan fuerza al comportamiento llamado motivado y, por otro, las actividades cognoscitivas (asociación de vivencias) que dirigen el comportamiento hacia determinadas metas, por lo que existe un gran número de variables que intervienen en el comportamiento motivado.
J. S. Brown, propuso cuatro criterios para caracterizar un hecho como motivacional; así, una variable se considera como factor motivacional si:
1. Proporciona energía a muy variadas reacciones y las refuerza.
2. El aprendizaje de nuevas reacciones frente a nuevas situaciones depende de ella (por ejemplo: recompensa y castigo).
3. Las variaciones de ella conducen al aumento o disminución de ciertas reacciones.
4. Aparece sola y no existen otras a las cuales se pudiera atribuir la reacción del organismo.
Por consiguiente, la motivación es un concepto genérico (constructo teórico-hipotético) que designa a las variables que no pueden ser inferidas directamente de los estímulos externos, pero que influyen en la dirección, intensidad y coordinación de los modos de comportamiento aislados tendientes a alcanzar determinadas metas; es el conjunto de factores innatos (biológicos) y aprendidos (cognoscitivos, afectivos y sociales) que inician, sostienen o detienen la conducta. En la motivación existen distintos términos para denominar a una misma variable, por ejemplo, instintos, pulsiones, refuerzos, necesidades, emociones, intereses, etc. La motivación es un verdadero constructo para explicar los modos de conexión entre las variables observadas; la motivación es la sucesión de fases continuas de la actividad (comportamiento) del organismo. Dentro de las características del proceso motivacional, podemos decir que, 1) los motivos mueven a los organismos a obrar (de aquí también el término motivación, que proviene del latín moveré ); 2) La activación forma parte esencial del organismo, de igual manera que la direccionalidad del comportamiento hacia determinadas metas e intereses.
Los estudios bibliográficos recientes, hechos por K. B. Madsen, evidencian una gran cantidad de necesidades y las clasifican en dos categorías: motivos primarios y secundarios. El estudio más exhaustivo de las teorías de la motivación lo hizo K. B. Madsen al analizar y sistematizar las teorías propuestas entre 1930 y 1971. El estudio comparativo y sistemático lo hizo con diferentes criterios de clasificación, pero lo más practico, esta formado de la naturaleza de la variable interviniente, es decir, según el constructo motivación Con base en este principio, las teorías de la motivación se clasifican de la siguiente manera:
Ø Teorías neurofisiológicas: instintos, necesidades, pulsiones y todo lo de naturaleza fisiológica.
Ø Teorías conductuales: enfatizan la presencia del constructo motivación llamado refuerzo, espacio vital, expresión del comportamiento,. Etc.
Ø Teorías fenomenológicas o mentalistas: Se considera como la estructura mental del sujeto, una estructura diferencial influenciada por factores socioculturales, o las estructuras conscientes e inconscientes de la personalidad del sujeto motivado.
Las necesidades humanas se han clasificado tradicionalmente en primarias o fisiológicas y secundarias o aprendidas. A estas ultimas se les llama también necesidades sociales. Dentro de las principales teorías de la motivación, se encuentran las siguientes:
1) El psicólogo estadounidense Abraham Maslow diseñó una jerarquía motivacional en seis niveles que, según él explicaban la determinación del comportamiento humano. Este orden de necesidades sería el siguiente:
(1) fisiológicas,
(2) de seguridad,
(3) amor y sentimientos de pertenencia,
(4) prestigio, competencia y estima sociales,
(5) autorrealización, y
(6) curiosidad y necesidad de comprender el mundo circundante.
2) Herzberg, basado en su análisis de trabajo, habla de los factores motivadores e higiénicos como determinantes de la motivación y satisfacción del trabajo.
3) MacClelland et al. Ubica la motivación dentro de una situación afectiva de acercamiento o alejamiento, comportamientos que el sujeto aprende a edad temprana, y desarrolla una metodología para medir las motivaciones de logro, poder y afiliación. Se presentan algunas de las investigaciones sobre las necesidades sociales de logro, poder, afiliación y los procesos en grupo tales como la competencia y la conformidad, así como igualmente las investigaciones realizadas acerca del temor al fracaso y la esperanza de triunfo, la necesidad de aprobación y la dependencia.
La principal crítica a las teorías e investigaciones presentadas, desde el punto de vista del materialismo histórico, es que ignoran las condiciones materiales de vida de los sujetos que participan y de los autores que las desarrollan, ignorancia que da carácter universal a las diferentes necesidades sociales y que, por consiguiente, garantiza el mantenimiento de una jerarquía de necesidades sociales, en el sentido más amplio del término.