LIBRO VII DE BELLO GALLICO
FRAGMENTOS DE LOS ÚLTIMOS CAPÍTULOS DEL LIBRO VII QUE DESCRIBEN LA LUCHA ENTRE CÉSAR Y VERCINGETORIX EN LA TOMA DE ALESIA.
IV.- Simili ratione ibi Vercingetorix, Celtilli filius, summae potentiae adulescens, cuius pater principatum Galliae totius obtinuerat et ob eam causam, quod regnum appetebat, ab civitate erat interfectus, convocatis suis clientibus, facile incendit. Cognito eius consilio, ad arma concurritur.
De la misma suerte aquí Vercingetórix (joven muy poderoso, cuyo padre fue Celtilo el mayor príncipe de toda la Galia, y al fin muerto por su ciudad por querer hacerse rey), convocados sus seguidores, los amotinó fácilmente. Sabido su plan, se recurre a las armas .
LXVIII.- Fugato omni equitatu, Vercingetorix copias, ut pro castris conlocaverat, reduxit, protinusque Alesiam, quod est oppidum Mandubiorum, iter facere coepit, celeriterque impedimenta ex castris educi et se subsequi iussit. Caesar, impedimentis in proximum collem deductis, duabus legionibus praesidio relictis, secutus quantum diei tempus est passum, circiter tribus milibus hostium ex novissimo agmine interfectis, altero die ad Alesiam castra fecit.
Desbaratada toda la caballería, Vercingetórix recogió sus tropas según las tenía ordenadas delante del campamento; y sin detención tomó la vía de Alesia, plaza fuerte de los mandubios, mandado alzar luego los bagajes y conducirlos tras sí. César, puestos a recaudo los suyos en una colina cercana dejadas como escolta dos legiones, siguiendo el alcance cuanto dio de sí el día, muertos al pie de tres mil hombres de la retaguardia enemiga, al otro día levantó el campamento cerca de Alesia.
Perspecto urbis situ perterritisque hostibus, quod equitatu, qua maxime parte exercitus confidebant, erant pulsi, adhortatus ad laborem milites, circunvallare instituit.
Reconocida la situación de la ciudad, y amedrentados los enemigos con la derrota de la caballería, en que ponían su mayor confianza; alentando los soldados al trabajo,
empezó a delinear el cerco fornal de Alesia.
LXIX.- Ipsum erat oppidum Alesia in colle summo, admodum edito loco, ut, nisi obsidione, expugnari non posse videretur. Cuius collis radices duo duabus ex partibus flumina subluebant. Ante id oppidum planities circiter milia passuum III in longitudinem patebat: reliquis ex omnibus partibus colles mediocri interiecto spatio pari altitudinis fastigio oppidum cingebant.
Estaba esta ciudad fundada en la cumbre de un monte muy elevado, de manera que parecía inexpugnable sino por bloqueo. Dos ríos por dos lados bañaban el pie de la montaña. Delante la ciudad se tendía una llanura casi de tres millas a lo largo. Por todas las demás partes la ceñían de trecho en trecho varias colinas de igual altura.
Sub muro, quae pars collis ad orientem solem spectabat, hunc omnem locum copiae Gallorum compleverant fossamque et maceriam sex in altitudinem pedum praeduxerant. Eius munitionis quae ab Romanis instituebatur circuitus XI milia passuum tenebat. Castra opportunis locis erant posita ibique castella viginti tria facta, quibus in castellis interdiu stationes ponebantur, ne qua subito eruptio fieret: haec eadem noctu excubitoribus ac firmis praesidiis tenebantur.
Debajo del muro toda la parte oriental del monte estaba cubierta de tropas de los galos, defendidos de un foso y de una cerca de seis pies de alto. Las trincheras trazadas por los romanos ocupaban once millas de ámbito. Los campamentos estaban dispuestos en lugares convenientes, fortificados con veintitrés baluartes, donde nunca faltaban entre día cuerpos de guardia contra cualquier asalto repentino; por la noche se aseguraba con centinelas y buenas guarniciones.
LXX.- Opere instituto fit equestre proelium in ea planitie, quam intermissam collibus tria milia passuum in longitudinem patere supra demonstravimus. Summa vi ab utrisque contenditur.
Comenzada la obra,se traba un combate ecuestre en aquel valle que por entre las colinas se alargaba tres millas, según dijimos antes. Se combate con sumo esfuerzo por ambas partes.
Laborantibus nostris Caesar Germanos summittit legionesque pro castris constituit, ne qua subito irruptio ab hostium peditatu fiat. Praesidio legionum addito nostris animus augetur: hostes in fugam coniecti se ipsi multitudine impediunt atque angustioribus portis relictis coacervantur.
Afanándose los nuestros, César destaca en su ayuda a los germanos, y pone delante del campamento las legiones, para impedir toda súbita irrupción de la infantería contraria. Con el socorro de las legiones se aviva el coraje de los nuestros. Los enemigos, lanzados a la fugar, se atropellan unos a otros por la muchedumbre y se quedan hacinados a las puertas, demasiado angostas.
Germani acrius usque ad munitiones sequuntur. Fit magna caedes: nonnulli relictis equis fossam transire et maceriam transcendere conantur. Paulum legiones Caesar quas pro vallo constituerat promoveri iubet. Non minus qui intra munitiones erant perturbantur Galli: veniri ad se confestim existimantes ad arma conclamant; nonnulli perterriti in oppidum irrumpunt. Vercingetorix iubet portas claudi, ne castra nudentur. Multis interfectis, compluribus equis captis Germani sese recipiunt.
Tanto más los aguijan los germanos hasta las fortificaciones. Se produce una gran matanza. Algunos, apeándose, intentan saltar el foso y la cerca. César manda dar un avance a las legiones apostadas delante del campamento. No es menor entonces la turbación de los galos que dentro de las fortificaciones estaban. Creyendo que venían derechos a ellos, todos se alarman. Azorados algunos entran de tropel en la plaza. Vercingetórix manda cerrar las puertas, porque no quede sin defensa el campamento. Muertos muchos y cogidos buen número de caballos, los germanos se retiran.
LXXI.- Vercingetorix, priusquam munitiones ab Romanis perficiantur, consilium capit omnem ab se equitatum noctu dimittere. Discedentibus mandat ut suam quisque eorum civitatem adeat omnesque qui per aetatem arma ferre possint ad bellum cogant. Sua in illos merita proponit obtestaturque ut suae salutis rationem habeant neu se optime de communi libertate meritum in cruciatum hostibus dedant. Quod si indiligentiores fuerint, milia hominum delecta octoginta una secum interitura demonstrat. Ratione inita se exigue dierum triginta habere frumentum, sed paulo etiam longius tolerari posse parcendo.
Vercingetórix, antes de que los romanos acabasen de atrincherarse, toma la resolución de despachar una noche toda la caballería, ordenándoles al partir: «Vaya cada cual a su patria y fuerce para la guerra a todos los que tuvieren edad. Represéntales sus méritos para con ellos, y los conjura que tengan cuenta con su vida, y no lo abandonen a la saña cruel de los enemigos para ser despedazado con tormentos, siendo tan benemérito de la pública libertad; que por poco que se descuiden, verán perecer consigo ochenta mil combatientes, la flor de la Galia; que por su cuenta escasamente le quedan víveres para treinta días, bien que podrán durar algunos más cercenando la ración.»
His datis mandatis, qua opus erat intermissum, secunda vigilia silentio equitatum mittit. Frumentum omne ad se referri iubet; capitis poenam eis qui non paruerint constituit: pecus, cuius magna erat copia ab Mandubiis compulsa, viritim distribuit; frumentum parce et paulatim metiri instituit; copias omnes quas pro oppido collocaverat in oppidum recepit. His rationibus auxilia Galliae exspectare et bellum parat administrare.
Con estos encargos despide la caballería sin ruido antes de medianoche por la parte que aun no estaba cerrada con nuestro vallado; manda le traigan todo el trigo, amenazando con pena de muerte a los desobedientes; reparte por cabeza las reses recogidas con abundancia por los mandubios; el pan lo va distribuyendo poco a poco y por tasa. Todas las tropas acampadas delante de la plaza las mete dentro. Tomadas estas providencias, dispone aguardar los refuerzos de la Galia y proseguir así la guerra.
LXXII.- Quibus rebus cognitis ex perfugis et captivis, Caesar haec genera munitionis instituit. Fossam pedum viginti directis lateribus duxit, ut eius fossae solum tantundem pateret quantum summae fossae labra distarent.
Informado César de estos proyectos por los desertores y prisioneros, formó de esta suerte las líneas: Cavó un foso de veinte pies de ancho con las márgenes niveladas, de forma que el suelo fuese igual en anchura al borde.
Reliquas omnes munitiones ab ea fossa pedes quadringentos reduxit, [id] hoc consilio, quoniam tantum esset necessario spatium complexus, nec facile totum corpus corona militum cingeretur, ne de improviso aut noctu ad munitiones hostium multitudo advolaret aut interdiu tela in nostros operi destinatos conicere possent.
Todas las otras fortificaciones las recolocó a una distancia de cuatrocientos píes de este foso, con la intención de que habiendo abarcado por necesidad tanto espacio, no siendo fácil poner cordón de soldados en todas partes, quería evitar los ataques improvisos o nocturnos del enemigo, y entre día los tiros contra los soldados empleados en las obras.
Hoc intermisso spatio duas fossas quindecim pedes latas, eadem altitudine perduxit, quarum interiorem campestribus ac demissis locis aqua ex flumine derivata complevit. Post eas aggerem ac vallum duodecim pedum exstruxit. Huic loricam pinnasque adiecit grandibus cervis eminentibus ad commissuras pluteorum atque aggeris, qui ascensum hostium tardarent, et turres toto opere circumdedit, quae pedes LXXX inter se distarent.
Después de este espacio intermedio abrió don zanjas, anchas de quince pies y de igual de altura; la interior llenó de agua, guiada del río por sitios llanos y bajos. Tras éstas levantó el terraplén y estacada de doce pies, guarnecida con su parapeto y almenas con grandes horquillas a manera de asta de ciervo, sobresalientes entre las junturas de la empalizada, para estorbar al enemigo la subida. Todo el terraplén cercó de cubos, distantes entre sí ochenta pies.
LXXIII.- Erat eodem tempore et materiari et frumentari et tantas munitiones fieri necesse deminutis nostris copiis quae longius ab castris progrediebantur: ac non numquam opera nostra Galli temptare atque eruptionem ex oppido pluribus portis summa vi facere conabantur.
Era forzoso a un tiempo ir a cortar madera, buscar trigo y fabricar tan grandes obras, divididas las tropas, que tal vez se alejaban demasiado de los reales; y los galos no perdían ocasión de atajar nuestras labores, haciendo salidas de la plaza con gran furia por varias puertas.
Quare ad haec rursus opera addendum Caesar putavit, quo minore numero militum munitiones defendi possent. Itaque truncis arborum aut admodum firmis ramis abscisis atque horum delibratis ac praeacutis cacuminibus perpetuae fossae quinos pedes altae ducebantur. Huc illi stipites demissi et ab infimo revincti, ne revelli possent, ab ramis eminebant.
Por lo cual a las mencionadas obras trató César de añadir nuevas, para poder cubrir las trincheras con menos gente. Para esto, cortan troncos de árboles o ramas muy fuertes, acepilladas y bien aguzadas las puntas, se disponían fosas seguidas, cuya hondura era de cinco pies. Aquí se hincaban aquellos leños, y afianzados por el pie para que no pudiesen ser arrancados, sacaban las puntas sobre las enramadas.
Quini erant ordines coniuncti inter se atque implicati; quo qui intraverant, se ipsi acutissimis vallis induebant. Hos cippos appellabant. Ante quos obliquis ordinibus in quincuncem dispositis scrobes tres in altitudinem pedes fodiebantur paulatim angustiore ad infimum fastigio.
Estaban colocados en cinco hileras, tan unidos y enlazados entre sí, que quien allí entraba, él mismo se clavaba con aquellos agudísimos espolones, a que daban el nombre de cepos.Delante de éstos se cavaban unas hoyas puestas en forma de ajedrez, al sesgo, su hondura de tres pies, que poco a poco se iban estrechando hacia abajo..
Huc teretes stipites feminis crassitudine ab summo praeacuti et praeusti demittebantur, ita ut non amplius digitis quattuor ex terra eminerent; simul confirmandi et stabiliendi causa singuli ab infimo solo pedes terra exculcabantur, reliqua pars scrobis ad occultandas insidias viminibus ac virgultis integebatur. Huius generis octoni ordines ducti ternos inter se pedes distabant. Id ex similitudine floris lilium appellabant. Ante haec taleae pedem longae ferreis hamis infixis totae in terram infodiebantur mediocribusque intermissis spatiis omnibus locis disserebantur; quos stimulos nominabant.
Aquí se metían estacas rollizas del grueso del muslo, aguzadas y tostadas sus puntas de arriba, de modo que no saliesen fuera del suelo más de cuatro dedos Asimismo, a fin de asegurarlas y que no se moviesen, cada pie desde el hondón se calzaba con tierra, y para ocultar el ardid se tapaba la boca de la hoya con mimbres y matas. Ocho eran las hileras de este género de hoyas, distantes entre sí tres pies, que llamaban lirios por la semejanza del tamaño de un pie, erizados con púas de hierro, sembrados a trechos por todas partes, con el nombre de abrojos.
LXXIV.- His rebus perfectis regiones secutus quam potuit aequissimas pro loci natura quattuordecim milia passuum complexus pares eiusdem generis munitiones, diversas ab his, contra exteriorem hostem perfecit, ut ne magna quidem multitudine, si ita accidat, munitionum praesidia circumfundi possent; ac ne cum periculo ex castris egredi cogatur, dierum triginta pabulum frumentumque habere omnes convectum iubet.
Concluidas estas trampas, siguiendo las veredas más acomodadas que pudo según la calidad del terreno, abarcando catorce millas, dio traza cómo se hiciesen otras fortificaciones semejantes, vueltas a la otra banda contra les enemigos de fuera, para que ni aun con mucha gente, si llegase el caso de su retirada, pudiesen acordonar las guarniciones de las trincheras, y también porque no se viesen obligados a salir de ellas con riesgo, manda que todos hagan provisión de pan y heno para treinta días.
LXXV.- Dum haec apud Alesiam geruntur, Galli concilio principum indicto non omnes eos qui arma ferre possent, ut censuit Vercingetorix, convocandos statuunt, sed certum numerum cuique ex civitate imperandum, ne tanta multitudine confusa nec moderari nec discernere suos nec frumentandi rationem habere possent. Imperant Aeduis atque eorum clientibus, Segusiavis, Ambivaretis, Aulercis Brannovicibus, Blannoviis, milia XXXV; parem numerum Arvernis adiunctis Eleutetis, Cadurcis, Gabalis, Vellaviis, qui sub imperio Arvernorum esse consuerunt; Sequanis, Senonibus, Biturigibus, Santonis, Rutenis, Carnutibus duodena milia; Bellovacis X; totidem Lemovicibus; octona Pictonibus et Turonis et Parisiis et Helvetiis; [Suessionibus,] Ambianis, Mediomatricis, Petrocoriis, Nerviis, Morinis, Nitiobrigibus quina milia; Aulercis Cenomanis totidem; Atrebatibus [IIII milibus]; Veliocassis, Lexoviis et Aulercis Eburovicibus terna; Rauracis et Boiis bina; [XXX milia] universis civitatibus, quae Oceanum attingunt quaeque eorum consuetudine Armoricae appellantur, quo sunt in numero Curiosolites, Redones, Ambibarii, Caletes, Osismi, Veneti, Lemovices, Venelli. Ex his Bellovaci suum numerum non compleverunt, quod se suo nomine atque arbitrio cum Romanis bellum gesturos dicebant neque cuiusquam imperio obtemperaturos; rogati tamen ab Commio pro eius hospitio duo milia una miserunt.
Mientras iban así las cosas en Alesia, los galos, en una junta de grandes, determinan, no lo que pretendía Vercingetórige, que todos los que fuesen de armas tomar se alistasen, sino que cada nación contribuyese con cierto número de gente; temiendo que con la confusión de tanta chusma, no les sería posible refrenar ni distinguir a los suyos, ni hallar medio de abastecerse. A los eduos y a. sus dependientes los segusianos, ambivaretos, aulercos branovices y branovíos echan la cuota de treinta y cinco mil hombres; igual número a los alvernos y a sus vasallos, que solían ser los eleuteros de Caors, los gabalos y velaunos; a los sens, los sequanos, los de Berri, del Santonge, de Rodes, de Chartres doce mil; a los beoveses diez mil; otros tantos a los lemosines; cada ocho mil a los de Poitiers, de Turs, París y helvios; a los de Soisons, a los amienses, los metenses, los perigordenses, nervios, morinos, nitióbriges a cinco mil; otros tantos a los aulercos de Maine; cuatro mil a los de Artois; a los belocases, lisienses, eulercos eburones cada tres mil; a los rauracos y boyos treinta mil; a seis mil a todas las merindades de la costa del Océano, llamadas en su lenguaje armóricas, a que pertenecen los cornuaille, de Renes, los ambibaros, caletes, osismios, vaneses y únelos. De éstos los beoveses sólo rehusaron contribuir con su cuota, diciendo querían hacer la guerra a los romanos por sí y como les pareciese, sin dependencia de nadie; no obstante, a ruego de Comió y por su amistad, enviaron dos mil hombres.
LXXVI.- (….) Tamen tanta universae Galliae consensio fuit libertatis vindicandae et pristinae belli laudis recuperandae, ut neque beneficiis neque amicitiae memoria moverentur, omnesque et animo et opibus in id bellum incumberent. Coactis equitum VIII milibus et peditum circiter CCL haec in Aeduorum finibus recensebantur, numerusque inibatur, praefecti constituebantur. Commio Atrebati, Viridomaro et Eporedorigi Aeduis, Vercassivellauno Arverno, consobrino Vercingetorigis, summa imperi traditur. His delecti ex civitatibus attribuuntur, quorum consilio bellum administraretur.
. Pero fue tan universal la conspiración de toda la Galia en orden a defender su libertad y recuperar su primera gloria militar, que ninguna fuerza les hacían ni los beneficios recibidos ni las obligaciones de amigos, sino que todos, con todo su corazón y con todas sus fuerzas, se armaban para esta guerra, en que se contaban ocho mil caballos y cerca de doscientos cuarenta mil infantes. Hacíase la masa del ejército y la revista general en las fronteras de los eduos; nombrábanse capitanes; fíase todo el peso del gobierno a Comió el de Artois, a los eduos Virdomaro y Eporedórige, a Vergasilauno Alverno, primo de Vercingetórige, dándoles por consejeros varones escogidos de todos los Estados.
Omnes alacres et fiduciae pleni ad Alesiam proficiscuntur, neque erat omnium quisquam qui aspectum modo tantae multitudinis sustineri posse arbitraretur, praesertim ancipiti proelio, cum ex oppido eruptione pugnaretur, foris tantae copiae equitatus peditatusque cernerentur.
Alborozados todos y llenos de confianza, van camino de Alesia. Ni había entre todos uno solo que pensase hallar quien se atreviese a sufrir ni aun la vista de tan numeroso ejército y más estando entre dos fuegos: de la plaza con las salidas; de fuera con el terror de tantas tropas de a caballo y de a pie.
LXXVII.- At ei, qui Alesiae obsidebantur praeterita die, qua auxilia suorum exspectaverant, consumpto omni frumento, inscii quid in Aeduis gereretur, concilio coacto de exitu suarum fortunarum consultabant. Ac variis dictis sententiis, quarum pars deditionem, pars, dum vires suppeterent, eruptionem censebat, non praetereunda oratio Critognati videtur propter eius singularem et nefariam crudelitatem.
Pero los sitiados de Alesia, pasado el plazo en que aguardaban el socorro, consumidos todos los víveres, ignorantes de lo que se trataba en los eduos, juntándose a consejo, consultaban acerca del remedio de sus desventuras. Entre los varios partidos propuestos, inclinándose unos a la entrega, otros a una salida mientras se hallaban con fuerzas, no me pareció pasar en silencio el que promovió Critoñato por su inaudita y bárbara crueldad.
Hic summo in Arvernis ortus loco et magnae habitus auctoritatis, "Nihil," inquit, "de eorum sententia dicturus sum, qui turpissimam servitutem deditionis nomine appellant, neque hos habendos civium loco neque ad concilium adhibendos censeo. Cum his mihi res sit, qui eruptionem probant; quorum in consilio omnium vestrum consensu pristinae residere virtutis memoria videtur. Animi est ista mollitia, non virtus, paulisper inopiam ferre non posse. Qui se ultro morti offerant facilius reperiuntur quam qui dolorem patienter ferant.
Éste, nacido en Albernia de nobilísimo linaje y tenido por hombre de grande autoridad: «Ni tomar quiero en boca, dice, el parecer de aquellos que llaman entrega la más infame servidumbre; estos tales para mí no son ciudadanos ni deben ser admitidos a consejo. Hablo sí con los que aconsejan la salida; cuyo dictamen a juicio de todos vosotros parece más conforme a la hidalguía de nuestro valor heredado. Mas yo no tengo por valor sino por flaqueza el no poder sufrir un tanto la carestía. Más fácil es hallar quien se ofrezca de grado a la muerte que quien sufra con paciencia el dolor.
Atque ego hanc sententiam probarem (tantum apud me dignitas potest), si nullam praeterquam vitae nostrae iacturam fieri viderem: sed in consilio capiendo omnem Galliam respiciamus, quam ad nostrum auxilium concitavimus. Quid hominum milibus LXXX uno loco interfectis propinquis consanguineisque nostris animi fore existimatis, si paene in ipsis cadaveribus proelio decertare cogentur?
Yo por mí aceptaría este partido por lo mucho que aprecio la honra, si viese que sólo se arriesga en él nuestra vida, pero antes de resolvernos, volvamos los ojos a la Galia, la cual tenemos toda empeñada en nuestro socorro. ¿Cuál, si pensáis, será la consternación de nuestros allegados y parientes al ver tendidos en tierra ochenta mil ciudadanos, y haber por fuerza de pelear entre sus mismos cadáveres?
Nolite hos vestro auxilio exspoliare, qui vestrae salutis causa suum periculum neglexerunt, nec stultitia ac temeritate vestra aut animi imbecillitate omnem Galliam prosternere et perpetuae servituti subicere. An, quod ad diem non venerunt, de eorum fide constantiaque dubitatis?
No queráis, os ruego, privar del auxilio de vuestro brazo a los que por salvar vuestras vidas han aventurado las suyas, ni arruinar a toda la Galia condenándola a perpetua esclavitud por vuestra inconsideración y temeridad, o mejor diré, por vuestra cobardía. ¿Acaso dudáis de su lealtad y firmeza porque no han venido al plazo señalado?
Quid ergo? Romanos in illis ulterioribus munitionibus animine causa cotidie exerceri putatis? Si illorum nuntiis confirmari non potestis omni aditu praesaepto, his utimini testibus appropinquare eorum adventum; cuius rei timore exterriti diem noctemque in opere versantur. Quid ergo mei consili est?
¿Cómo? ¿Creéis que los romanos se afanan tanto en hacer aquellas líneas de circunvalación por mero entretenimiento? Si no podéis haber nuevas de ellos, cerradas todas las vías, recibid de su próxima venida el anuncio de los mismos enemigos, que con el temor de ser sobresaltados no cesan de trabajar día y noche. Dime: pues, ¿qué aconsejas tú?
Facere, quod nostri maiores nequaquam pari bello Cimbrorum Teutonumque fecerunt; qui in oppida compulsi ac simili inopia subacti eorum corporibus qui aetate ad bellum inutiles videbantur vitam toleraverunt neque se hostibus tradiderunt. Cuius rei si exemplum non haberemus, tamen libertatis causa institui et posteris prodi pulcherrimum iudicarem. Nam quid illi simile bello fuit?
Que se haga lo que ya hicieron nuestros mayores en la guerra de los cimbros y teutones, harto diferente de ésta; que sitiados y apretados de semejante necesidad, sustentaron su vida con la carne de la gente a su parecer inútil para la guerra, por no rendirse a los enemigos. Aunque no tuviéramos ejemplo de esto, yo juzgaría cosa muy loable el darlo por amor de la libertad para imitación de los venideros. Y ¿qué tuvo que ver aquella guerra con ésta?
Depopulata Gallia Cimbri magnaque illata calamitate finibus quidem nostris aliquando excesserunt atque alias terras petierunt; iura, leges, agros, libertatem nobis reliquerunt. Romani vero quid petunt aliud aut quid volunt, nisi invidia adducti, quos fama nobiles potentesque bello cognoverunt, horum in agris civitatibusque considere atque his aeternam iniungere servitutem? Neque enim ulla alia condicione bella gesserunt. Quod si ea quae in longinquis nationibus geruntur ignoratis, respicite finitimam Galliam, quae in provinciam redacta iure et legibus commutatis securibus subiecta perpetua premitur servitute."
Los cimbros, saqueada toda la Galia y hechos grandes estragos, al fin salieron de nuestras tierras y marcharon a otras, dejándonos nuestros fueros, leyes, posesiones y libertad; mas los romanos, ¿qué otra cosa pretenden o quieren, sino por envidia de nuestra gloria y superioridad experimentada en las armas, usurparnos las heredades y poblaciones, y sentenciarnos a eterna servidumbre, puesto que nunca hicieron a otro precio la guerra? Y si ignoráis qué sucedió a las naciones lejanas, ahí tenéis vecina la Galia, que convertida en provincia suya, mudado el gobierno, sujeta a su tiranía, gime bajo el yugo de perpetua servidumbre”.
LXXVIII.- Sententiis dictis constituunt ut ei qui valetudine aut aetate inutiles sunt bello oppido excedant, atque omnia prius experiantur, quam ad Critognati sententiam descendant: illo tamen potius utendum consilio, si res cogat atque auxilia morentur, quam aut deditionis aut pacis subeundam condicionem. Mandubii, qui eos oppido receperant, cum liberis atque uxoribus exire coguntur. Hi, cum ad munitiones Romanorum accessissent, flentes omnibus precibus orabant, ut se in servitutem receptos cibo iuvarent. At Caesar dispositis in vallo custodibus recipi prohibebat.
Tomados los votos, deciden «que los inútiles por sus ajes o edad despejen la plaza, y que se pruebe todo primero que seguir el consejo de Critoñato; pero a más no poder, si tarda el socorro, se abrase, antes que admitir condición alguna de rendición o de paz». Los mandubios, que los habían recibido en la ciudad, son echados fuera con sus hijos y mujeres. Los cuales arrimados a las trincheras de los romanos, deshechos en lágrimas, les pedían rendidamente que les diesen un pedazo de pan y serían sus esclavos. Mas César, poniendo guardias en la barrera, no quería darles cuartel.
LXXIX.- Interea Commius reliquique duces quibus summa imperi permissa erat cum omnibus copiis ad Alesiam perveniunt et colle exteriore occupato non longius mille passibus ab nostris munitionibus considunt. Postero die equitatu ex castris educto omnem eam planitiem, quam in longitudinem tria milia passuum patere demonstravimus, complent pedestresque copias paulum ab eo loco abditas in locis superioribus constituunt.
Entre tanto Comió y los demás comandantes llegan con todas sus tropas a la vista de Alesia, y ocupada la colina de afuera, se acampan a media milla de nuestras fortificaciones. Al día siguiente, sacando la caballería de los reales, cubren toda aquella vega, que, como se ha dicho, tenía de largo tres millas, y colocan la infantería detrás de este sitio en los recuestos.
Erat ex oppido Alesia despectus in campum. Concurrunt his auxiliis visis; fit gratulatio inter eos, atque omnium animi ad laetitiam excitantur. Itaque productis copiis ante oppidum considunt et proximam fossam cratibus integunt atque aggere explent seque ad eruptionem atque omnes casus comparant.
Las vistas de Alesia caían al campo. Visto el socorro, se buscan unos a otros; se saludan, rebosando todos de alegría. Salen, pues, armados de punta en blanco, y se plantan delante de la plaza; llenan de zarzo y tierra el foso inmediato, con que se disponen para el ataque y cualquier otro trance.
LXXX.- Caesar omni exercitu ad utramque partem munitionum disposito, ut, si usus veniat, suum quisque locum teneat et noverit, equitatum ex castris educi et proelium committi iubet. Erat ex omnibus castris, quae summum undique iugum tenebant, despectus, atque omnes milites intenti pugnae proventum exspectabant.
César, distribuido el ejército por las dos bandas de las trincheras de suerte que cada cual en el lance pudiese conocer y guardar su puesto, echa fuera la caballería con orden de acometer. De todos los campamentos que ocupaban los cerros de toda aquella cordillera se descubría el campo de batalla, y todos los soldados estaban en grande expectación del suceso.
Galli inter equites raros sagittarios expeditosque levis armaturae interiecerant, qui suis cedentibus auxilio succurrerent et nostrorum equitum impetus sustinerent. Ab his complures de improviso vulnerati proelio excedebant. Cum suos pugna superiores esse Galli confiderent et nostros multitudine premi viderent, ex omnibus partibus et ei qui munitionibus continebantur et hi qui ad auxilium convenerant clamore et ululatu suorum animos confirmabant.
Los galos habían entre los caballos mezclado a trechos flecheros y volantes armados a la ligera, que los protegiesen al retroceder y contuviesen el ímpetu de los nuestros. Por estos tales heridos al improviso, varios se iban retirando del combate. Con eso los galos, animados por la ventaja de los suyos y viendo a los nuestros cargados de la muchedumbre, tanto los sitiados como las tropas auxiliares con gritos y alaridos atizaban por todas partes el coraje de los suyos.
Quod in conspectu omnium res gerebatur neque recte ac turpiter factum celari poterat, utrosque et laudis cupiditas et timor ignominiae ad virtutem excitabant. Cum a meridie prope ad solis occasum dubia victoria pugnaretur, Germani una in parte confertis turmis in hostes impetum fecerunt eosque propulerunt; quibus in fugam coniectis sagittarii circumventi interfectique sunt. Item ex reliquis partibus nostri cedentes usque ad castra insecuti sui colligendi facultatem non dederunt. At ei qui ab Alesia processerant maesti prope victoria desperata se in oppidum receperunt.
Como estaban a la vista de todos, que no se podía encubrir acción alguna o bien o mal hecha, a los unos y a los otros daba bríos no menos el amor de la gloria que el temor de la ignominia. Continuándose la pelea desde mediodía hasta ponerse el sol con la victoria en balanzas, los germanos, cerrados en pelotones arremetieron de golpe y rechazaron a los enemigos, por cuya fuga los flecheros fueron cercados y muertos. En tanto los nuestros persiguiendo por las demás partes a los fugitivos hasta sus reales, no les dieron lugar a rehacerse. Entonces los que habían salido fuera de la plaza, perdida la esperanza de la victoria, se recogieron muy tristes adentro.
LXXXI.- Vno die intermisso Galli atque hoc spatio magno cratium, scalarum, harpagonum numero effecto media nocte silentio ex castris egressi ad campestres munitiones accedunt. Subito clamore sublato, qua significatione qui in oppido obsidebantur de suo adventu cognoscere possent, crates proicere, fundis, sagittis, lapidibus nostros de vallo proturbare reliquaque quae ad oppugnationem pertinent parant administrare. Eodem tempore clamore exaudito dat tuba signum suis Vercingetorix atque ex oppido educit.
Un día estuvieron los galos sin pelear, gastándolo todo en aparejar gran número de zarzos, escalas, garabatos, con que saliendo a medianoche a sordas de los reales, se fueron arrimando a la línea de circunvalación, y de repente alzando una gran gritería que sirviese a los sitiados por seña de su acometida, empiezan a tirar zarzos, y con hondas, saetas y piedras a derribar de las barreras a los nuestros y aprestar los demás instrumentos para el asalto. Al mismo punto Vercingetórix, oída la grita, toca a rebato, y saca su gente de Alesia.
Nostri, ut superioribus diebus, ut cuique erat locus attributus, ad munitiones accedunt; fundis librilibus sudibusque quas in opere disposuerant ac glandibus Gallos proterrent. Prospectu tenebris adempto multa utrimque vulnera accipiuntur. Complura tormentis tela coniciuntur.
De los nuestros cada cual corre al puesto que de antemano le estaba señalado en las trincheras, donde con hondas que arrojaban piedras de a libra, con espontones puestos a mano y con balas de plomo arredran al enemigo. Los golpes dados y recibidos eran a ciegas por la oscuridad de la noche; muchos los tiros de las baterías.
At Marcus Antonius et Gaius Trebonius legati, quibus hae partes ad defendendum obvenerant, qua ex parte nostros premi intellexerant, his auxilio ex ulterioribus castellis deductos summittebant.
Pero los legados Marco Antonio y Cayo Trebonio, encargados de la defensa por esta parte, donde veían ser mayor el peligro de los nuestros, iban destacando en su ayuda de los fortines de la otra soldados de refresco.
LXXXII.- Dum longius ab munitione aberant Galli, plus multitudine telorum proficiebant; posteaquam propius successerunt, aut se stimulis inopinantes induebant aut in scrobes delati transfodiebantur aut ex vallo ac turribus traiecti pilis muralibus interibant. Multis undique vulneribus acceptis nulla munitione perrupta, cum lux appeteret, veriti ne ab latere aperto ex superioribus castris eruptione circumvenirentur, se ad suos receperunt.
Mientras los galos disparaban de lejos, hacían más efecto con la gran cantidad de tiros; después que se fueron arrimando a las líneas, o se clavaban con los abrojos, o caídos en las hoyas quedaban empalados en las estacas, o atravesados desde las barreras y torres con los rejones, rendían el alma. En fin, recibidas de todas partes muchas heridas, sin poder abrir una brecha, rayando ya el día, por miedo de ser cogidos por el flanco de las tropas de la cuesta, tocaron retirada.
At interiores, dum ea quae a Vercingetorige ad eruptionem praeparata erant proferunt, priores fossas explent, diutius in his rebus administrandis morati prius suos discessisse cognoverunt, quam munitionibus appropinquarent. Ita re infecta in oppidum reverterunt.
En esto los de la plaza, mientras andan afanados en manejar las máquinas preparadas por Vercingetórix para el asalto, en cegar los primeros fosos, gastado gran rato en tales maniobras, entendieron la retirada de los suyos antes de haberse acercado ellos a nuestras fortificaciones. Así volvieron a la plaza sin hacer cosa de provecho.
LXXXIII.- Bis magno cum detrimento repulsi Galli quid agant consulunt; locorum peritos adhibent: ex his superiorum castrorum situs munitionesque cognoscunt. Erat a septentrionibus collis, quem propter magnitudinem circuitus opere circumplecti non potuerant nostri: necessario paene iniquo loco et leniter declivi castra fecerunt. Haec Gaius Antistius Reginus et Gaius Caninius Rebilus legati cum duabus legionibus obtinebant.
LXXXIII. Rebatidos por dos veces con pérdida los galos, deliberan sobre lo que conviene hacer. Consultan con los prácticos del país. Infórmanse de ellos sobre la posición y fortificaciones de nuestro campamento de arriba. Yacía por la banda septentrional una colina que, no pudiendo abrazarla con el cordón los nuestros por su gran circunferencia, se vieron forzados a fijar sus estancias en sitio menos igual y algún tanto costanero. Guardábanlas los legados Cayo Antistio Regino y Cayo Caninio Rehilo con dos legiones.
Cognitis per exploratores regionibus duces hostium LX milia ex omni numero deligunt earum civitatum quae maximam virtutis opinionem habebant; quid quoque pacto agi placeat occulte inter se constituunt; adeundi tempus definiunt, cum meridies esse videatur. His copiis Vercassivellaunum Arvernum, unum ex quattuor ducibus, propinquum Vercingetorigis, praeficiunt. Ille ex castris prima vigilia egressus prope confecto sub lucem itinere post montem se occultavit militesque ex nocturno labore sese reficere iussit. Cum iam meridies appropinquare videretur, ad ea castra quae supra demonstravimus contendit; eodemque tempore equitatus ad campestres munitiones accedere et reliquae copiae pro castris sese ostendere coeperunt.
Conocidas las zonas por los exploradores, los jefes enemigos entresacan cincuenta y cinco mil combatientes de las tropas de aquellas naciones que corrían con mayor fama de valerosas, y forman entre sí en secreto el plan de operaciones. Determinan para la empresa la hora del mediodía, y nombran por cabo de la facción a Vergasilauno Alverno, uno de los cuatro generales, pariente de Vercingetórige. Sale, pues, de los reales a prima noche, y terminada su marcha cerca del amanecer, se oculta tras del monte, y ordena a los soldados que descansen sobre los reales arriba mencionados, y a la misma hora empieza la caballería a desfilar hacia las trincheras del llano, y el resto del ejército a escuadronarse delante de sus tiendas.
LXXXIV.- Vercingetorix ex arce Alesiae suos conspicatus ex oppido egreditur; crates, longurios, musculos, falces reliquaque quae eruptionis causa paraverat profert. Pugnatur uno tempore omnibus locis, atque omnia temptantur: quae minime visa pars firma est, huc concurritur.
Vercingetórix, avistando desde el alcázar de Alesia a los suyos, sale de la plaza, llevando consigo zarzas, puntales, árganos, hoces y las demás baterías aparejadas para forzar las trincheras. Embisten a un tiempo por todas partes, y hacen todos los esfuerzos posibles. Si ven algún sitio menos pertrechado, allá se abalanzan.
Romanorum manus tantis munitionibus distinetur nec facile pluribus locis occurrit. Multum ad terrendos nostros valet clamor, qui post tergum pugnantibus exstitit, quod suum periculum in aliena vident salute constare: omnia enim plerumque quae absunt vehementius hominum mentes perturbant.
La tropa de los romanos se halla embarazada con tantas fortificaciones, ni es fácil acudir a un tiempo a tan diversos lugares. Mucho contribuyó al terror de los nuestros la vocería que sintieron en el combate a las espaldas, midiendo su peligro por el ajeno orgullo. Y es así, que los objetos distantes hacen de ordinario más vehemente impresión en los pechos humanos.
LXXXV.- Caesar idoneum locum nactus quid quaque ex parte geratur cognoscit; laborantibus summittit. Vtrisque ad animum occurrit unum esse illud tempus, quo maxime contendi conveniat: Galli, nisi perfregerint munitiones, de omni salute desperant; Romani, si rem obtinuerint, finem laborum omnium exspectant. Maxime ad superiores munitiones laboratur, quo Vercassivellaunum missum demonstravimus. Iniquum loci ad declivitatem fastigium magnum habet momentum. Alii tela coniciunt, alii testudine facta subeunt; defatigatis in vicem integri succedunt. Agger ab universis in munitionem coniectus et ascensum dat Gallis et ea quae in terra occultaverant Romani contegit; nec iam arma nostris nec vires suppetunt.
LXXXV. César, desde un alto, registra cuanto pasa y refuerza a los que peligran. Unos y otros se hacen la cuenta de ser ésta la ocasión en que se debe echar el resto. Los galos si no fuerzan las trincheras, se dan por perdidos; los romanos con la victoria esperan poner fin a todos sus trabajos. Su mayor peligro era en los puestos de defensa altos, atacados, según referimos, por Vergasilauno. Un pequeño recuesto cogido favorece mucho a los contrarios. Desde allí unos arrojan dardos; otros avanzan empavesados; rendidos unos, suceden otros de refresco. La fagina, que todos a una echan contra la estacada, así facilita el paso a los galos, como inutiliza los pertrechos que tenían tapados en tierra los romanos. Ya no pueden más los nuestros, faltos de armas y fuerzas.
LXXXVI.- His rebus cognitis Caesar Labienum cum cohortibus sex subsidio laborantibus mittit: imperat, si sustinere non posset, deductis cohortibus eruptione pugnaret; id nisi necessario ne faciat. Ipse adit reliquos, cohortatur ne labori succumbant; omnium superiorum dimicationum fructum in eo die atque hora docet consistere. Interiores desperatis campestribus locis propter magnitudinem munitionum loca praerupta ex ascensu temptant: huc ea quae paraverant conferunt. Multitudine telorum ex turribus propugnantes deturbant, aggere et cratibus fossas explent, falcibus vallum ac loricam rescindunt.
En vista de esto, César destaca en su amparo a Labieno con seis cohortes; ordénale que si dentro no puede sufrir la carga, rompa fuera arremetiendo con su gente; pero no lo haga sino como último recurso. Él mismo va recorriendo las demás líneas, esforzando a todos a que no desfallezcan; que aquél era el día y la hora de recoger el fruto de tantos sudores. Los de la plaza, desconfiando de abrir brecha en las trincheras del llano por razón de su extensión tan vasta, trepan lugares escarpados, donde ponen su armería, con el granizo de flechas derriban de las torres a los defensores; con terrones y zarzos allanan el camino; con las hoces destruyen estacada y parapetos.
LXXXVII.- Mittit primo Brutum adulescentem cum cohortibus Caesar, post cum aliis Gaium Fabium legatum; postremo ipse, cum vehementius pugnaretur, integros subsidio adducit. Restituto proelio ac repulsis hostibus eo quo Labienum miserat contendit; cohortes quattuor ex proximo castello deducit, equitum partem sequi, partem circumire exteriores munitiones et ab tergo hostes adoriri iubet. Labienus, postquam neque aggeres neque fossae vim hostium sustinere poterant, coactis una XL cohortibus, quas ex proximis praesidus deductas fors obtulit, Caesarem per nuntios facit certiorem quid faciendum existimet. Accelerat Caesar, ut proelio intersit.
César destaca primero al joven Bruto con seis cohortes, y tras él al legado Fabio con otras siete. Por último, él mismo en persona, arreciándose más la pelea, acude con nuevos refuerzos. Reintegrado el combate, y rechazados los enemigos, corre a unirse con Labieno. Saca del baluarte inmediato cuatro cohortes. A una parte de la caballería ordena que le siga; otra, que rodeando la línea de circunvalación, acometa por las espaldas al enemigo. Labieno, visto que ni estacadas ni fosos eran bastantes a contener su furia, juntando treinta y nueve cohortes, que por dicha (137) se le presentaron de los baluartes más cercanos, da parte a César de lo que pensaba ejecutar. César viene a toda prisa, por hallarse presente a la batalla.
LXXXVIII.- Eius adventu ex colore vestitus cognito, quo insigni in proeliis uti consuerat, turmisque equitum et cohortibus visis quas se sequi iusserat, ut de locis superioribus haec declivia et devexa cernebantur, hostes proelium committunt. Vtrimque clamore sublato excipit rursus ex vallo atque omnibus munitionibus clamor. Nostri omissis pilis gladiis rem gerunt. Repente post tergum equitatus cernitur; cohortes aliae appropinquant. Hostes terga vertunt; fugientibus equites occurrunt. Fit magna caedes. Sedulius, dux et princeps Lemovicum, occiditur; Vercassivellaunus Arvernus vivus in fuga comprehenditur; signa militaria septuaginta quattuor ad Caesarem referuntur: pauci ex tanto numero se incolumes in castra recipiunt.
No bien hubo llegado, cuando fue conocido por la vistosa sobreveste que solía traer en las batallas; vistos también los escuadrones de caballería y el cuerpo de infantería que venía tras él por su orden (pues se descubría desde lo alto lo que pasaba en la bajada de la cuesta), los enemigos traban combate. Alzado de ambas partes el grito, responden al eco iguales clamores del vallado y de todos los bastiones. Los nuestros, tirados sus dardos, echan mano de la espada. Déjase ver de repente la caballería sobre el enemigo. Avanzan las otras cohortes; los enemigos echan a huir, y en la huida encuentran con la caballería. Es grande la matanza. Sedulio, caudillo y príncipe de los limosines, es muerto; Vergasilauno, en la fuga, preso vivo; setenta y cuatro banderas presentadas a César; pocos los que de tanta muchedumbre vuelven sin lesión a los campamentos.
Conspicati ex oppido caedem et fugam suorum desperata salute copias a munitionibus reducunt. Fit protinus hac re audita ex castris Gallorum fuga. Quod nisi crebris subsidiis ac totius diei labore milites essent defessi, omnes hostium copiae deleri potuissent. De media nocte missus equitatus novissimum agmen consequitur: magnus numerus capitur atque interficitur; reliqui ex fuga in civitates discedunt.
Viendo desde la plaza el estrago y derrota de los suyos, desesperados de salvarse, retiran sus tropas de las trincheras. Entendido esto, sin más aguardar los galos desamparan sus reales. Y fue cosa que a no estar los nuestros rendidos de tanto correr a reforzar los puestos y del trabajo de todo el día, no hubieran dejado hombre con vida. Sobre la medianoche, destacada la caballería, dio alcance a su retaguardia prendiendo y matando a muchos; los demás huyen a sus tierras.
LXXXIX.- Postero die Vercingetorix concilio convocato id bellum se suscepisse non suarum necessitatium, sed communis libertatis causa demonstrat, et quoniam sit fortunae cedendum, ad utramque rem se illis offerre, seu morte sua Romanis satisfacere seu vivum tradere velint. Mittuntur de his rebus ad Caesarem legati. Iubet arma tradi, principes produci. Ipse in munitione pro castris consedit: eo duces producuntur; Vercingetorix deditur, arma proiciuntur. Reservatis Aeduis atque Arvernis, si per eos civitates reciperare posset, ex reliquis captivis toto exercitui capita singula praedae nomine distribuit.
Al otro día Vercingetórix, convocada su gente, protesta «no haber emprendido él esta guerra por sus propios intereses, sino por la defensa de la común libertad; mas ya que es forzoso ceder a la fortuna, él está pronto a que lo sacrifiquen, o dándole, si quieren, la muerte o entregándolo vivo a los romanos para satisfacerles», Despachan diputados a César, Mándales entregar las armas y las cabezas de partido. Él puso su pabellón en un baluarte delante los reales. Aquí se le presentan los generales. Vecingetórige es entregado. Arrojan a sus pies las armas. Reservando los eduos y alvernos a fin de valerse de ellos para recobrar sus Estados, de los demás cautivos da uno a cada soldado a título de despojo.
XC.- His rebus confectis in Aeduos proficiscitur; civitatem recipit. Eo legati ab Arvernis missi quae imperaret se facturos pollicentur. Imperat magnum numerum obsidum. Legiones in hiberna mittit. Captivorum circiter viginti milia Aeduis Arvernisque reddit. Titum Labienum duabus cum legionibus et equitatu in Sequanos proficisci iubet: huic Marcum Sempronium Rutilum attribuit. Gaium Fabium legatum et Lucium Minucium Basilum cum legionibus duabus in Remis collocat, ne quam ab finitimis Bellovacis calamitatem accipiant.
Hecho esto, marcha a los eduos, y se le rinden. Allí recibe embajadores de los alvernos que se ofrecen a estar en todo a su obediencia. Mándales dar gran número de rehenes. Restituye cerca de veinte mil prisioneros a los eduos y alvernos. Envía las legiones a cuarteles de invierno. A Tito Labieno manda ir con dos y la caballería a los secuanos, dándole por ayudante a Marco Sempronio Rutilo. A Cayo Fabio y a Lucio Minucio Basilo aloja con dos legiones en los remenses, para defenderlos de toda invasión contra los beoveses sus fronterizos.
Gaium Antistium Reginum in Ambivaretos, Titum Sextium in Bituriges, Gaium Caninium Rebilum in Rutenos cum singulis legionibus mittit. Quintum Tullium Ciceronem et Publium Sulpicium Cabilloni et Matiscone in Aeduis ad Ararim rei frumentariae causa collocat. Ipse Bibracte hiemare constituit. His litteris cognitis Romae dierum viginti supplicatio redditur.
A Cayo Antistio Regino remite a los ambivaretos; a Tito Sestio a los berrienses; a Cayo Caninio Rebilo a los rodenses, cada uno con su legión. A Quinto Tulio Cicerón y a Publio Sulpicio acuartela en Chalóns y Macón, ciudades de los eduos a las riberas del Arar, para el acopio y conducción del trigo. Él determina pasar el invierno en Bilbracte. Sabidos estos sucesos por cartas de César, se mandan celebrar en Roma fiestas por veinte días.