Pasos d’ Aprendiz – Akumulados
Por: Luix Flow (Inspirado en otros Lados)
*periodísticas secuelas de un viaje veloz al Sol*
-FICCIÓN-
Todo comenzó en La Tagua… estaba detenido en los planos de un tiempo lineal, rodeado de paredes mentales con esquemas demasiado regidos por el ego y el temor foráneo a todo ello, pero con la obligación de aprender lo que debía de aprender para que la Sierra me diera el permiso para escalar mas entre ella.
Veo y camino laderas que me renacen el deseo de volver a pintar, inspiración que se me pierde cuando ando demasiado entre humanos… los vientos traían las nubes que bajaban apresuradas, como ejercito de soldados de aguas entre los vacios de las cañadas que dejan las montañas entre sí para poder respirar los soplos que les manda el Creador… estaba metido en esta observación mientras me deslizaba por los filos y los picos, untándome del barro rojo de La Tagua afirmando así, que sí querré volver algún día cuando se hayan marchado los enemigos del tiempo, y luego de haber bajado al cemento gris y ver otra vez a la gente cercana.
Las amapolas del cielo
Las aves que surcan el espacio
Los animales terrestres
La cantidad de sonidos diversos
La mirada de esperanza de los seres menos avanzados
El silencio que suelta el infinito
Los seres invisibles que de allá observan
Las naves de estos seres invisibles
El cerrar de los ojos y el mirar interno
El universo eterno por dentro en luz
El verde y las flores en la distancia
Los paisajes de cada día diferentes
El nuevo saber y el nuevo conocimiento
La agonía sepultada en el pasado
Un mirar basado en fundamento eterno
Una voz que por dentro me habla
Un mundo de seres humanos afuera
Unos corren, otros vuelan
…pero solo uno de cada mil, busca.
Ya no existen canciones que llamo mías, ya no me pego a poemas de romance, ya no canto en dolor o alegría… hoy, el llanto del alma pide la luz, la misma que desde el principio de las Creaciones en una mirada de Amor creó al Espíritu femenino que se expande… es la Luz que me llama, por ella gimo.
Las montañas silenciosas, esperan. El mar en calma, sabe lo que se viene; los arboles sin viento cuentan los días. El aire que respiro cada día cambia y las conciencias comienzan a mutar… muta el alma, muta la mente y mutan los huesos; cambia el color de mi mirar, cambia el ADN de mi sangre y me convierto en reencarnación de otra era, de un Día de Creación diferente, de un planeta con el eje en otra dirección, en una dimensión completamente fresca.
Camino al pueblito de la Sierra Nevada y ningún ser humano externo, me percibe… me hace sentir solo, me da tristeza… y a veces, llégame una angustia existencial que divide mi corazón y la mitad de él sangra. Pero como el centro de mis células vive y se alimenta de la sangre del Eterno, entonces miro al sol, miro el atardecer Samario, y me da lo mismo si estoy acá, en Salento, o en alto Pance.
Juegos parsimoniosos del tiempo, buscando su conclusión profética; el credo de los Procreadores Superiores esta ebullendo las conciencias de los hombres libres –el canto de la naturaleza lo confirma, no es un canto de amor, es una oda de despedida a una civilización que nunca funciono bien, acojada en sus propias concupiscencias, al punto que precipito el corazón de la tierra a aligerar sus pulsaciones con el Cristal del amor Altísimo, para llevarnos hacia la cúspide de una nueva era… no estoy diciendo que no amo, digo, es que vivo ahora dentro la casa del amor galáctico, universal de Luz… amo también a otros sistemas solares y sus habitantes que esperan que unamos nuestro canto con la sinfonía de ellos… es inevitable y percibo sus colores diferentes e invisibles en esa dirección del amor que deseo visitar; y no estoy diciendo que no me saca brillo una mirada terrestre, me hace hasta sonreír aunque esté bien serio y enjuto en pensamientos divididos… al final de la epístola, aun estoy acá.
Caminos del fin, llenos de Gólgotas sin luz, caminos en veredas de un planeta cambiante que no se deja dañar su curso, ni se deja llevar al patíbulo de su destrucción… la vida de ese planeta, y el concepto de vida para él, es lo más indispensable en su bamboleo por entre la marea del océano de la creación. Los planeticas todos siendo halados dentro de su propia danza por el sol central del universo; los colores van y vienen en constante cambio y sonríen mientras pasan por mi lado, siento el empuje de los palpitares de mi corazón al unísono con los de la Tierra, aprovechando que estoy vivo entre el armonioso y complejo misterio de la Creación que percibo.
Ahora los caminos ya no conducen a Roma, porque esa ciudad quedo sepultada bajo el mar, ya no se escuchan las voces del centrado papal, todo el vaticinio se desmembró y se cumple la Ley del Altísimo sobre paisajes al derredor… soy caminante y hago camino al ser empujado por las estrellas que me llaman… mi simiente no es de acá, vengo cabalgando de otros aires y cielos, mi montura es astral y mi caballo es alado, vuela como nave de cristal que resplandece… vivo la existencia de mi conciencia interna reflejada en el infinito… no me detengo a escuchar lamentos, ni a sentir tus temores… en mi caminar del fin, te veo lejana del Amor.
Mientras canalizas tus análisis mentales entre mieditos, generas resultados en las acciones que se vuelven como muertes ocultas en las partes internas de tu propio ser… lastima me da verte penetrar en ese lago de azufre, pero nada puedo hacer hoy, yo soy el loco que ando errado y perdido, mañana… será otro día.
Gólgotas de otras variables y distintas configuraciones para cada paciente que visita al médico de los temores internos; la receta sigue siendo la misma, la convalecencia experimenta las mismas consecuencias y se generan los resultados colaterales previstos, el enterrador vende las fosas para los entierros con un descuento y la gorda de la esquina sigue vendiendo flores con olor a domingo.
Mis taitas me lo cantaron en una canción de cuna que todos repetían porque era de un poeta conocido y a fuerza de darme leche en polvo Nestlé, pensaron que conservaría las tradiciones para cuando tuviera mis hijos; pero las trompetas del matrimonio se me escaparon de las manos y termine sintiendo convivencias con mujeres por cortos periodos entre una existencia transeúnte… al final, el hijo se desteto con leche materna, pero como los astros que eran testigos nadie vio lo rápido que creció el bambino, y no pude -en el pestañear de mi mutación física, mental y espiritual, ver como se desarrollaba, me perdí el video de su infancia y termino odiándome con rabiecita amarga, heredó todos los demonios que yo había heredado de mis abuelos, pobre del niño que entre palmeras y sol vive, pobre, porque el sol no le ha calentado la pituitaria, y sigue escondidito como los monos aulladores, que braman solo entre ellos allá abajo por la quebrada, sobre arboles, bajo las nubes del sol que brilla y entre las lluvias que vienen, y al final solo terminan es aúlle que aúlle, no pueden ir libremente por el bosque, los limites de los hombres los tienen acorralados posiblemente en linderos de muerte.
Desde ese bosque me llama por las mañanas la musa del riachuelo, donde la quebrada dejó estancar aguas para que mi blanco y desnudo cuerpo se pudiera sumergir en ellas mientras los cupis arrancaban pedacitos de piel… salía a caminar descalzo por encima de piedrecillas mirando atentamente a los animales, plantas y minerales del rededor… la musa me llamo y la vi al frente, allá en la parte superior de la cascada, tenía ese brillo alrededor del aura que dominaba todos los colores del entorno, levanté la mano a modo de saludo, y descendió en el aire, cerré los ojos y se penetro toda en mí hasta sentirla como la femina de mi sistema celular… parte de un amor planetario, elemento de mis más profundos amantes silenciosos, dejándome oscilando a 144 mil pulsos entre las dos naturalezas, en un ciclo eterno que vibra con la energía lumínica del cosmos, convirtiéndome en ser humano terrestre completo e integral… los seres menores a mi rededor en formas de pececillos, arañas, renacuajos, serpientes, hojas, arboles, aire, aguas, colibrís, tucanes, lagartos y lagartijas, los chau-chau, la lombriz, el sapo, las hormigas, la ardilla, la mapana, las mariposas, el murciélago, las aves, la cucaracha de rio, las rocas, la arena, el barro, los pequeñines, me miraban y escuchaban mi voz, entendían el llamado y seguían esperando.
Querida, no me encuentro presente, me hallo lejano, y en forma mutante, esperando la luz desde lo alto (internamente), para reciclarme en una nueva forma –mejor prende tu música favorita a buen volumen y continua leyendo, porque mi corazón siente las pulsaciones del Corazón Central que son siete y a cada palpitar encaja en un poder de su ley que transforma rápidamente mis observaciones que también se transforman, es como un arcoíris de mariposas que nacen de el capullo que eran antes.
Lo que ves de mí, no soy, es la ilusión bella y cuántica de un lindo y verdadero yo, que soy, pero en otra realidad ya cercana, como la nube que pasa y no se detiene, ahora la podes ver, mas tarde se te va y no existe más. Soy como el atardecer detrás de las montañitas Samarias, que cada día muda y se baña completo junto al mar de las conciencias.
Suena The Cure y escucho un ¡Resucita!, que dentro de mí me gritan. Era una tarde de mayo, nadie dijo agosto, en agosto no sucede nada, todos los poetas escogieron a mayo –para mi es abril. El sol alumbraba las células, y los protones y electrones comenzaban a electrificarse formando una especie de fiesta de lucecitas fotónicas que iba cambiando el cuerpo maltratado, la mente saturada y el espíritu acongojado… ¡Resucita!, volvían y me gritaban, mientras residía en el coma de un hospital siquiátrico de las grandes ciudades terrestres, los cables del EEG se pegaban al cerebro buscando palpitaciones para que fueran registradas rápidamente convulsiones después de un choque eléctrico… es bestial!, el sistema busca asesinar al hombre lentamente de muchas formas, y allí en la mitad del patio, yacía mi cuerpito flaco y débil, aunque lleno de potencia. Los lugartenientes de la oscuridad buscaban mi fin, desde el doctorcito del barrio que aconsejo a mis padres, hasta el graduado de la universidad de la sabana bogotana, mientras hacia su rural en Pasto acompañado de su esposa pelirroja… ¡Resucita!, tal era la insistencia de esa voz, que al fin voltee rápidamente a ver quién era, para sorpresivamente encontrarme con migo mismo, pero vivo y sano, dentro de un mí que sonreía, que me alargaba la mano para que me asiera a él, extendí mis dedos lentamente lo mas que pude, hincado en el piso, después de quitarme todos esos cables del cuerpo, y alcance su mano, estaba cálida y continuaba sonriendo, no dejaba de apretar mi mano fría y lánguida, flacucha y pálida… afuera, el clima era frio, aunque el sol palpitara…
“Ve y sal al sol, recibe su energía!”, me dijo la voz, y continuó: “vas a recibir un cambio molecular en tu densa e inerte materia, a nuevas formas de existencia fotónica de energía solar, para que entres en sincronía con el Palpitar eterno, es un cambio de ubicación energética al pasar el túnel del tiempo-espacio donde estas, sin perder tu conciencia… tendrás un nuevo cuerpo de cons-ciencia, eterno y de luz, para que te unas a la nueva humanidad naciente que se acopla al Corazón de Los Días”… la voz dejo de instruirme, mis ojos se levantaron al cielo, me había quedado dormido por infinidad de siglos de ausencia, por inocente, por inconsciente, y mis pulmones respiraban por primera vez. Me levante de la tumba habituada al materialismo en el que me había sumergido, y mis alas comenzaron a desplegarse, no era un ángel, era un nuevo Hombre, la energía que recibía desde el sol, alimentaba el espíritu al levantarse, y fui desdoblando hacia la tierra los temores, los miedos, las ataduras, mis vicios, los karmas, complejos, pretensiones, flaquezas, feuras, y todo fue cayendo como capas de mugre que habían estado atadas a mis huesos, a mi aura, a mi alma, y me fui sintiendo más liviano, hasta que pude volar hacia la nave de donde provenía la voz que me hablaba.
Me fui, era necesario alejarme de ti, y te deje sola en tu planetica tierra, muy cerca del 2012, yo te había dicho que la ventana que te ofrecía, era la ruta de escape al kaos donde vivías, pero no, escogistes el tren hacia la evasión, y volastes lejos, muy lejos, tan lejos que tus emails se demoran más que los de mis otros amigos; pero bueno, como dijimos, going with the flow, y ese es tu flow, ahora me toca despedirme de nuestro amor, creo que fuistes mi último amor terráqueo, fue bonito, atractivo, emocional, húmedo, volátil, velocísimo, cálido, pegajoso, a veces pendejo de lo dependiente, sublime en la locura del viaje terrenal, complicado y con ingredientes de celos, en resumidas no era Amor, era más bien, el romance de dos enamorados cuando recién comienzan mientras están ciegos e inconscientes a la realidad de la luz, necesitan años para poder sincronizar sus chacras como arco iris al unísono de un solo vuelo, pero, escogistes el tren hacia la lejanía, oh amapola del norte frio, mariposa del polo, tus epopeyas ancestrales te halaron entre tu propio fluir. Es tu senda, es tu universito de worries y soluciones materiales, chao bambina, que ojala la luz podas sentir algún día.
La mañana de mayo continuaba lenta, la nube pasaba lejana entre la ventana, y parecía no querer moverse para nada; me detuve a observarla y en realidad no se inmutaba en desplazarse. La radio daba noticias del eje magnético que se había desplazado un resto, que los días ahora eran más cortos, que las guerras y las crisis económicas mundiales, que el sobre calentamiento del globo, que el 666 como solución religiosa, económica, militar y política para el género humano… un anticristo disfrazado de milagroso haciendo sus trucos de poder para engañar a los débiles, los temerosos y los llenos de esperanzas por un mundo “mejor”, le corrían, los Mazos los fueron sellando en su mano derecha, para protección, ubicación e identificación, todos estaban gozosos, el nuevo gobernante mundial del “nuevo orden”, les había restablecido la crisis en nombre de la paz y la democracia y así todos podían vivir tranquilos y felices… apagué la radio y la tire al tarro que decía “reciclaje”, cogí un morral viejo que estaba en el armario, las botas y mis gafas baratas y me encamine al sur, estaba realizando un experimento en mi mismo: cómo vivir lo más alejado posible del sistema –a ver hasta dónde podía llegar.
Se decía que había varios sitios comunales donde se podían refugiar los pocos, en tiempos de tribulación mundial, doce en total, todos en Suramérica, el resto del planeta, decían, colapsaría, y como mi bolsillo no cargaba dinero del banco mundial, me di al caminar en esta parte del planeta. Luego de tres años indagando y aprendiendo, me encontré en medio de los Andes un pueblo antiguo de la civilización Inca que me llamo la atención por su silencio y sus pocas casas -siempre me han atraído esos pueblos vacios, tipo western en medio de montañas. Sus habitantes caminaban descalzos a pesar del frio, tenían pies grandes, casi gigantes, roídos por el frio y el barro, igual que sus manos. Llevaban sombrero y ruana de colores que iban del café oscuro al café claro en contraste con el verde mantel del altiplano y las pocas flores que salían nerviosas de los árboles y plantas que eran meneadas por un viento cortante que venía de las nieves. El sol caía perezoso a la distancia, me fascinaba ese silencio, era un silencio donde se puede escuchar el palpitar de la tierra, un silencio que me trae a la memoria a Sophia Magdalena y su ventana al cielo, cuando en su cuarto de cárcel solo convivían ella y su voz interna.
Como no conocía nada del lugar, quise indagar a ver si sabían algo de la tal finca, el campesino ni me hablo, levantó su mano hacia donde se oculta el sol y sonrió; al alejarse vi en su caminar un no sé qué extraterrestre, tome un sorbo de agua de mi botella reciclada y comencé a subir loma, en un par de horas caería el día, pensé que en menos de eso llegaría.
En la finca me preguntaron por mi procedencia, como siempre, no supe qué decir de mi equipaje viajero, me vi en la urgencia de explicar que venía de Chu-Chu, el pueblito cercano, me invitaron a seguir y coloque mi carpa en un lugar donde podía divisar el atardecer, cosas entre el sol y yo, que me atrae cuando cae, y me tienta con su cambio de colores. En ese lugar pase la noche y muy temprano al otro día una voz de mujer decía que me esperaban en el salón… me arregle como pude a media luz y salí a campo abierto, hacía un frio agradable. Comedores serpenteaban en un salón en forma de ovalo, seguían la silueta de una galaxia; en el centro se ensanchaba y cogía una forma de sol con siete sillas a su rededor, para un total de cien comensales. La finca tenía capacidad para doce mil personas, dividida en 120 salones en piedra y techo de palma, todos en forma oval que usaban para comedor o reuniones. Las gentes vivían arriba en los arboles, de donde sobresalían una especie de telarañas construidas en lasos, que se unían entre ellos, en el centro de las redes una especie de carpas pequeñas donde dormían, para subir usaban escaleras colgantes, lo mismo que para ir de una telaraña a otra.
Allá, desde los Andes de mi hombre interno reflejado en el futuro inmediato que celestea sucediéndose poco a poco en los ahoras del presente de mi otro yo físico e irreal, sobre la tierra y compartiendo el mismo aire con seguidores de dioses de este mundo que juegan a ser el dominante de una partida de ajedrez que está en jaque… allí, descalzo, paseando mis formas imperfectas sobre el corazón siempre despierto del planeta, escucho el eco de los cristales de sangre que cayeron a la tierra hace unos dos mil años en el Gólgota del calvario desde el Anciano de Días mientras moría en aquel entonces como Jesús el carpintero o Cristo el redentor… era asesinado violentamente y sin piedad sobre la silenciosa cruz de madera que se levantaría como símbolo de millones de fieles religiosos que recordarían su muerte mas no sus enseñanzas.
Al centro de mi cristal, en lo profundo de mi esencia, salto un poco y sigo el sendero de la ladera, pisando las piedrecillas untadas de la boñiga que dejo la mula, que apaciguan mi piel cuando me dirijo al rio a bañar el sudor o a renovar superficies… ayer en la tormenta, las aguas cambiaron el aspecto del paisaje, muchos árboles se fueron al piso, muchos arbustos desaparecieron, hasta rocas medianamente grandes, fueron cambiadas de lugar.
La canción que vomitaron mis enemigos, se las devolvió el viento dentro del tren que viajaba hacia Berlín, era el transatlántico desde Santa Marta hasta la vieja Berlín. Muelles de la antigua Europa untados de musgos de canciones de viajeros de antaño -que recuerdan al viejo pirata Morgan. Allá recibían a los pies oscuros y arenosos de la negritud de mi pueblo vallenato que no hablaba ni pio la arquitectura de la lengua germana. El alcalde salió a recibir la comitiva, la negra Tomasa llevaba unas cajas bien rusticas llenas de aguacates de la Sierra como presentes para el pueblo alemán, algunas canastas de mangos y flores también. El alcalde berlinés, descendiente de Hunderwasser, se bajo del trono de su imperio y descalzo le entrego las pinturas de oleos que habían sido donadas por artistas callejeros de la viejas barriadas de la Bundesfrei. Los mulatos samarios emocionados las recibían, mientras doña Tomasa tomaba asiento con el señor alcalde mientras comían arroz, verduras y kartofel.
· Me han dicho los Mamos en el ultimo email, que los grandes volcanes de la Sierra Nevada de Santa Marta harán erupción
· Ellos saben lo de la tierra, nos dijeron antes de partir, que le contara a ud, que la gran Europa se sumergiría entre aguas…
Me despertó la urgencia de ir al baño, pregunte a los del lado, alguien me señalo los arboles, sonreí. Casi todos en ese salón oval de la finca eran hombres, algunas parejas y pocas mujeres… cuando volví le pregunte a la misma persona en cómo era eso… me dijo que en esta parte pocas mujeres habían decidido dejar de jugar a tener expuesta la vanidad, y más hombres habían dejado el sendero del machismo… buscando el centro del “Hijo del Hombre”, era una tarea individual. Como así le dije: me explico que hombres y mujeres debían de encontrar el centro de su ser donde convive el femenino y el masculino de cada uno en armonía, si quieren ascender a una dimensión más amplia, y en conjunto con la realidad del planeta hacia lo que llaman los maestros: el Tercer Día de Creación… claro, me explico, que en los otros óvalos hay es más mujeres que hombres. Me quede mudo y continué con el desayuno, abundante por cierto, mientras mi mente se devolvía a la dimensión donde vivía en Berlín…
Pero no, no vivo en Berlín, tampoco en otra dimensión, me siento como atrapado en un paisaje terrícola transitorio en apariencias, dentro un cuerpo molecularmente solido que no puedo llevar donde deseo ir… mientras que al tiempo millones de soles son creados en este momento en algún punto del infinito, soles que parecen jugar a ser luz entre la creación del todo, materializando nuevos universos y complejas creaciones alrededor de ellos, mientras que yo me quedo repitiéndome a mí mismo, si es que estoy perdiendo mi tiempo y mis días en una era primitiva, viviendo dentro de una carpa plástica imperfecta, porque en los días de tormenta se le entra el agua un poco, en la mitad de un bosque no primario que fue en un pasado cercano semi destruido por el homo billetes a favor de una hacienda ganadera… y me pregunto, que es lo que verdaderamente estoy haciendo?
No escribo acá una novela siguiendo pasos clásicos (fuera que no tengo idea de cómo hacerlo), pretendiendo que imagino grandes sucesos de la vida transitoria, tratando de convertirla en el gran cuento sacado de los talentos de un seudo escritor ficticio que ya esta mamado de la irrespetabilidad de los egos cuando se cruzan entre ellos… miro el paisaje del atardecer y lo que le estorba a mi visión son las intermitentes luces artificiales de Santa Marta… esto es solo una humilde bitácora de viaje a la Sierra Nevada.
No creo que en otra existencia me llegue a interesar la idea vaga de escribir con bolígrafo. Hablando de existencias, según los Mayas, cada 26.000 millones de años, se da un eclipse de la tierra con la conversión solar y planetaria de la galaxia, entrando estas y su contenido a otra era, otra dimensión, y como todo es siete en numerología creacional, entonces entraremos a un tercer grado escolar de siete existentes, este segundo en el que estamos, pa decir verdad, es uno de los más difíciles por sus retos, que incluye entre otros, en como poder salir del primitivismo auto destructor y la dualidad. El primer grado debe ser un caos total entre la oscuridad máxima y en exención confusa. Según los maestros, los que no pasen el año al Tercer Día, los devuelven a repetir desde el primero. Este segundo nivel es la prueba entre el despelote de tener que convivir tribus de bufones con simplonas preocupaciones, temorcillos, odios, envidias, violencias, agresividad y hambrientos de posesiones materiales; con otras tribus con deseos muy diferentes.
El tercer día de creación, dicen, está lleno de luz con los ingredientes amor, armonía y paz. Parecen tres palabras de cliché y chicle, porque no sabemos en realidad lo que significan; yo por ejemplo no las he podido experimentar al máximo, lo que en la tierra creemos que significan, no es ni el 0,1% a su real contenido. Me pregunto, como será el séptimo día de creación?
Anhelo y quiero ser parte del devenir de la creación universal, quiero salir volando entre planetas, extender mi mano y acariciar colores; quiero crear mis propios universitos y estar dentro de un viaje intimo en armonía junto a todos mis broders de otros planetas y otras galaxias… lo que me lleva a preguntar por mi origen hace 26.000 millones de años y me dicen los sabios Progenitores Mayores, que parece que fuimos concebidos en el Tercer Reino hacia las Pleyades, y de ahí caímos a ser hombres “6” entre una epopeya de principios asociados a unos manes que se creen los amos y se hacen dioses y se quieren adueñar del planeta, y que nos llenaron de un virus tremendo que hasta destruyo nuestro tercer hilo del ADN, desactivando nuestro código genético.
Y acá estoy, tratando de salirme de la maldición de los “666” para ver si entro en el lado opuesto de la montaña dentro del “999” hasta volverme un ser “9”, un Hijo de Hombre integral y completo, sanando mi karma, activando mi cuerpo de Luz, alineando mi sistema nervioso, activando y organizando elementos de mi cuerpo y los chakras. Para cambiar mi apariencia de homo-sapiens llenando de energía solar las células cambiando la ubicación energética y poder desaparecer del espacio visual por un tiempo, pero parece que para realizar este proceso, debo pasar como por entre una especie de fuego intenso a modo de purificación, el cual no he encontrado, solo a medias me voy ubicando hacia la luz en medio de las distracciones que me ofrecen mis conocidos que terminan por aburrirme, sin tener alternativas de momento.
Pero para que hablar sobre tantas profundidades, si cada cual que posee un alma se adueña de una verdad que relaciona como sendero, y como las ovejas tienen egos mentales cargados de toda clase de contradicciones emocionales, terminan diciéndome de boca de una boyaca, que hay muchos caminos, le digo que sí, pero me importa realmente un bledo la historia sobre muchos caminos, cada uno labra su propio laberinto entre su propio apocalipsis…
Para salirme de tantas repeticiones de procesos, elimino los temores y mis odios de las capas celulares, a veces es tanta la información acumulada dentro del núcleo memoria de la célula, que me siento abatido por un peso inimaginable de mi pasado, de mi ahora y de otros pasados a veces olvidados… todo ese recuerdo es un mazo oscuro de vivencias casi todas erróneas o mal colocadas, además de un océano oscuro de sensaciones aterradoras de aspectos que no involucran a la vida.
Me tiro otra vez sobre la hamaca de una vecina y trato de mantener ocupadas las oscilaciones del cerebro que no se quedan quietas, siempre buscando que hacer, o el protagonismo, hasta que me aburro tremendamente… o imprescindiblemente todo me monotonéa a tal punto que se me forman ideas desmotivadas en días donde la lluvia persiste en caer desde nubarrones espesantes oscuros y relampagosos… la lluvia de gotitas desciende sobre la montaña poco a poco, hasta que llegan hasta mi, saco la mano derecha y la roso suavemente, ella, la lluvia, trae historias de la alta Sierra cuando vivían antes de 1999 las familias de los Mamos en abundante armonía, luego se inclinaron por enviar a sus hijos a la gran ciudad de los “hermanos menores”, con el fin de estudiar en sus grandes universidades y poder manejar las grandes camionetas… “que para protegerse de los abusos del hombre carapálida”, pero se entusiasmaron tanto los nietos de las nieves, que se les olvido continuar con las tradiciones de antaño… un día, alrededor de esa época, un Mamo emborracho de alcohol el ego interno de su complejidad existencial -aquel liquido maldito que mata lentamente la indiada americana, y asesino a otro Mamo de la Sierra, dando paso al cumplimiento de una profecía de su tribu: en que el día que aquello ocurriera, se vendría el fin de una época… por todos lados los síntomas sociales nos llevan al mismo horizonte, en eso si podría tener razón una letra de la boyaca aquella que soltaba mil palabras por segundo: todos los caminos van al mismo lugar, y el lugar sigue siendo el mismo desenlace de canciones sin final a la que nos estamos poco a poco habituando.
En la mañana se levanto la amiga de donde vivo a tomarse un café, el que dicen es orgánico del terruño… sudadera roja con membrete universitario, chanclas cubiertas, el tinto humea, el backamon se despliega en un campo de batalla invisible de piezas que corren a millón, suben y bajan, unas caen, y vuelven a empezar. La adrenalina del oponente satisface la sangre que hierve, son síntomas de pálidas canciones de guerra; trompetas que retumban y estrategias de los dados que se amañan a la temprana matina a medida que el café suelta el vaporcito y el olorcito que dicen está listo el liquido oscurecido en la Sierra campesina. En ese momento me les aparezco yo, llego desde montaña abajo, morraleta terciada, corto unas hiervas, me gusta el orégano, la mezcla de varias hojitas hacen un agua de aromas que llena mi momento, mientras escucho las voces de júbilo que persiguen los dados que caen en diferentes punticos del juego… la alegría del hombre de mi amiga me atrae –debe ser por aquello que me es desconocida, en como algo tan simple le llena de tanto gozo… que es el gozo, me pregunto, mientras detrás de todos nosotros vuelven a caer gotitas del cielo, una lluvia que hace que me quede acorralado en una tertulia a las que no me he podido acostumbrar… antes, mis tertulias eran demasiado informales, juntos, pero necesariamente nadie hablaba mucho, o decíamos bobadas o reflexionábamos pensamientos transcendentales, o hacíamos otras cosas más activas. Así la energía juntaba mutantes perdidos en la oscuridad de las grandes ciudades, los mantenía juntos para quien sabe qué, y me conservaba el sentido de pertenencia a una tribu de desadaptados. Pero ahora veo las miradas y escucho las quejas de esas miradas, y me inclino por sentirme aislado, a un lado, en solitario (será un problema sicológico grave?), desperdiciando las letras que me salen de la mente, que además vienen llenas de algo pegajoso que tiene el cerebro en estas mañanas de lluvia… al fin y al cabo, entre tanta pregunta que va y viene, caigo inconscientemente dentro la tertulia de turno y entre bobada y bobada, me da por meter disfrazadas las ideas nuevas que me bullen de la mente, y dejo un aroma apocalíptico en el ambiente matutino.
La Mapana es un serpiente café oscura que sobre su espalda, de un café más claro, lleva dibujado unos cuadritos en marrón, la lluvia había cesado y me había desembarazado de la idea de permanecer observando lo agradable que el hombre disfruta jugar al backamon. Mis pies estaban untados de barro, la forma de mis dedos era bien huesuda y deforme… uno de ellos se quebró en una noche de inconsciencia… la Mapana se asusto también cuando me vio, le dije algo referente a no picarme, retrocedió un poco y mientras se alejaba lentamente mirándome con ese ojo fijo y fuerte, pero sin agresividad, le dije que se cuidara del machete del hombre.
La piedra era casi cortada como con laser, la recogí pensando usarla de asiento en el cambuche de la montaña, como el camino era hacia abajo, decidí dejarla rodar, rodo un poco y luego otro tanto, pero se topo con una curva e hizo un giro perdido que la mando loma abajo hasta el otro rio donde aullaban los monos, esta mañana los escuche a este lado del rio y me dio por irme a bañar con Rufus el perro, que durmió anoche acá, los monos nos olieron y dejaron de aullar.
Tomasa es la perra de la jinca donde vivo, se parece mucho a Pluto personaje de mi niñez cómica, la Pluta esa voltea la cabeza como diciendo ah?, y saltan sus orejas y cola y cuerpo y se mueve como el Pluto que recuerdo, pero nada de romance con el Disney que dicen manipula emociones infantiles.
Estuve leyendo de Thoth el Atlante, buscaba luz desde la oscuridad del fondo de la tierra y de sí mismo, venia de Atlántida, le vio hundirse sus diez islas, visito la oscura cara de la muerte y los señores del abismo. En algún punto de sus últimas existencias, debió haber salido hasta la luz del Altísimo y evolucionado su conciencia al full afuera de los salones subterráneos. A veces pienso que de Atlántida no debe haber quedado nada positivo, la info que consideraban vital se la fueron a enseñar a los Egipcios que se encontraban solo un peldaño más avanzados que los simios, estos Atlantis hicieron las pirámides con sus laser y dejaron debajo de la Esfinge la nave de Thoth el Atlante enterrada, que él dice que la podemos usar cuando salgan los invasores. Estos pensamientos son del siglo pasado, hoy ya caminan los invasores, ya salieron del puyón, se pintaron de presidentes, dueños de bancos y religión, y ahora mandan a todos a las guerras, es el juego del patrón.
También andan otros extraterrestres en mi barrio, vienen de la luz a ajustar bombillos, pa balancear los oscuros lagartos, que se quieren apoderar del pilón. Descifran los misterios, leen las profecías, porque mi futuro se acabo convirtiéndose en ahoras continuos de una canción final que se llama el “ya”, de cualidades espeluznantemente veloces que demarcan los sinfónicos pasos de una angustia de almas que claman día y noche por la luz que perdieron y ahora anhelan, Thoth vio los extraterrestres malos, Thoth y su conexión con lo intra-terreno, buscando la luz en las tinieblas de la tierra.
La conciencia general invisible ha resurreccionado en una gama de vibración más alta, Thoth bajaba a los caminos oscuros adentro de la tierra para encontrar la Luz de los Dioses, sabía que era un dios también, un Cristo despierto en su cristal interno conectado con el palpitar eterno de la Razón Superior. Encontró cosas interesantes, como el símbolo de la Luz, que es un Sol, somos soles internamente, y la llave y la puerta a todos los misterios del conocimiento del Universo, que se encuentran grabados y filmados dentro de cada uno.
No creo que todas las islas de Atlántida vuelvan a surgir del fondo, pero una de ellas saldrá del profundo y misterioso Pacifico. Me pongo las Raiban polarizadas, el morral y la chaqueta, salgo al panorama pueblil de los homo sapiens a intercambiar palabras por pensamientos pero lo que primero me encuentro es aquella mujer que no para de soltar palabras sin sentido, luego la patroncita que tiene metalizado el corazón; luego veo que no se me conecta el modem de la canción que quiere sonar el DVD de mi alma y apago el equipo y me pongo en stand by por unas horas. La lluvia viene a visitar la tierra ya húmeda, otra vez, y me inclino para recostarme en un butaco nuevo de madera fresca recién cortada donde a mis espaldas duermen mientras no los observo, dos perros de la calle.
Los rededores en un pueblo de la selva serrana es zona gourmet para los perros y los gatos, tienen de donde escoger y a la hora que deseen. Aunque durante el día soporten los maltratos del campesino mientras la música persiste en el vacio de los sordos y repercute en ociosas comparsas que se desplazan entre las neuronas de mentes empotradas entre los huesos de cerebro humanoide que busca rellenar vacios de un 90% de materia gris con los ecos de lo que más escuchan: el ruido de sus propios movimientos mentales. Hasta hace pocas centurias, la diferencia con los cuadrúpedos era mínima. Luego de haber recibido educación primero en Egipto, lueguito en el imperio Maya y más luegote en la Europa medieval donde ciertos lores camuflados de homo sapiens se fueron apoderando de los lugares de privilegio desde donde podrían ir controlando al resto de las masas, se llamaban a sí mismos, los Mazos.
Cuatro individuos en medio de la crisis dejaron sus trabajos atados a las cadenas de las multinacionales, rompieron la banda que los unía a la red bancaria, soltaron las amarras de la imaginación y siguieron la ruta del conocimiento del Ser libre que existe desde antiguo yéndosen a caminar la tierra de sus ancestros. Uno llevaba la armónica de los vientos, el otro la conga de los volcanes, el tercero el susurrar de las aguas y el ultimo la flauta de las voces del ahora. Juntaron sus sonidos mientras la voz de las aguas iba coloreando los movimientos de los volcanes y los vientos penetraban los ecos de los ahoras que se iban dando a medida que salían de los campos de concreto y metal. A la distancia –dicen los anuncios que salieron al aire, toda edificación se fue desmoronando en polvo terrenal a medida que avanzaban. Cruzaron los cinco continentes y los siete mares; las 144 islas y las fosas comunes de los muertos. En el Hades se encontraron con los ecos de las enseñanzas del Cristo cuando bajo por tres días al reino intra-terrestre. Las palabras sagradas ajusticiaban lo profundo de las tinieblas y las paredes de los sarcófagos se dilataban hasta que se agrietaban rompiéndosen en pedazos que salían volando untados del polen de lava de la llama del planeta. La luz del cristal del planeta comenzó a vitalizarse y a untarse de más luminosidad proveniente de la palabra del eco del Cristo. Todo el planeta se unto de la brillantez del nuevo polen y comenzó a transfigurarse. Las voces de los Maestros de antiguo dictan que cada planeta contiene nueve otros planetas entre sus círculos y ángulos, y aquel nuevo que se avistaba, ascendía en variedad de colores sin límite. Una voz de agonía se escucho al fondo del concierto en Sol Mayor. Eran las voces de la muerte y de la dama de las tinieblas que en su última danza matrimonial se fueron fundiendo entre los cimientos de neutrones que explotaban a medida que los resultantes fotones de luz iban penetrando sus formas humanoides sin forma.
Me quede dormido, al honguito que me encontré, le arranque el anillo y me lo comí a ver qué pasaba. Los miedos que provenían de mis debilidades, se iban disipando a medida que cogía confianza desde los logos de la Luz que estaba leyendo dentro la tienda. Pensé cuando Jesús en el Sinaí y en el Jordán y en toda Samaria, India, Nepal, Sumeria y Egipto, dormía en tiendas (llámese carpas), entonces me dedique a dormir entre el bosque y en mi carpita, lejos del ladrillo y la teja.
Es más fácil mirar los ojos de la Mapana y parlar bobadas con el sapo, los peces y la mula, que mirar y hablar con estos seres humanoides rodeados de trampas y llenos de canciones de odio. Descubrí que hasta en sus canciones de amor, no bailan ese amor con la llama encendida, solo gravitan alrededor de dolores dejados en ausencias de sus cautivos pesares desprendidos de los miedos de sus ritmos tropi-sajones entre las idiosincrasias de poemas ocultos que solo se están repitiendo. Muchas veces solo sus egos gritan en medio de esas danzas de “amor”. Dicen los Maestros que nada nuevo se crea ahora, todo es una repetición ya sucedida, como si viviéramos en un espiral eterno donde un viajero del tiempo podría visitar todas nuestras épocas y sentir la repetición de hechos entre colmena y colmena. Ya se me está descongelando el cerebro poco a poco quedándome expuesto a cosas tan complejas, que observando una película opuesta a mi existir, me daría por pensar que estoy demasiado lejos, como untado de teoremas y arquitecturas que me alejan de la normalidad del común.
Lo que se ve no existe en realidad (aunque es real en otro plano), y lo que no tiene forma no es visible, entonces me hacen sentir como si estuviera metido en un espacio dimensional que está volviéndose monotamente aburrido, porque la frescura de un día que la mente observa como hermoso, es en realidad un mito frágil de un posible hecho aun sin concluir… un día mientras comía lentejas y arroz con el perro Rufus, mirando desde el interior de la casa donde estaba, hacia afuera por la puerta a unos 30 metros; veo a un tendero reparar su jeep, sin camisa, músculos, sonrisa y panza expuestas y amplias, mientras un perro se arrima a oler la chica vestida para el sábado que acaba de arrimar pa luego alejarse dejando movimientos que solo entiende bien ella, un niño corre a través de la imagen de fondo, el sol alumbra todas las escenas, una mula recién llegada comienza a arrancarle tiras verdes a un palo mientras un joven y un hombre bajan bultos de productos agrícolas de la cosecha. Veo en el hombre la satisfacción de un día de labor bendecido desde los altos Cielos en esta tierra que da lo que le siembren. Todas esas escenas que se pasan a la distancia en el marco de la puerta de la casa desde donde observo, me hacen sentirlas todas en mi corazón, sentir el lado dulce de ellas, aquel lado al que se pega la gente en su mayoría, porque contiene un saborcito a tranquilidad y a una prosperidad contagiante que me hace entender el porqué del homo sapiens embutido en esa “felicidad” que lo ata al mismo tiempo a quehaceres de una triste realidad. Porque son agradables y saben bueno en la superficialidad del momento, nos gustan, me agradan, lástima que sean la veloz impresión a color de imágenes a la distancia, lástima que detrás de cada imagen se desarrollen munditos individuales donde gobierna un dominante ego mental, que en la cercanía explota tornando las figuras folclóricas en campos de guerra entre un deteste invisible que nos autodestruye por los aguijones de pensamientos inconscientes e ignorantes e inocentes pa demás. Con razón estamos predestinados a una evolución forzada porque si nos la dejan a nosotros mismos, nos quedamos dando vueltas en círculos viciosos entre luchas de clanes de diferentes odios y a la vista folclórica de una paz que nos cautiva y nos engaña. O sea el atardecer no existe, ese sol que cae no existe, las flores y sus colores no son reales, el color de mis ojos no vale, no valgo físicamente nada, soy reflejo de mi otra existencia, de mi interno… y me miro adentro, pero allá no veo flores, se ven es galaxias como ramilletes, y las flores son como planeticas y estrellas que juegan a ser lejanas… luces… luces…
Venimos de mares sin terminar plagados de demonios y pa colmo de males no lo dejamos ver fácilmente sino con el tiempo, o dentro de los gajes del oficio, porque los Dioses nos cubren de un bañito de oro como a los anillos falsos que nos toca comprar a veces porque en verdad no nos llega el billete. Mejor sería si naciéramos llenos de luz de oro y ya, no oscuros y llenos de crímenes internos en un mundo untado de feura, pa evitar las transformaciones dolorosas y el periodo de limpieza, o se le vaya a caer a uno el bañito de oro que le pusieron de tanto uso o por tener que sacarse demonios terribles de adentro a punta de Padrenuestros. Asesinos de almas de nacimiento, asesinos de seres vivos, como dice Agustina: “La sangre, como la leche hervida, siempre está esperando una oportunidad para derramarse, y cuando empieza ya no quiere detenerse”.
Quien le dio por matar, o mandar matar a Bruce Lee?, no le veo sentido. Si mandaron a matar a Galán y a Gaitán, al menos se ve que está detrás de las muertes, unos intereses oscuros. Pero BL?. Suave la forma como se marcho Andrés, no le toco toda esta epidemia del fin, donde el corazón de los hombres se vuelve frio y duro, ni cuenta se dan que tienen metalizado el sentimiento. Dicen los de adentro que BL sabia de las dos cosas que acongojan más al ser humano en su inconsciencia, ítems que son utilizados por los controladores como instrumentos de manipulación al hombre, que son: el temor y el odio.
Mi amigo el campesino José, se levanta a la cinco AM, se toma un café negro grandote o una agua panela con pan y se va a laborar. A eso de las diez, le traen el desayuno al lugar donde hecha machete, él es un duro para la rula en precisión de golpe y con el hacha. A medio día baja a su rancho a almorzar, a la hora vuelve al laboro y a eso de las 5 se va a cenar. Entre el almuerzo y la cena se boga diez cafés negros y mucha agua de llave, del acueducto que viene derecho del rio. Mi amigo el campesino José le da cuatro o cinco golpes al estomago sin contar las tintadas o lo que el patrón le tira, o las frutas que encuentra entre el laboro. El aparato digestivo de mi amigo el campesino José, va por la falda que tiene pintada la EPS en sociedad con el laboratorio farmacéutico. Él las visita periódicamente para calmar sus dolores. Esta tan lejos José el campesino de saber la verdad del visitador médico, esta tan lejos de mis ojos, cuando lo miro después de saludarlo, sus ojos saltones terminan la conversación en menos de un minuto, no profundizamos nada sobre las hileras del jornalero.
En cambio mi amigo Miguel el campesino, no es jornalero, tiene su sembrado y compra cosechas de otros que vende, sus ojos cuando hablamos, no saltan, son duros y altivos. Los campesinos de mi tierra todos dominan el arte del machete desde niños, y el muleo. Cuando van entre el bosque y llegan al monte, volean parejo lo que sea que esté en su camino; ya sea verde, marrón, que vuele o tenga cuatro o más patas, y peor aun si no tiene ninguna pata, a todos saluda con su rula made in Colombia, de las mismas que venden en mercado de abarrotes en Berlín.
Los animales y la plantas de mi tierra conocen bien a José y a Miguel, saben de sus habilidades para degollar y cernir sus pasos, sus hijos usan caucheras y grandes piedras para estripar arañas, los pájaros y los monos; son los hijos de mis amigos los campesinos, los que más tarde, el futuro de la patria, como niños aun los convoca a reclutar las guerras, y las niñas desde los 12 añitos a la IPS local entre embarazos prematuros.¿, oh, esa es mi tierra Colombia, desde el fondo de sus venas, por donde pasa el petróleo y el carbón que se van de paseo en barco gringo pa los mares del norte de donde vienen las ballenas que danzan por épocas en los mismos mares donde otros campesinos en canoas cortan aletas de tiburón y raíces de manglares a nombre de los tributarios asiáticos.
Son los juegos parsimoniosos del tiempo sobre la tierra entre la línea tiempo-espacio y aun en el espacio más allá del infinito, ese infinito en constante expansión desde el vientre universal del Bárbelo. Allí en la puntica, se alcanza a divisar el horizonte de lo ultimo del infinito, un gran espacio habitado por ninguna humanidad ni de las anteriores ni las posteriores, está disponible y esta vacio, fuera de que en el vacio reside Dios el Padre, ese vacío es el éter del Espíritu Virgen, donde se refleja la mirada del Amor Altísimo, donde se sienten las pulsaciones de su corazón junto al mío, entre el diástole y sístole de nuestro dialogo. El me cuenta de los cuatro reinos de Armozel, Oroiel, Daveithai y el de Eleleth donde nació Sophia la reina de la reflexión que después de tanto reflexionar le dio por tener hijos a solas fuera del conocimiento del Padre y por eso le salió del vientre un dragón feo del que ella misma renegaba. Este dragón de pura maldad lo mandaron a nuestro sistema solar por tener bajas vibraciones angulares. Más tarde esa Sophia se arrepentía de su creación ilegal e inmunda, pero ya estaba en el ruedo, termino violada tenazmente por dar papaya, para que procreara dioses del mundo; ahí fue como en la ilusión de este planeta nos nacieron dioses en abundancia, dioses de religiones humanas, dioses de metal que compra y vende, los dioses de machetes que silban y los cañones que salpican sangre, dioses para los que manipulan el mundo desde sus tronos y casas políticas pilatas. Son los dioses que les dicen del “abismo”, así los llaman los grandes maestros, los que existieron anterior a cualquier principio de cualquier religión.
Hay doctrinas, hay leyes universales, hay misterios. Hay seres que cabalgan por ejemplo en la doctrina del Amor. Hay leyes como la ley del Conocimiento y el Saber. Hay misterios como el Gran Misterio. Hay símbolos y hay libros; como el símbolo de Creación y el Libro de la Vida y la Eternidad. De todo esto no sé nada, se que existen Maestros que siempre los han conocido como la trilogía de Hermes Trimegisto. Dicen que ahora existen reencarnaciones que vienen abriendo conciencias y sellos. Mis limitaciones son en extremo abrumadoras, pareciera que estuviera trabajando como reportero, solo publico los títulos y no sé nada en profundo, además mi nivel de evolución solo llega ahora hasta aquí. Les paso el eco cercano de esta info que repercute en mis vivencias. Llevo una lámpara sin pilas que de todos modos vive encendida a toda hora y me sirve porque me alumbra las oscuras noches de mis pesadillas. En sueños me desprendo de mujeres locas que me desean por un momento, o por la idea de un impulso. También de serpientes que están ocultas mirándome mientras paso veloz como aprendiz, siento que me observan y son ellas. Uso el sueño nocturno que se encarga de dejarlas atrás, además ahora para evitar futuras influencias negativas, los hermanos del espacio me han enseñado a fabricar una cúpula que protege de las ondas electromagnéticas negativas que crea el hombre sapiens.
Y si el resto del mundo se me da por añadidura, ahora ni sé que me puede interesar de este mundo, pero si muchas cosas del Gran Templo. Tengo la mecha de la lámpara encendida y me afirma la voz interna, que es llama que no se apaga jamás, el combustible viene de otras esferas, del camino de los caminos, de la historia de las historias.
Allí están los que velan por la conciencia de los hombres, para que cada uno brille con luz propia. Están los Maestros decididos a que entremos ahora en este ahora, a otra era, a otro día de Creación, al próximo ciclo como Hijos de Hombre y que podamos seguir a los que llaman las Verdades justas del mundo para que pueda hacer a mi manera el libro de mi vida poco a poco, porque de saber alumbrar no sé nada, mi luz es incipiente mientras me forjo entre los elementos: el fuego y el viento, y el agua y el sabor a tierra de donde sale la conformación necesaria para lograrlo, todo entre una calma inmensurable.
Anoche fui atacado por las Ronda, no sé si porque una esquina de la carpa estaba dentro de terrenos que ellas consideraban propios, o porque les gusto el sabor del anjeo de uno de los respiraderos superiores. El cuento es que me dejaron lleno de perforaciones por donde cabe hasta una cucaracha; paila un toque porque ahora tendría que ponerme a analizar como reparar esos huecos, y que conste que trate de hablarles, eso fue a eso de las 2 am, y nada, seguían subiendo. Linterna de celular va y viene, quemo palosanto pa echar humo, salen corriendo pero vuelven. Hoy en la mañana les moví la carpa a ver si estamos en paz esta noche. Es la selva tupida de bichos de todos los tamaños. Por las noches salen los de cuatro patas, porque los otros como los monos aulladores, ya deben estar dormidos sobre los arboles junto al rio. Me imagino la de serpientes por ahí visitándosen entre ellas.
En una cascada de unos 30 metros que escalo cuando la visito, decidí esta mañana coronarla por donde cae más agua, mas difícil, le salen de las cuevas lagartos y ranas. El único deporte que practico es escalar roca, me gusta hacerlo sin protección. Con Germani y Ramoncillo nos ponemos los arneses y los seguros y dele pa la de 40 metros en vertical en Dapa, en la “curva de los vientos”, porque ventea es al piso.
Anoche cuando prendí el palosanto, la llama que producía me hipnotizaba dentro la serenidad de mis sueños y cuando desperté, me di cuenta de la magia que el fuego le conecta a uno, en la imaginación, pero también se puede ir todo un bosque en un segundo. En la ilusión real, una fogata espanta los demonios del sub consiente, en la realidad virtual, la llama externa es similar a la interna y ese fuego por dentro no tiene apagadero. Afuera, el viento de las cuatro esquinas lo aviva, adentro lo atiza el Cristal de Luz que viene desde lo alto.
A mí no me presente sus hijas, le digo al rio tempestuoso, que termino es involucrándome dentro de las miradas ingenuas de sus ninfas y creyendo que sus sonrisas reflejan un jardín de flores. No de esos jardines, porque estos son hechos por jardineros contratados y que si nos les echan agua se secan todas, o son jardines dentro del bosque o las selvas y están llenos de bichos que lo pican a uno por todo lado. No, le dije al rio, sus hijas las ninfas me calman solo un momento dentro del tiempo-espacio y balancean solo el interior de las emociones, pero si por mucho rato permanezco sumergido en sus aguas, la tierra de mis pies se puede ir desintegrando hasta dejar expuesta la llama de mi luz, y eso amigo rio, es peligroso para mi propia creación; sus hijas, las ninfas, están bien y son requeté bonitas mientras descansen con sus colas de sirena sobre las piedras blancas del rio, sus cabelleras las menea el hermano viento cantándoles en susurros poemas folclóricos que ellas llaman amor. Las florecillas que se desprenden de sus movimientos, caen en la tierra y las pisan sus piececitos cuando se transforman sus colas de sirena en largas piernas de mujer que se mueven sobre la tierra cuando salen a buscar a lo que sus corazones las impulsan a hacer sutilmente. Allá estáis bellas oh ninfas de los ríos, como aquel último poema que os cante cuando salí a navegar los siete mares y las doce colinas.
Las congruencias de mis pensamientos, no buscan la línea horizontal de los libros, suben y bajan entre la vertical del muro de una roca que está llena de pequeñas oportunidades de donde se pueden asir mis dedos y sostener la punta de un pie descalzo, mientras el otro, elástico se encarama ágil más arriba del hombro jugando a ser el hombre araña, sintiendo que en el desarrollo del juego, no existe un game over, es como una partida en el play station de mi eternidad. Allá lejos diviso las pistas que se me colocan por los siglos de los siglos y me da alegría ver que todo está lleno de colores y de luz para que me pueda sodar a lo bien este juego que en veces tengo que estar es serio y firme para no ir a resbalar y que en otras no puedo sentir miedo, sino el reto a encontrar un segurillo a mis dedos. Para abajo no hay necesidad de mirar mientras escalo, al final de cada etapa tomo un descanso y observo los paisajes que se dejaron y en cómo van formando capas que lentamente va dibujando el bosque encantado de mis cuentos.
Susurro una canción a tus oídos y te digo que es mejor amarte desde lejos, porque así puedo amarlas a todas las ninfas desde mi lejanía (youtube.com/urxux poema a Neruda “Te amo en la distancia”) y me encanta al mismo tiempo saber que me gustas cuando callas porque estas como ausente, distante, allá en los munditos de preocupaciones pequeñitas que te gusta agigantar.
Todo comenzó con el amor a mi madre y la familia, luego a mis hermanas, luego descubrí el amor a los de mi tribu, luego todo lo que ame a mis amadas y por último a la ninfa que pasa con su lámpara abierta buscando el fuego de una historia de amor veloz que dura a veces solo un segundo, que se la transporta su corazón a la mentecita de sus lados femeninos donde la agranda la imaginación en cuentos de hadas y príncipes azules que las rescatan, pero como nunca aparece él, se les transforma es en grandes telenovelas que nunca terminan, y son cursis e irreales. Porque el segundo extra de existencia que se les concedió no les alcanzo para tan larga espera, y al fin y al cabo cuando vuelven a sus casas se encuentran con sus propias ilusiones reales de las que tienen que ocuparse para que sus amantes no las golpeen y que sus esposos no se den cuenta que les fueron infieles por dos segundos: uno en el mirar y el otro al imaginar. Así son libres de pecado y sin mancha vírgenes. Siguen teniendo la edad que tienen y no han sido manoseadas, porque cuando el hombre se acerca a la piel femenina que esta recostada en el almohadón de la entrega, al tocarla sutilmente, en una caricia, que es tan profunda (y les queda gustando) que les marca el aura, así es como se da uno cuenta que tiene dueño. Pero en esos otros dos segundos, no hubo manoseo ni violación ni vacilón, se toco la llama del bonito Amor Universal y se penetro entre ella hacia el infinito, no se necesitan sino dos segundos para descubrir como poder salir del cuerpo al viaje astral del Amor, así nos amaba Jesús cuando nos atendía en las tiendas, a sus amigos del alma.
Ya me da la sensación de que conozco todo el caserío, salgo de la tienda del señor Eduardo donde labora Jean el hijo del pentecostal que se enfrento al pastor de su iglesia quedándole el ego estampado entre a audiencia que lo veía, dicen. Diagonal a la tienda de Eduardo esta donde vivía Eliezer el albañil y su hijo que le ayuda, ellos de allá del Uraba antioqueño. Enseguida de ellos esta vacio, una gente de SM que nunca he visto, luego la casa de Marilux donde vivía el sargento de la policía y Pacho, el mono aullador que es la cagada, cuando bebé se la pasaba pegado de la bota del poli a donde él fuera, cuando la familia y el sargento se fueron de Minca, dejaron el mono con una gente que lo vendieron ahí mismo, dicen. La estación de la poli queda montada al frente de la tienda de Eduardo. Enseguida se paso a vivir la mama de Alfredo el esposo de Marilux la de la tienda por allá por el Bururake que le heredo al viejito que acompañaba. Pendiente abajo, como quien va a Santa Marta, están ancladas más o menos la casa del primo de Luis Fernando el de Armenia, la de Pio donde quedaba Zona Roja de los alemanes Mark y Susan, luego un par de casa sin nombre ni presente, una de ellas con una dueña que no habla ni porque la saluden, y la ultima la del francés que cuida Rodolfo el que Chito llama de diferente forma, el que es papa de todas esas mujeres e hijos de la Aurora. A la izquierda de la tienda de don Eduardo esta la casita de don Antonio y su cincuentón hijo Onel, el viejo Antonio se le nota que viene de otro lado, habla con acento paisa y es blanco cascarrabias. Ahí diagonal esta Lizt y su tienda de café, al frente de ella los boyacos que administran o cuidan la Casona. Al frente de donde el escultor don Manuel Bohórquez, como pa’rriba quien va pa las Minas, está el Getto del Casino, era antes un casino, y que al mafio lo cogieron preso y le invadieron los necesitados, ahora hasta le venden a uno un pedazo de 5x5 en 2 millones, el altivo del suizo compro terrenos allá, tendrá su visión. Volviendo antes de entrar al getto; esta la casa de ese man que no compra sino cueros donde Lizt y que le robaron el tv mientras estaba borracho, y otras casas que me da es pereza hablar de ellas. De ahí pa’rriba quedan las Minas, Mundo Bonito y la entrada a esa tierra que le dieron a los desplazados de nombre Montecristo. A la derecha bajando de la tienda de Eduardo, esta la tienda de Ludiz, el billar de la mama de Jeison el que le pagan en el ejército 700 mil, dice que va a hacer carrera allá, buen chico él. De la tienda de Lizt pa´rriba, esta lo que llaman el Beverly Hills de Minca, la casa gigante del gerente de Aposmar de Barranquilla, la casa del sueco y su mulata, el amigo de Lizt de New Jersey, hasta el Chu tiene casas por allá, bueno y un resto mas de casas. Del puente para allá otro mundo de Minca, y bueno, en total el pueblo tiene unas 500 personas casi todos de estrato 1, más los finqueros, los con casa para temperar y los extranjeros y sus mulatas. A todos les doy los buenos días, y siento el palpitar de la comunidad con sus diferentes expresiones y emociones de acuerdo a la estación. Lo que me manda en un recuerdo a esa tierra donde vivían unos hippies en The Farm, tenían diferente funciones, fabricaban componentes electrónicos, fumaban marihuana todo el día, tenían caballos percherones que usaban los adolescentes, una banda de música rock o country rock folk, con los adolescentes toque en una banda de ellos la conga, nos presentamos ante la comunidad y ese micro de la conga estaba tan alto o yo tan high que se escucho hasta en Timbuku.
Donde vivo pasan dos ríos, al de la izquierda le digo el rio de las cascadas, el de la derecha el triangulo de las abejas. Las hijas del rio de las cascadas tienen una personalidad única y multifacética entre ellas. A veces cuando voy a la gran cascada a contemplarlas y a dialogar con ellas desde mi distancia, observo sus personalidades fundirse entre su hábitat, como María que habla sin parar todo el día un resto de contradicciones y se enoja si no comparto su pensar. Magdalena es llena de temores a todo, pretende ser silenciosa y tímidamente dulce, pero al acercarme demasiado, tiene espinas como la rosa del principito. Ana emocionalmente tiene que estar siempre haciendo algo en casa. Rebeca derrama sonrisitas todo el día a todos los animales que pasan y su mirada esta siempre invitando al juego. Marta coquetea su forma femenil a diestra y siniestra derramando colores. Los hijos del triangulo de las abejas, son muy parecidos; egoístas, machistas, controladores, malgeniados, celosos, falsos y vacíos. Desde el día que le dije al rio que no quería conocer sus hijas, las envió a que visitaran a los hijos del rio y pues ya saben lo bien que se entendieron, como dice mi amigo el cineasta; “perro come perra”.
Anoche vi murciélagos, puerco espines, tigrillos, zorros y me vencieron los bichos con antena de hormiga, las Ronda, pues volvieron a atacar la carpa y en la mitad de la madrugada me toco desmontar cambuche y volver a la otra planicie donde acampaba antes. El lado de la montaña del triangulo de las abejas es más salvaje, pero tiene más aves de canticos diversos, en la planicie hay bosques más altos que mantienen el área con menos bichos que en el monte cerrado de lianas y otras cosas con espinas. Las hormigas decentes de este lado del rio son otra onda, en las mañanas cuando desayuno les tiro migajas de pan que llevan a sus nidos, en cambio para las Ronda yo era su objetivo militar, al tiempo que se da la cumbre de Unasur, donde nuestro país no quiere encajar en el nuevo cambio social que se está dando desde hace años en Suramérica, nos tiene la USA manipulados totalmente con sus mecanismos de control, y además estamos contentos, recordemos que el efecto de contento en el ser humano lo limita al cambio o a lo nuevo. Somos como el último bastión de un talón de Aquiles que se derrumba, pero que al tiempo se sostiene en la Reina del Sur. Los caballeros de la mesa redonda de oriente cierran la partida de ajedrez con un fácil ataque de caballo y alfil.
Cambio de oficios de vez en cuando. Hace poco era jardinero remojador de plantas, feliche pegado de una manguera con potencia haciendo que los miembros de los seres verdes se pusieran bonitos y alegres y germinaran sus palos entre el aire liquido que les ofrecía a hojitas, raíces, florecillas y frutas. Hoy ya soy arquitecto y constructor de represas en ríos, comienzo colocando solidas bases de rocas que pesan y de ahí pa’rriba rellenando de hojas secas, rocas, palos podridos y arena del rio. Levanto la represa hasta las rodillas en riachuelos y sumergible en los caudalosos.
Los arboles llevan un silencio absoluto por dentro que hace eco en las voces que salen desde la tierra, son como testigos de muchos pensamientos ocultos. Los hijos de la Luz y los de las estrellas bajan a las profundidades terrestres a alumbrar las tinieblas y a volversen maestros y guías pasando por el reino del Hades sin que doña muerte los toque, volviéndosen maestros de sus experiencias para Hijos de Hombre.
El árbol deja que lo llamen de muchas formas, todo depende de su estado actual. Él se puede personificar muy bien en todas sus facetas, aunque siempre lleve ese silencio absoluto por dentro. A veces lo escucho susurrar, solamente musitando breves adioses cuando tiene forma de leño y le prendo candela para que me vea desde adentro del fuego porque después sale disipado y sonriente y dividido en forma de humo y con sus silencios en forma de cenizas que vuelven y caen para ser abono a sus semillas.
La faceta más multicolorida es cuando los carpinteros le dan formas con sus herramientas. Jesús el carpintero de Belén, cuando le ayudaba a papa José; hacían muebles, puertas, tablones, herramientas y hasta casas, una vez trabajo en un astillero en el mar de Galilea. En los tiempos libres, Jesús hacia esculturitas que dejaba por ahí o regalaba a sus amigos; el taller de José se incendio después de la muerte del Nazareno, y todos aquellos recuerdos se los llevo el viento cantando el silencio de la madera transformada.
Un árbol se vuelve tronco que sirve de asiento, cuando son más anchos sirven de bellos mesones. Sus raíces son lámparas que pulen los que saben. De algunas hojas hacen agua aromática y algunas flores alegran salones. De los bejucos hago atrapa-sueños. Las ramas secas que caen con el viento o en las tormentas, las desnudo y las coloco por ahí como seres “observantes”, como caminantes junto a los senderos de las gentes y pienso que son “ramas silenciosas”, que nadie sabe que están ahí; la gente cree que es un pedazo de palo que cayó de un árbol en forma chistosa.
Los palos se vuelven bastones, palillos, tacos de billar, utensilios de cocina, figurillas folclóricas que adornan hogares normales, oh, los maravillosos arboles del bosque encantado. De niño mi primera experiencia con un árbol, fue en un libro (hecho de arboles), era una historia que me cautivo sobre la vida de un abeto parlanchín, el abeto le sonreía al bosque y a un niño que lo visitaba, en el cuentico, el papa lo volvió leña, árbol de navidad y el abeto estaba triste, pero descubrió que era multiforme y cuando el hacha lo rozaba seguía sonriendo, se volvió compost, ceniza que susurra y en átomos voló con su eterna sonrisita en su último viaje con el frio viento de un bosque helado.
No crean esta historia que escribo, pues no sigue un curso claro, aun se desarrolla entre Berlín y Santa Marta, lo que pasa es que la negra Tomasa no sabe alemán y el bobo del Hunderwasser ni pio de Caribe, que es una sombra del español importado de Hispania con personalidad propia, con “C”, no con “K”, con k es contaminante, a veces yo lo escribo con k, que es ajeno al folclor de acá.
Al puercoespín le dan otro nombre, que zahino, al puma le dicen león y las aves se llaman diferentes. Las frutas y los arboles llevan otros apellidos; el banano es guineo, esto se llama Samaria, la Sierra es “el monte”, ir al mar es ir de baño, de farra es carnavaliar.
En los colegios rurales, difícilmente se estudia; fuera de los lunes que son feriados en Lokombia, están los tantos días del maestro, que llaman huelgas, que porque no les pagan, y cuando van, es reunión de profesores. A los profes les dicen “Seño”. En el pueblucho de 24 casas de La Tagua, el colegio tiene una alemana que les enseña ingles, sin documentos e ilegal, pero quien más quiere ir allá a enseñar?, nadie, tonces papa gobierno la tiene que apoyar. A ella le vale huevo todo, con tal que la dejen ir a enseñar, va a terminar enseñando de todo, porque los Seños no van. A ella le pagan de a poquito, lo que cada uno puede y así junta pal retaque y el humo, le dan casa pa que viva.
Los kilómetros y los metros son: “ahí no más” y “más allá abajito”, la hectárea es una cabuya, las cargas van en mula, solo la moto se llama moto y cuando hablan del $ diario, dicen que cien mil no se gana en un día ni el presidente. Todo es el Caribe, mientras que una niña de unos 5 años entra en la tienda donde estoy y me dice desde lejos: “oye nene, ven acá, esta julana?”
Antes de 1999, aun teníamos en nuestras manos el poder cambiarle la dirección al camino por donde íbamos, surgieron corrientes antes de esa fecha con anhelos de paz y cantaban canciones como: “maldita violencia porque no permites que reine la paz, que reine el amor…”, “All I need is Love”, etc., susurraban anhelantes cambios sobrenaturales, pero no los internos dentro de cada uno, entonces el príncipe de la guerra les metió droga y distracción en las cabezotas para que no se dieran cuenta de lo que estaba tramando, porque se le aparecieron fue como las flores en el campo... lástima que las masas que buscaban amor y paz no hubieran encontrado guías y maestros que les hubieran enseñado lo que había que hacer. La inconsciencia humana jugó un papel importantísimo al mantenerlos alegres entre las distracciones y vicios que los mandaron a manicomios, hospitales, cárceles, ataúdes… y algunos aun vagan por ahí medio disfrazados de corbata y otros de mendigos.
Hoy, después del 99, escucho gente dentro de una nota similar, quieren unir energías para cambiar la película, no saben tampoco que ya no hay vuelta atrás, que el tiempo que nos dieron ya venció, que ya no está en nuestras manos, que los Progenitores Mayores intervinieron, ya no hay rezo ni oración o mantra o energía de cualquier tipo que nos lleve a otro lado, zu spät. Los jinetes del apocalipsis los soltaron y la lluvia acida ya comenzó a caer, otrora en bellas gotas como las que veo arriba de la cascada, ahora en tormentas con truenos, rayos y relámpagos. Las nubes se chocan a cada siete segundos y ahora el poco tiempo es para encontrar la llave y la puerta por donde pasar al otro lado del escenario. La respuesta, dicen los que saben, esta dentro de uno.
Después de 26.000 billones o millones, se me olvida como es, de años en resurrecciones, aparecen los que llaman los 144.000 ancianos, los primeros ancianos de este kínder, algo retardados me parece, tantas resurrecciones y aun llenos de temores y odios. Los ancianos son los que triunfaron en el laberinto de las vidas, e iniciaron su vuelo de poder guardado entre lo más recóndito de la Sabiduría Eterna, parece que es un desarrollo espiritual que han alcanzado, se han integrado, por así ponerlo, al corazón de los nueve Súper-Universos. Esto se sucede mientras nosotros aquí estamos aun alcanzando la sima de la estupidez, y mientras el Dios Anciano de Días, Corazón del Sol Central de la galaxia, que envía su rayo de luz cada 5125 años con colosales cantidades de energías hacia todo su universo creado por Él y sus amigos (si lo captastes cuando paso?), todo para sincronizar su latido a toda la existencia que lo recibe dentro de Él y para Él. A todos los soles, a todos los planetas, a todos los seres vivos para conducirnos a una mejor y mayor armonía. Dicen los que conocen, que es una decisión voluntaria, al que quiera encontrar el Poder Interior elevando la vibración, la energía vital, cambiando temor por amor y la estupidez a la comprensión activando códigos genéticos dormidos por siglos y poder sentir el halito del universo, el corazón de la galaxia la nuestra. El tiempo es corto, dicen que la factura vence el 21 de diciembre del 2012. Los del vaticano y el rabinato judío tienen todo distorsionado a propósito en algo como una “conspiración del silencio”, hizque para no “herir confesiones religiosas”. Hay que sumergirse en el rio de la creación entre miríadas de soles y súper soles de nuestro universo como lo hicieron los Esenios y sentir el goce. La sangre de los justos clama venganza, y para juicio, desde los altos sueltan las bestias Leviatán y Behemoth alimentadas por conveniencia para llenar de religión y mentira sobre las ultimas naciones e implantar un “Nuevo Orden Mundial” donde se sentara el impostor de antiguo para luego de un corto tiempo ser destituido y todos sacrificados con aquellos que llego a convencer, porque la Segunda Venida es un decreto de Ley anunciada en todos los vigorosos documentos de revelación del planeta, ante los cuales la oscuridad aunque se oponga, como se ha opuesto, no tiene palabra de respuesta, y menos puede contravenir estos Decretos Supremos. La Verdad hoy toca con Luz la inteligencia espiritual de la humanidad y toma del agua de la eternidad. Los Maestros nos lo están cantando en versos, los veo en cada noticiero de la cuarta dimensión en sueños, lo dicen cuando mi alma cabalga el rio interno del Ahora Eterno, y luego en mi insipiencia voy y lo escribo en un cuaderno barato de colegio para enviárselo a mis pocos buenos amigos, es que soy como un reporterito loco de remate que traduce versos extraños en letras re-complicadas.
La gran nave, del tamaño de la luna, está muy cerca (y dele que sigo con esto) para iniciar con los que les dé la gana el Tercer Día de Creación, es como ser invitado a un grado más avanzado de la escuela con cuadernitos nuevos y colores y bolígrafos que nos regalan todos oliendo a nuevecitos y metidos dentro de una mochila escolar, con vestidito nuevo recién estrenado escogido por mama para nuestro primer día de clase después de unas largas vacaciones. Vacaciones donde me sumergía en las aguas del juego, donde no conocía ni el pasado ni el futuro, no existía nada, pues había ganado el año y podía jugar durante tres meses. A eso de las 7 pm escuchaba la voz de mama llamando para la cena a comer, a dormir, y al otro día igual.
La gran Nave Estelar del Rio de Cristal se acerca a cada segundo a nuestros días, no tiene maldición porque va tripulada en comando por del que se espera su segunda venida. Y saber que para poder haber llegado a oler esta nueva consciencia avanzada, le tomo a mi alma medio millón de años entre mutaciones espirituales pa salir del homo primíparos, lactando ahora ultimo un cambio en la cuántica al transformar moléculas de materia densa e inerte en formas existentes mas fotónicas de energía solar, como les decía anteriormente.
Me dijeron que para alejarnos de la tortura de una existencia que duele al saber que la cargamos como cruz de calvario hacia un matadero de fosa común, donde se nos roban la luz interna de cada célula… como dice el himno nacional: “ceso la horrible noche, la libertad sublime, derrama las auroras de su invencible luz. La humanidad entera que entre cadenas gime comprende las palabras del que murió en la cruz”. Debo salir gateando, después de estar agonizando y mamado por haber sido sometido a un proceso perverso de muerte lenta. Mi transmutación comenzó y me desvanezco lentamente del mundo por un tiempo, aunque a veces me encuentra mi hermano Jota al otro lado del celular. Pero sigo buscando en esta ansia de sed para cubrir la primera parte de un reportaje para la revista del “Pueblo”, que me sumerge en el túnel del tiempo-espacio, el mismo que antes había visitado en un sensible viaje de hongos al centro de la tierra que me abrió la puerta al más allá, que es un más acá… y mi corazón palpita y siento las pulsaciones que van en siete halitos de sentimientos conectados al origen del Todo y me vuelvo un cristal que reluce y palpita en un nuevo cuerpo de consciencia.
Jesús enfrento sin miedo y avanzo en Poder y Autoridad hacia el reto que se le presentaba al enfrentar al imperio que le asesina más tarde, superando la muerte y los reinos de las tinieblas, dejándome a mí, insuficiente bicho lleno de dilemas, la puerta abierta y sin límites para cruzarla sin miedo y con Poder hacia la inmortalidad de los espacios espirituales siguiendo la máxima Ley Eterna del gran Misterio Supremo. Claro que para ello me toco salirme de todos los vicios que por imitador o por temor asimile en mis pocos años sobre las calles del cemento; deseché la perversidad como emoción no-grata de mala consecuencia a mi movimiento; y la más difícil tarea de todas: dejar el miedo y el odio, y acercarme un poco más al Silencio donde nació la Creación entre la Siempre Sustancia de Ella, que es la Sangre que alimenta el centro de todas las humanidades.
Y así fue que un día desperté y comenzó mi viaje sin boleto de regreso, con una fuerza interna a mi servicio que me llevaba directo al origen de mi creación. Escucho Su Voz llamándome en medio de silencios y palpitaciones, lejos de las tormentas, ahora Yo Soy, sin miedo u odio, así como se enfrento Jesús a los dominios de la sinagoga y a la muerte, que estaban poseídos por el odio, y tienen miedo y caminan inseguros creando injusticias a su paso; su ser interno lo sabe y es por ello que tienen miedo y terror, y este los entrega al odio donde pierden sus conciencias y se les aparecen sus crímenes y se disfrazan para ocultarlos vistiéndose de aquello que más les hace falta: el religioso se viste de habito porque le hace falta religión, el soldado de armas porque le hace falta valor, el diplomático de leva porque le hace falta pulcritud, el juez de toga porque le hace falta justicia. El uniforme anuncia una virtud ausente… higiene que le hace falta al camarero, pureza a la novia y orden al policía.
El silencio del amor penetra como el agua en todos los poros de mi inerte cuerpo, la corteza del árbol me siente, su piel colorea mis ojos, lo siento en las yemas de mis dedos y me deja sentir todo lo que fluye dentro de su núcleo, es su agua de vida que lo alimenta, de corteza en corteza, de anillo en anillo de poro a célula vegetal, es su consciencia de árbol lo que me maravilla, su esencia como compañero del planeta. El se roza con todos los otros árboles del bosque y me escucha en silencio mientras le escribo esta oda. Sus hojitas se extienden para que la piel de mis dedos las acaricie, sus ramas abrazan mis pensamientos, juntándose todas ellas más allá del viento entre las nubes de la alta montaña y les digo: las amo queridas!
Llueve, y no llueve cualquier agua, llueve torrencialmente duro estilo Sierra Nevada, me fascina la lluvia verla caer desde la montaña, desde la parte alta de la cascada, donde caen gotas veloces y gruesas desde las nubes húmedas, caen como en la película Matrix, me gusta ver llover sobre la tierra, y me da por pensar como seria ver llover el día del diluvio, aunque dicen los Maestros que el cuento de Noé y su arca llena de animalitos, es un cuento chino de los Mazos. Él solo se llevo su gente y se escondió en una cueva. El estilo de crear un arca con animales emparejados y que la paloma y que la ramita y que Adán y Eva desnudos, y que la manzana y que tantos cuentos que los Mazos inventaron cuando alteraron los libros de antiguo que arrejuntaron en algo que ellos llamaron la biblia, para cambiar la historia de la historia original del origen del hombre y muchos de sus pasajes. Pero para que onda si de todos modos a la mayoría le da miedo tenaz leer la biblia, les es más fácil para ellos creerle a Darwin, a Descartes, a Einstein, a Newton, al vaticano, al pastor de la esquina, a los rabinos, al presidente, a los gringos reyes de los cuentos chinos y ni chino era Bruce Lee, era americano nacido en San Francisco, un Cisco Kid; y no crean que soy fan de BL, es que me acabe de ver la movie de la vida de ese man y me parece que lo mandaron a matar los envidiosos racistas de Hollywood y ya saben quiénes eran los dueños de ese lugar por allá en los años 70’s. Una sensación de gusto me da ahora cuando veo una cinta de esa época, son todas hechas como a lo comic, las frases que dicen y las escenas tan chistosas, sus maneras de vestir y el color del filme. Creo que me pondré a ver cine de los setentas.
La lluvia deja y amaina el camino al viento, los relámpagos aun persisten en el tumulto inserto, los rayos cuentan las distancias donde van a ir a caer. Es la historia de amor de las nubes, que en su alegato de amantes, revientan centellas que nos caen húmedas y en fuego. La historia de amor de las nubes difiere de las humanas en poco, todo el día de sol se pasean y se pasean, se van llamando poco a poco desde esa atracción definitiva e inevitable de cargas positivas y negativas, hasta que se forma el nubarrón y la luna de miel les llega. El humano por su vacio interno en la búsqueda espiritual inconsciente de lo que le hace falta, y esa parte consciente de su femenino o masculino opuesto, dependiendo del caso, anda como nube distraído mirando a todo lado en busca de su amante más próximo. Al principio en el habito y la necesidad de estar ligado al sexo opuesto, que en la primera noche de amor siente por breves segundos el Amor del Todo que lo deja ligado e iniciado, y pensando que solo con aquella otra persona le podría encontrar a ese Amor sentido. Pero no en esta época, la vida en pareja es más difícil que el convivir con una Mapana, abundan los solteros y los padres criando al hijo en solitario. Muchos han escogido el color gay que el mundo le ofrece por entre la autopista del terror a la soledad, untada de carbones hirvientes de pieles que revientan los órganos procreativos, al fin y al cabo a todos y a cada uno dentro de su propio infierno o su intima calma.
La ultima amada me dijo que no podía seguir conmigo el viaje (en un email desde el polo), sus preocupaciones sociales le hicieron relampaguear su fluir de vida en dirección opuesta, pero fue una hermosa experiencia de “amor” humano que me hizo dar cuenta de una y por todas de mis tantas debilidades que aun mantengo pegadas al ego y por lo consiguiente me toco conectarme a mi Ahora, vía directa del totazo, tratando de estar consciente y buscando el bosque silencioso de la espera, a las voces de los vecinos que susurraban palabras al eco de los vientos. Los rayos y los truenos siguen cantando sus amores, ya no les doy importancia a sus alegatos, al contrario, cuando cae un rayo en la distancia, me gustan los surcos que labra en el cielo oscuro. Era conveniente que me quedara en solitario otra vez, la senda ésta difícil del espíritu, hay que transitarla descalzo y solo.
Muchos de los diálogos con el Sol, son entre él y mi ego, al ego lo llaman es de la luna desde el dark side of the moon. El sol busca la consciencia, la luna la razón pensante emocional confusa entre el pasado sufriente o lleno de anhelos y un futuro invisible plagado de trampas inconclusas y falsas que pone a la mente en un estado gravitacional que se cree sol. Para sacarle al Sol la info para este reportaje, me toco meter el dedo en la llama y hacer de cuenta que era invisible.
A mi última amada le acaricie el pensamiento de su cabellera rubia contra el sol por una semana solamente, ya estaba montada cuando la conocí, en un tren sin retorno que se sumergía en el mar de las distancias, lo bueno fue que solo se vivió el principio del planetica acariciador de la miel antes de que comenzaran los egos a enfrentarse. Se esfumo y quedo en el recuerdo, lo que me dio tiempo a ver las caras de estúpido enamorado que tenía yo en las fotos que salpicaba el álbum de nuestras emociones. Cuantas caras de pendejos y pendejas no salen por ese balcón invisible de nuestros álbumes familiares donde se escriben las fechas que las palabras de una bonita canción esculpió. Al poco tiempo van estos álbumes a parar al baúl de las sinfonías silenciosas y polvorientas que ni ellos mismos recuerdan porque a los meses o semanas ya están otra vez como las nubes en día de sol llenándose de electrones en corto circuito… seudo masoquismo inconsciente.
De que nos sirve llenar un útero de algún espíritu viviente, si ya todos fueron expuestos y reciclados, y los que son mitad extraterrestre como yo, ya nacieron y estamos por ahí defecando evoluciones mentales internas a millón, a ver si no comemos del polvo de los silencios o de la epopeya irreal y llena de luces de las atracciones que conoce bien el sistema de los medios de comunicación dentro del cubo del tv, en un estadio, en una olla donde venden vicio, en la licorera más cercana o la más cache, o entre el deseo competencial por aparentar ser parte de la superficie tangible de un medio electrónico de ultramoda. O si se es una chica, entre la plástica y la cirugía, entre las historias de chicos y chicas y el color rosa de la inocencia de un príncipe que las haga reír y sentir bien pero que sea más alto y solo dos años mayor que ella. Lo que me recuerda la historia aquella del castillo de Juliana y el guerrero que se fue a visitar otros mundos.
Un metro bajo tierra penetra la pala y el azadón, buscando como encontrar el nivel donde instalar una carpa en medio del bosque. Dos horas más tarde, los músculos goteando sudor caminaron hasta las corrientes del agua sobre la tierra, existía la necesidad del húmedo elemento para aligerar el clima de la piel.
Una cascada emerge imponente y complaciente, altiva y riesgosa, estaban algo turbia sus aguas, parece que arriba alto en la Sierra aun llovía. Los temores de otros días cuando se desbordaban ríos colombianos salvajes, traen del recuerdo un toque de temor al momento. Pero había que ascender otra vez la cascada, pero usando la ruta por donde cae el agua. Lo difícil comenzaba a unos siete metros, donde los dedos de las manos buscan impacientes como pegarse a cualquier saliente rocosa, quería seguir el código del escalador, de no cogerme de un árbol o de las lianas o matorrales, solo de la roca. A eso de los diez metros, el sonido del agua se hace intenso y quiere atiborrar la concentración y disparar el gatillo de los azares, pero la consciencia que va pegada al momento y a la roca, vence y me agarro de más arriba, de lo más mínimo e imposible, dentro de una roca cubierta de agua que cae y me baña… hasta que lo logro. Después aparecen otras dificultades a evadir entre los vaivenes de la adrenalina: renacuajos y lagartos que saltan de las cuevas adyacentes… hasta que llego a la última recta del tramo extremo para culminar los 30 metros y descansar antes de los últimos cinco, que son más suave. Abajo queda la represa manualmente hechiza, y el agradecimiento de saber que la cascada me había dado permiso para que la subiera en su lado húmedo. Recordaba a cada agarrón de los salientes, las enseñanzas en automático del Germani en como los dedos se vuelven es como garfios y los pies esporas que se pegan, y cada miembro se concentra en su movimiento distribuyendo todo el peso en los músculos hacia la roca, haciéndole sentir a la gravedad que soy lagartija y que peso como una pluma.
Los animales son mas agiles y tienen dones extraordinarios. Miro a los perros por ejemplo, y por el corto tiempo que están con nosotros nos dan de ellos lo máximo, su entrega total, sus dulces miradas, la misma siempre, aunque les demos pata o los llevemos al veterinario para que le pongan la inyección fatal (sino es que les pegamos un tiro o los tiramos a la calle en un barrio del sur) por viejitos, porque ya no nos los aguantamos, los desagradecidos somos nosotros... las caucheras despedazan plumas, los anzuelos escamas, los rifles pieles, los cuchillos cercenan la amistad que podría existir entre el reino animal y el reino tirano del hombre. El reino vegetal observa en silencio mientras lo incendian y el mineral sangra cuando las multinacionales de los Mazos los llevan de paseo en tren o en buque al servicio de los grandes intereses…
los pasos rutilantes de los animales en el bosque,
el bosquejeo artístico del viento sobre las nubes,
el pinceleo colorial de los rayos del sol sobre el horizonte,
el surco del ave en el cielo virgen,
las líneas del agua en los vértices de las rocas,
la línea de dolor de una mujer en la calle,
los giros que hace la raíz en tierra penetrada…
Pero sé tan poco. En estas columnas del semanario “El Solar”, me dieron la libertad de escribir lo que se me antoje, dentro de un sentir de escribidor. El Sol me trasmitió cierta información que en de verdad es bien trascendental, como me dice mi hermano Jota. Pero como salirme de este cuento, si toda la Creación vive conectada al mismo servidor. Solo los que les da miedo ver la verdad, se esconden en capas de cebolla superficiales.
Pasos sobre la arena del rio, huellas de otros seres, surcos de raíces entre las huellas de las aguas… un pedazo de barro sobre la piel húmeda deja detectando el sabor de los monos aulladores en el consciente, y me doy cuenta entre la manigua que si me encuentro cara a cara con esa tribu de monos que viven por acá, no sé ni cómo reaccionarían ni ellos ni yo, entonces unto de barro toda mi piel hizque para que no me detecten y me penetro más, me llega un olor fuerte y distinto, orgánico y pesado, pero atrayente, creándome un sentido por investigar que animal es, pero al momento siento que yo soy el observado, no veo nada ni nadie, el silencio es testigo que pase por su parche, más las huellas invisibles sobre el liquido del barro que me saque del cuerpo… fueron el adiós a sus miradas, miradas con ojos de animal.
Durante la última represa que estaba construyendo, mientras permanecía por más de dos horas sumergido entre h2o, arena, rocas, piedritas, y palos; el ego al tiempo trataba de sobrevivir trayéndome pensamientos nada que ver, entonces lo contrate de ayudante para mi cerebro para que me echara una mano al escribir cuentos colombianados, usando esa su imaginación.
Trepe la cascada otra vez por la ruta de la caída del agua, sentí que era más interesante y placentera escalarla a medida que los temores se desvanecían, pues se le aparecen a mis sentidos más salientes de rocas de donde colgarme. Hoy los dos tramos difíciles de la cascada fueron más suaves, lo único que si debe permanecer prendido a la pared, es la consciencia de lo que se está haciendo, pueden aparecer rocas resbaladizas aun en los lugares más seguros, 30 metros son 30 metros, y son para mí, en mi principiante mundo de la escalada -cada palmo al frente, de respeto, como también maravilloso.
En este experimento que estoy metido, en alejarme cada vez más de las metodologías sociales y sus funcionamientos, de los que le quiere meter a uno el sistema por todos lados. Me encuentro después de tres años de este sumergimiento, en una aventura fascinante que me hace sentir a veces como un Túpac de la selva. El experimento ha rendido resultados muy interesantes en lo que respecta a mantener el ego en un estado de desnudes feroz. Imagínensen que cada vez tengo menos objetos materiales a mi disposición, el más grande juguete por ahora es un portátil que dejo en casa de alguien, o sea que puedo pasar hasta tres días sumergido en un bosque de 70 hectáreas en la finca de mi amigo Oskar, y al tiempo sentirme que no soy dueño de nada: no casa, no carro, no cuenta de bancos menos sus tarjetas, nada del seguro, y menos los vecinos. Así estoy saliendo de la ilusión de tener propiedades, claro que renunciar a tener cosas no necesariamente me saca al ego del todo, porque se viene don ego a creerse ahora el más tenaz, que hizque como camino en una senda con un mínimo de posesiones, entonces el ya va a creerse superior, inferior, o mejor o pésimo, en el más directo camino o el peor camino de la vida en comparación con otras personas del rededor, él siempre comparando.
Los indígenas se sentían antes, que pertenecían a la tierra, luego llegaron los europeos con los papeles de propiedad e hicieron sentir al indígena en América: que ellos pertenecían a la tierra, pero que la tierra no les pertenecía.
Como no se puede estar separado de las cosas, al menos mientras nos cubra un cuerpo molecular solido e inerte y dependiente, aparentemente mutante; entonces el emblema al vestido del ego, es no estar uno dependiendo de las cosas o apegado a ellas de una forma que se identifiquen como parte de uno mismo.
Meterse a profundizar un pensamiento, una idea, o una frase, ponen a la mente a trabajar tiempo extra al servicio de uno mismo, sin dejarla que ande como loca desbordada soltando emociones mentales o egoísta proposiciones. Ayer analizaba el hecho de estar experimentando hasta dónde puedo llegar despegado de las cosas, vi que existen algunas a las que no quiero volver de seguro, como a tener una cuenta bancaria y sus tarjeticas debito-crédito que le quieren obsequiar a uno facilito. Comentaba el otro día con la gente, no en broma sino como algo real el experimento este que estoy haciendo, al volver a estar solo me puse a ver que no lograba comprender si en esos momentos deje fue a mi ego volar creyéndose alguien, o cerraba el broche de una etapa en mi estadía en la Sierra Nevada de Santa Marta.
Descubro con el andar en esto del experimento unas situaciones que se van volviendo básicas dentro de él: como sentir el espíritu de nómada encendido a cada momento dado que no se sabe cuando la persona que lo hospeda a uno se harta de verte, o tiene mejores planes para la casa o la finca donde se esté hospedado. Es mejor no vivir con otra gente a menos que sean de la misma tribu, y es complicado con una pareja, la mejor opción es una finca espaciosa donde se pueda colocar la carpa bien lejos y que uno la pueda cambiar de sitio a gusto, dependiendo ya de las inclemencias del tiempo o del humor de los animales de la zona. Otra básica es no comprar tierra ni pagar arriendo, lo que con lleva a otro principio: Servir. El estar hospedados en tierra ajena nos obliga a aprender a ser serviciales con los anfitriones, y tener los sentidos abiertos a detalles sugeridos para adelantarse a situaciones.
Lo bueno, por así decirlo, del experimento, es que reduce los gastos a solo cubrir la alimentación y de vez en cuando algo en el transporte, lo que le reduce el tiempo a la sobre-vivencia, asiendo que el laboro se centre en una manifestación dentro de la creatividad como expresión y método de sustento; este puede darse en las artes, las artesanías u obras manuales, y se debe vivir cerca de áreas frecuentadas por turistas para salir de estos producidos.
Una base que se me olvidaba, es no volverse asocial, se debe estar periódicamente yendo a una zona urbana cercana donde se reúna gente, o a la casa principal de la finca, a la tienda del pueblo, o donde los conocidos y amigos para no perder la conexión con la comunicación y la cordura. Sintiendo también al tiempo, que es una buenísima experiencia el alejarse unos dos o tres días dentro del bosque o la selva y poder descubrir dentro de uno: movimientos primitivos que unen al Ser con lo que Es, dentro de nuestra naturaleza compleja y alrededor del todo, expresándonos y jugando con ellos o mezclándose con el medio que lo rodea. Por ejemplo me unto de barro totalmente y me arriesgo a caminar solo y sin nada entre la selva, esa que está al frente mío, créanme es una sensación totalmente nueva, o a buscar animales y jugar a ser uno de ellos.
Al tiempo de que esta sensación se descubre, le salen al cerebro sonidos primates desconocidos, inexplorados para el normal sapiens mundano, pero que definitivamente afloran dejándolo a uno aterrado al saber que se tienen dichos ecos vocales internos y movimientos desconocidos sin uso, que están como dormidos en un supra-consciente. Lo que me hace pensar en este mismo momento, si serán recuerdos de primeras encarnaciones del espíritu, cuando vivió en lo Cro-Magnon. Será que Darwin descubrió estos sonidos primates en él, para salir con esa teoría?... pero claro que nada que ver Darwin y su evolución, porque la evolución existe y no se niega pero con diferentes variables y no todos descendemos del mono.
Los que son como yo por ejemplo, bichos raros, son mitad extra-terrestre y mitad homo-sapiens primitivo, nacemos con demonios (o desperfectos por así decirlo), por dentro heredados de una genética invisible y ajena, que debemos enfrentar a tiempo, sino se pasan a los hijos. Como aquel demonio gigante con armadura y espada que solo quería destruirme y aniquilarme. Fue en una batalla que lidiamos donde sentí la sensación de muerte bien cerca cuando me golpeaba con su espada gigante. Las armas espirituales que me toco usar me volvían a traer a la lucha, hasta que después de una larga contienda lo pude vencer, me dejo agotado, pero se elimino como a un virus y lo pude ver desvanecer.
Otro demonio que me toco sacar era como una plasta pegada a superficies, viven dentro de uno haciéndole hacer pendejadas, cuando lo saque después de un breve encuentro, salió como una plasta gelatinosa oscura de unos 50 cms de diámetro, muy veloz, al salir se desplazo por la cama y bajo al piso para meterse dentro de la tierra.
Me pregunto ahora, es que hacían dentro de mí?, el gigante buscaba asesinarme, el otro era como una raíz virulenta que alimentaba comportamientos erróneos que se manifestaban como imprudencias, rabietas, violencia, odio, ceguera espiritual, recaimiento a ciclos repetitivos periódicos de errores, o convivencias con metodologías o formas equivocas de actitud. Lo que me recuerda a cierta personita con subido ego adolescente diciendo que ya uno no necesita en preguntarles nada a los viejos, que todo lo encuentra en el internet. Actitudes heredadas con direccional errada pero permitidas y validas dentro de esta sociedad y su status quo.
Los análisis del “Yo” varían de libro en libro. En una vista rápida al pensamiento de Descartes: “Pienso luego Existo”, un par de puntos de vista de unos filósofos están de acuerdo en algo básico; que la premisa es errada. Puede ser que en esta etapa de evolución, la consciencia ya pueda ver dónde está la limitación de profundidad que nos hace pensar que le falta algo a la premisa de Descartes. Él llegó a escuchar una cantidad de pensamientos que le fluían y determino que al estar consciente de ello, le daba una razón de ser… él era y al saber que pensaba, se apropiaba de una identidad; pero en lugar de haber caminado hasta lo último para encontrar la Verdad, descubrió fue la raíz del ego sin saberlo. Después de 300 años un man de nombre Sartre profundizó en el análisis, y dijo que la consciencia que dice “Yo Soy”, no es la misma que piensa, o sea que cuando me doy cuenta y realizo que estoy pensando, esa realización no es parte del pensamiento, hay otra dimensión de consciencia, es algo más profundo que Sartre superfició sin digerir completamente lo que decía, pues estaba demasiado ligado aun a pensamientos. Ciertos analistas ven a los pensamientos como las identidades donde se apoya algo interno en el hombre llamado ego, y la nueva dimensión de consciencia como el ingrediente vital para una realización espiritual.
La palabra “Escritos Inestables” hace mella solo en lo que hago en la escritura: todo lo que pienso, hago y soy dentro de ella es por ahora casual, significando que tiene una base mutante en el aspecto físico y en el invisible, por consiguiente mantiene todo lo mío variable, sutil, cambiable y ajustable a un tiempo que depende solo de su propio ahora conectado a un Gran Ahora universal que se va manifestando poco a poco. En otras palabras, lo que leas ahora, más tarde habrá cambiado en algo diferente por estar ligado a un pensamiento universal en crecimiento continuo, y lógicamente dependiendo de un punto de observación limitado debido a mi propia ignorancia. Lo maravilloso del asunto es que este Ahora universal esta empujándose, por una inercia dimensional, hacia la, o entre la nuestra realidad física de la 3D, haciéndola, o mejor dicho, quebrándole todas las estructuras con las que se mantiene; y como el ego vive es de las formas caprichosas que puede coger del pensamiento que sobrevive el 3D, el Ahora universal lo desplaza lentamente, haciendo que los individuos mutantes se conviertan a una estructura variante junto al proceso evolutivo de este planeta hacia la 5D.
Existe un pensamiento o una descripción sobre ese análisis del “pienso luego existo” (continua hablando el Sol en su monologo) más completo y mas conectado con el Ahora universal que pasare a compartir con Uds. más adelante, por ahora veamos los tipos de reflejos que el ego sublima en las masas mentales.
Por ejemplo, al analizar la cultura Maya, en ella existían los que estaban en pacto con los grandes rituales donde sacrificaban seres humanos sacándoles el corazón que ofrecían a sus dioses en beneficio de alguna necesidad o dádiva en cumplimiento; mientras que al mismo tiempo existía dentro de esa misma cultura los astrónomos y visionarios que leían las estrellas y el futuro ayudados por seres extra terrestres que se reencarnaban en diferentes eras para auxiliar el desarrollo de la consciencia humana, o para avanzarla más rápido, dada la inercia evolutiva, que por sí sola es incapaz de realizar el ser humano.
En tierra santa en época de Jesús, había un grupo de hombres que llamaban los Esenios quienes vivían totalmente en desacuerdo con las imposiciones rabínicas del seculado que dirigía las masas de seguidores religiosos. También existía el tipo de ser humano sencillo con sus imperfecciones humanas y sensible que seguía al Nazareno en sus predicas. Había un sistema público político de un imperio que regía y al cual seguían la mayoría de las gentes y todos los diferentes grupos socio-culturales pensantes-actuantes. Además de que en Judea predominaba el rabinato y su ortodoxia ciega religiosa que representaba en si una organización dictada por pensamientos humanos contradictorios y oscuros.
En pleno siglo XXI aun están los descendientes de los que maltrataron la info secreta que se les entrego de siglos a, y que hoy por hoy manejan al mundo llevándolo hacia el monopolio de unos dioses invisibles que los agrupan en globalizaciones y tratan de conducir el funcionamiento de otros seres nada creativos que persiguen y predican las formulas audio visuales que escupen sus medios de información masiva.
Pocos eructan la mala informática y empujan sus consciencias en busca de algo desconocido que nunca se les ha enseñado y que solo sienten dentro de su interior como una voz que les llama. Otros no saben nada de nada y vegetan en tradiciones o folclorismos repetitivos que los mantiene feliz gravitando alrededor de esferas primitivas de funcionamiento ajenas a todo avance y a toda realización de consciencia.
En cualquiera de los ejemplos y de cualquier otro externo que aparezca, demuestran a priori lo “avanzado” de la civilización humana que se caracteriza en avaluar su progreso evolutivo sobre diferentes pensamientos todos ego-centrados y ligados a apariencias que se van ingeniando con una tecnología de momento que distrae, en vez de dedicarse a realizar sus consciencias en dirección del Ahora universal.
En detalles las variables humanoides se pueden definir así:
La primera es difícil de explicar porque puede dar a erradas mal interpretaciones o a burlas o crear reacciones como de locura en cierta gente al escucharlas: son cierta raza de extra terrestres de procedencia de Orión con aspectos físicos originales como de lagartos o serpientes, camuflados en apariencias humanas que vinieron al planeta desde sus comienzos con una misión específica y de acuerdo a un plan arquitectado y orquestado por hordas de la oscuridad. Raza que se mezclo con el homo sapiens desde sus orígenes en una violación a la creación del universo y han ido alterando la historia para sus propios fines en escuelas, universidades, por siglos acostumbrando al hombre, a conceptos e ideas manipulados estos sutil y malignamente para acompañar los propósitos de un plan. De esta unión aparecieron los Mazos que vino a desembocar en los Judio-Mazonicos y sus códigos y ansias de apoderarse completamente del sistema mundial a través de la religión, la política, la economía y la guerra. La raza cumple y sigue órdenes superiores que vienen de la oscuridad manifestadas desde la “primera raza humana” camuflada de extra terrestres para, según ellos, apoderarse del planeta (yo mismo se que suena chiflado esto, tienen que investigar por Uds. mismos).
Vienen los Cro-Magnon, seres humanos no mezclados con los care lagartos, usados como instrumentos o herramientas de trabajo por los Mazos, son la masa que sigue parámetros de violencia por inercia y auto destrucción inconsciente; usados hábilmente por el otro tipo de humano para realizar los trabajos “inferiores” que no quieren realizar.
Están también los homo-sapiens, más avanzados que el anterior y de naturaleza humana. Descendientes del Adán primitivo original y la Eva a través de Set su hijo que lleva el gen virulento que en la creación le implanto la oscuridad, el gen de violencia (ver reportaje sobre gen de violencia que canal RCN publicó), este tipo de violencia no es que haga al ser violento, sino que al estar el gen oculto hace reaccionar al ser humano con violencia en la mayoría de sus situaciones de una forma inconsciente. Gen implantado en su ADN que lo hace vivir voluble entre la oscuridad y la Luz, muchos de estos individuos actúan como ovejas que siguen a un líder y viven sin poder salir de su inconsciencia atraídos por la inercia de hacer solo lo que les alimenta sus sentidos, que distrae y engaña a hacer lo más fácil, que es lo que procede de la oscuridad. Pocos entre estos mismos recuerdan, por así decir, lo que son, y escuchan la voz del interior de su ser Hijo de Hombre que fue el que les encarno la carne para nutrirles con alimento de lo alto espiritual sus cuerpos y buscar así una vida sin muerte, eterna y convertidos en Hombres “9”, mutantes, si es que sus reencarnaciones y evolución les lleva a ese punto de conciencia universal.
Se desprende otro tipo de ser humano (dice el Sol) son los homo sapiens que se han mezclado con extra terrestres de las Pleyades que vienen a realizar misiones de apoyo, que lógicamente tienen que pasar por el proceso de dejar su estado “hombre 6” que está en sus genes homo sapiens y al entrar en contacto con su hombre interno y escuchar las lecturas dimensionales que necesitan para moverse en el ahora mutante del universo en la latitud como Hombre 9, cambian y evolucionan.
Por últimos están los Hombres de las Estrellas que están como seres humanos en la tierra para no solo balancear el peso de la oscuridad, sino para hacer posible el cambio dimensional al que debe entrar el planeta y sus escogidos que serian de los últimos dos tipos de Humanos descritos. Ellos realizan su misión espiritual de ajuste al cambio energético que se está dando desde el año 1999, estos seres extraterrestres de la Luz, pueden ser también los Hijos de los Santos del universo y en misiones especiales o los Hijos de la Luz que llaman ángeles.
En el tiempo de mi temprana adolescencia, me escuche un verso cargado de rebeldía que titulaba: “todo vale huevo”, yo tenía casi todos los cuadernos del colegio marcados al comienzo o en la última hoja con esa marca de letras. El principio de esa frase digna su análisis al dar como asentado que nada es importante, refiriéndose al todo físico visual del mundo, lo mismo que a aquellas emociones ligadas a ese todo. Como adolescente realicé para mi, sin conocer el principio de que todo es una ilusión, sintiendo lo indispensable de estar presente en un ahora consciente, lo que me llevo a afirmar ese teorema (téngase en cuenta que al mencionar “ilusión” en este caso, se refiere a la ilusión que quiere crearle a uno el mundo de las cosas visibles), el teorema que emergió, me imagino, en un momento de desilusión acnéal. Lo mágico de la adolescencia es la adrenalina que corre alocadamente por las venas en forma permanente cuando se está al frente de cualquier situación, colocando al tierno discípulo de la vida, al volante de un coche de carreras a la velocidad de la luz y con los nervios untados de la brea oscura del riesgoso arte de vivir al límite de la ligereza sobre el filo de una hoja de afeitar. Todo vale huevo, nada es vitalmente indeleble o de una gran importancia como para guardarlo en el cofre del alma, refiriéndose en aquel entonces a videos que diez años más tarde, el mismo adolescente incorpora a su vivir como vitales ingredientes para poder moverse en un mundo ágilmente agresivo en cuanto al hecho de estar infundando notas prefabricadas a los seres libre. Descartando la inexperiencia, es rescatable la actitud sobria de afrontar los retos, las pruebas, los dilemas, las personas desconocidas, el parche, el mundo de los adultos y otros retos íntimos que son manipulados por cortinas internas inexistentes que tapan o cubren inmediatamente mundos desconocidos, preguntas complicadas, el no saber algo, el temor a ser descubierto dentro de un camuflaje, etc.… oh, la adolescencia!
Dentro del agua puedo mover rocas más fácilmente, aunque sean de mucho peso; de forma que la fuerza muscular al levantar una de ellas del lado que viene la corriente, esta le ayuda a uno a darle vuelta para trasladarla al lugar deseado de la represa que estoy construyendo debajo de la cascada. Traté de trasladar la roca mentalmente, pensé en que su existencia era una ilusión física y me salí de mi inercia corporal, y el “Yo Soy” mío alargo las manos para levantar la roca, pero se me olvido un pequeño detalle, estaba sumergida bajo ¼ de tonelada de arena y piedritas, se me paso por alto incluir la arena y las piedrillas también. La roca permaneció estática e inmovible… lo bello al penetrar en ella, fue que descubrí parte del amor que contiene la roca, y cuando voltee a mirar a mi rededor a los arboles, las hojas, el agua, la arena entre mis pies y el todo de la cascada, estaba todo cargado de un no sé qué liviano y cálido que tocaba mi alma, como una conectividad de sensación similar a cuando me enchufo con la Luz del Cristal en lo Alto.
Mi amiga Lizt tuvo un sueño apocalíptico, según ella, donde llovían piedras y no había donde esconderse (esto es antes de que hubiera salido esa película de Hollywood el 2012), mientras las aguas se movían por toda la tierra. Mi amigo el escultor don Manuel, vio en su toma de yagé una nave espacial muy cerca como encima de ellos, que los observaba e irradiaba luces y colores. Anoche soñé que andaba con un grupo de personas donde uno de ellos era muy inquieto, estábamos en fila, don Manuel era parte del grupo y creo que la flaca Sofi también; andábamos entre caminos despavimentados, en una especie de bosque o selva, entrabamos y salíamos de un vehículo ovalado en el que nos desplazábamos, era una como nave que se movía entre los caminos de esa selva sin tocar la tierra, pero sin volar por entre el espacio, parece que su misión era explicita. Ayer sentí en mis pies la sensación de vibración del espacio, y pensé que iba a temblar fuerte muy pronto.
Si pienso sin saberlo, estoy en estado de inconsciencia, si estoy consciente de los pensamientos entrantes, estoy escribiendo, si dejo de pensar, existo en la realidad interna del “Yo Soy” universal. Si existo en este ahora consciente físico, es porque me encuentro en proceso de evolución del Yo interno. El día que no tenga que cerrar los ojos, sino que solo exista, dejo de ser una ilusión de moléculas atadas e inertes entre sí desempeñando un rol desde la evolución primitiva de una humanidad superior que se encuentra en un nivel de prueba o de un crecimiento de transición del Yo Soy, que cuando lo digo a voz alta en medio del silencio del bosque, todo mi rededor me escucha y se me “une”, saben que estoy allí presente y sienten que también son reflejos del espejo de esa existencia.
En las librerías del planeta humano, abundan los libros sobre el nuevo despertar de la consciencia humana y sobre mantenerse alerta y conocer el pensamiento del ego mental. Muchos de los libros basan sus diálogos siguiendo el mismo principio de reflexión de los filósofos de antaño, en sentir y pensar o meditar una frase, una pregunta, una inquietud, y rellenar de ideas nuevas y respuestas un compendio de posibles soluciones que el ego mental tiende a hacer ver como la última gran verdad a la que se tiene que acoger la oveja del común que no piensa sino que sigue. Pero lo fascinante es que si pudiéramos dejar pasar fácilmente otros 300 años, aparece otro pensador que profundiza más en la misma pizza, creando un dictamen horneado con más calor de acuerdo al publico que entra al restaurante, lo que trae a entender que solo somos niños que jugamos a usar la mente para pensar cosas e ideas que llegan a conclusiones superficiales temporales y por ende imperfectas debido a nuestra condición de inestabilidad mental. Inestable, por no ser establemente y completamente conocedora de la Verdad, sino en parte. Quedaría más fácil mirar dentro de sí mismo y poder escuchar la voz interior del conocimiento universal que es completo y permanentemente eterno en el Ahora creacional... “La Verdad no puede ser entendida solo se puede sentir”.
Esto de escribir columnitas sobre temas diversos que tienen que ver sobre las ideas centrales de un entrevistado, a veces lo lleva a uno a tocar playas muy diferentes y desparejas la una de la otra, por eso mientras descanso de escribir, me voy a la cascada a escalar. Hasta ahora y casi a diario, ya tengo establecido tres rutas, aunque de bajada solo una y media (recuerdoles que se llega a la cascada es por la parte de arriba). Ayer subí con una mano ocupada porque me dio por llevar una roca del rio que me pareció singular, negra y con forma de cubo, con unos 3° de inclinación en sus lados.
Lo que me trae a la mente la formación del cuerpo eterno del Hijo del Hombre, como que para ello se tiene que liberar de lo existente visual del físico perceptible que se viene creando entre mutaciones continuas que transforman la parte dormida del sistema celular, irradiando una nueva forma en el núcleo del corazón de energía fotónica que se extiende dando paso a la nueva consciencia de ese nuevo Yo, que la veo es como saliendo del cristal del centro de mi corazón, con nuevas formas de Luz que se reflejan hacia fuera como un holograma reflexible. Por ejemplo, (ya me van a decir Uds., que qué tiene que ver este bla blá con la roca esa con cara de cubo y la cascada, pues les digo que no se, veamos a ver…), las manos de ese holograma que se desprenden de mi centro las puedo alargar para llegar a tocar el centro invisible de una roca. Esta energía de Luz, es pura, no artificial, ni tampoco confundirla con aquello que se disfraza de luz para engañar. Esta energía Luz de que hablo, tiene una constitución eterna, y está amparada por el corazón del Anciano de Días, que está levantando un Reino para esta humanidad, lo que hace que se sienta seguro al avanzar en esta Luz, y al poder tocar o penetra en el corazón de la naturaleza que esta alrededor de uno. Todo este aprendizaje es parte de un entrenamiento que le dan a uno para poder realizar la famosa entrevista solar.
Ayer entre el rio, venia una Mapana X a tomar agua desde los riscos altos, o a asoliarse. Su energía era diferente de la Mapana, sentí un grado de agresividad en su energía y de acelere en su mirar. Cruzo el agua y quería venirse por donde yo estaba observándola (son territoriales y altamente venenosas), lo que hizo tener que aclararle a la señorita serpiente en voz alta de quien es quien manda allí, se coloco al otro lado de la corriente y se dedico a asolearse. Vi en su mirar una determinación a hacer lo que quiere, lo que la hace altamente peligrosa en la Sierra Nevada. La Mapana X tiene dibujado a los lados de su cuerpo unos triángulos con las puntas hacia la parte superior de un café oscuro con bordes en beige, que al observarla desde arriba, los espacios vacios que dejan los triángulos al acercarsen, dan la forma de una “X” en su lomo, de ahí su nombre. Es curioso como la serena Mapana tiene dibujado en su parte superior unos cuadritos rectangulares y la X triángulos piramidales y las dos tienen los mismos colores entre cafés oscuros y más claros en las figuras... el pensamiento de los serranos, sin importar de qué color es el lomo del áspid, es de cernirlas a machetazos o estriparles la cabeza con una piedra grande, por venenosas y por su naturaleza agresiva -decía la doctora S.
Me gusta este símbolo como logo para la doctora S, refleja un sol de doce puntas triangulares, las puntas agrupadas en cuatro áreas de a tres cada una, donde cada conjunto de tres simboliza un grupo cardinal unidos por su triangulo oscuro con el otro grupo cardinal entre el puntico oscuro, dejando cuatro triángulos blancos entre ellos que representan los cuatro vientos de la tierra que tienen la casa en el centro de cada punto cardinal. El sol como símbolo de Luz y en su núcleo el Yin y el Yan de la armonía del individuo humano. La profesión mía en la Sierra, como ven, fuera de ser pintor y escribidor, se me ha diversificado, por cosas del destino y sin premeditarlas en absoluto, en: guía eco-turístico, diseñador grafico, cuidador de fincas, remojador de plantas, ayudante de trabajos varios, vendedor de tienda turística temporal, fotógrafo, arquitecto de represas, vendedor de propiedades de finca raíz, observador de aves, recolector de reciclables que dejan inconscientemente los turistas en su visita, compañero amigo de corazones tristes y desesperados, musicólogo, neutralizador de energías negativas, mesero de cafetería, ayudante de cocina, caminante y ajustador de la Luz.
Entre amigos, nada de negocios juntos o sociedades, eso hacedlo con gente conocida o desconocida para que cuando los egos revienten y se den en la madre, las energías vuestras no rompan una amistad, sino un negocio. Pero los negocios no es el tema de esta columna. Me vine a la selva hace un año y desde hace unos cinco meses comencé el experimento ese del que les hablaba. Como ya casi llego al final de sacar conclusiones de vivir en la selva, puedo asegurarles que me quedo gustando el experimentico este y creo que algunas de sus cosas las seguiré aplicando en mis vidas donde me encuentre. Lo de la selva, pues es como un bosque complejo con lianas de todo calibre que suben hasta arboles de más de 40 metros, algunos me impresionan bastante, entre ellos, al que le dicen Caracolí, y otro que creo le dicen Higuerón o no sé si es ese, que tiene abajo unas raíces como murallas de unos dos metros de alto, yo lo llamo “murallin”, pero no estoy para describir los bosques selváticos de la Sierra Nevada de Santa Marta y sus innumerables formas de hojas, sin hablar del tamaño agigantado de estas, de la cantidad de sonidos de las aves, las frutas que se dan, el caudal de más de 300 ríos, los animales, las rocas –porque a dos tres metros de profundidad esta Sierra es pura roca de origen ígneo-metamórfico de formación geológica separada de los Andes y con forma piramidal que llega hasta los 5775 mts., su base mide más o eme 120 km de lado, es la montañita litoral más tenaz del planeta en muchas cosas, como entre otras su capacidad acuífera, sus muchas especies endémicas, su estructura quebrada y fuerte, su variedad de climas que favorecen una tracamanada de especies y ecosistemas, y es habitada por indígenas de nombre genérico, los Tayronas:
Que son en realidad divididos en: Kogi (Kaggaba), Arsarios (Wiwas), Arhuacos (Wintukwas), Kankwamos (Atanqueros) y los Chimilas.
También la habitan los campesinos provenientes de los Santanderes, la Guajira, Tolima y Antioquia, y la nueva migración de extranjeros europeos y gente nueva del interior que llaman cachacos, a estos dos últimos grupos les dicen “los aparecidos”. Pero me salgo del tema… como decíamos la Sierra es pura roca volcánica por debajo, dicen los “mamos” que hay volcán que arde por dentro. Volcanes y más volcanes que volverán a danzar en explosiones de colores ardientes derramando el caldo del núcleo de la tierra. Yo vine fue a tomar impresiones de una selva.
El primer día, el bosque no me para bolas para nada, soy solo un bicho humano con olores repugnantes y mente violenta que está de paso, soy el símbolo de aquello que destruye todo, el exterminador de seres vivientes, todos los animales me evitan y miran mal, la vegetación me chuza, me pica, me enreda, y solo se deja ver por encima. Al tiempo, cuando me acoplo a un vaivén más o menos armonioso y penetro entre los sonidos y olores, porque hay que cambiar el deo y otros artificiales por barro y líquidos de las hojas. Al tiempo, el verde viene a ser mi colchón donde recostarme, dormir, alimentar la vista, sentir las vibras y comer sus frutas, además el verde se me bifurca en un innumerable bastión de diferentes verdes que me nutren. Los animales comienzan a sentir mi energía y ya no corren, solo se apartan para darme paso, los minerales no me golpean ni son bruscos a la palma de mi mano ni a mis pies descalzos, ahora son todos tiernos y sensibles. En un rio puedo mover rocas de 300 kilos con el ayuda del agua y el vaivén de la arena, la parte triste es que el bosque selvático, permanece en su totalidad distante, aunque los colibríes vengan a mí y me canten su fui-fui y se me acerquen a menos de 50 cms del rostro para saludar, o que las aves se bañen en los pozuelos de los ríos en frente mío por más de tres chapuzadas y una salida y otra entrada, o que las hormigas me escuchen cuando voy a desayunar y con ellas me tiro un banquete de harinas de pan y les comparto gotitas de agua que llevan húmedas a sus nidos en los arboles o dentro la tierra pa poder mantener esos cambuches de barro que hacen. No, la natura, ella, permanece distante… mi cuerpo desnudo brilla entre la selva como cuerpo extraño, soy diferente, no tengo cubierta que me proteja, no tengo piel extra de cobertura, soy frágil, expuesto, diferente, aun no listo, irradio otra onda muy separada, un mensaje que saben todos ellos que no puedo permanecer entre ella mucho tiempo, me dicen que debo seguir mis pasos nómadas, entre otros bosques, entre otras rocas, entre otros polvos, entre otras aguas. Aunque quisiera tejer un nicho para vivir colgado de los arboles gigantes… no, debo partir, debo seguir mi camino, la selva solo me deja estar completamente en éxtasis entre ella por dos o tres días, luego me expulsa así de fácil, me manda a la comunidad más cercana a intercambiar pensares con las gentes. Construyo represas para que se bañen los monos aulladores, porque donde la construyo no llega mucha gente, es decir casi nadie, menos los turistas, menos los pinche gringos. Allá donde las hago hay que escalar roca brava y abrirse camino en lugares donde no hay trocha, donde el agua aun huele a agua.
Me voy Sierra Nevada de Santa Marta, habite tu nichar, me dejastes ver tu nieve, tu alma: el corazón del planeta, tus escarpadas cúspides filosas, tus cañadas por donde cabalgan las nubes veloces hacia el mar, si, las nubes que te adornan. El verde de tu piel me lo dejastes untar en mi piel frágil, el barro de tus tierras rojizas y negras me lo refregastes con mis dedos entre los poros. Solté mi voz al aire que contienes y me rimabas con tus aves y animales y aun con el murmullo del rio, los truenos y relámpagos iluminaron las noches sin luna y tu candor me dejastes sentir cuando soltaba a mi Hijo de Hombre a divagar entre la idea de lo que realmente sos.
Para el dueño de la finca La Fortuna, mi más profunda gratitud por dejarme ir y venir y parchar entre ella, de poder expandir mis sentidos al vaivén de la armonía de su propiedad, Tagua arriba mi lugar mágico favorito, a Rufus el perro más inteligente de Minka, a Tomasa por recordarme a Pluto, a la mula por ser ella misma, a Tommi Lee el gato gigante medio tigrillo de la Tienda Café, a Fli que en paz descanse porque lo pico la Mapana dos veces y se lo llevo a la tumba, pero quedo reflejado en la pintura de Lizt donde aparece con su única novia: la Mayita; a la doctora S por sus conversaciones inteligentes a compartir, a todos los mincanos originales y a “los aparecidos” por su campecha forma de existir que balanceaba mi cordura, por las sonrisas, por dejarme de mirar como bicho raro, a K por el viaje Rakastan que compartimos juntos que fue como el sello de despedida de la Sierra, a Lizt por ser más que amiga como una hermana regañona, a Sandy que fue muy viajoso parlar con ella en esa noche de estrellas allá en el parque de los novios de Santa Marta sobre marcianos y todas esas cosas nuevas. Al maestro Manuel, el escultor de castillos de madera de mata-ratón por compartir grandes y profundos pensamientos sobre la vida y por estar conectado con migo a otra dimensión, a todos los amigos y amigas conocidos entre la locura de la Sierra que de verdad, el que viene acá, es porque tiene un tornillo suelto o la teja se le movió, o esta rayado del totazo.
Todos lo sabemos y hemos aprendido a respetarnos las salidas demenciales de los otros. Pero no más da acá, este articulo columnal ha llegado a su final, no hay nada más que decir ni sentir, estoy listo para salir y comenzar otro trip. Me llena un gran sentimiento de amor al despedirme de todos Uds., y es de esta forma, no podría hacerlo cara a cara, por aquello de evitar el roce de nuestros egos.
Y quien se puede quedar con todos mis cuadernos de apuntes que son como los diarios del valle de la locura, que le digo locura porque NO son escritos ordenados como los de Laura Restrepo sino un caos psicodélico de letras. Porque una cosa si es verdad, que nací untado de un apocalipsis tenebroso, que no se quiere pegar al olor del chocolate caliente, al recuerdo de la memoria cuando quiere enfrascarse en las pequeñas cosas que saben a seguridad en la infancia de mi evolución, no, nada se queda, todo se me hace alrededor para que pase veloz y ajeno y quede yo como espectador, como si la vida fuera solo una cinta que vine a ver en un teatro y que ya casi toca a su fin, me toca salir, presiento, a enfrentar otra realidad, la mía, la de la Verdad, la de adentro… chao!
Fin.