Las aplicaciones pueden ofrecer interacciones simples o complejas para resolver una misma funcionalidad.
Diseñar un modelo conceptual primero y diseñar la aplicación basado en él, es una excelente práctica para lograr las interfaces más simples para una funcionalidad dada, minimizando así el tiempo y la experiencia requerida para que el uso de la aplicación se vuelva automática.
K2B provee un modelo conceptual donde se modelan los elementos que se exponen al usuario final: objetos que el usuario va a manipular, sus relaciones, las acciones que puede hacer sobre esos objetos y cómo, el lenguaje, etc.
Uno de los elementos principales del modelo conceptual, es el modelo de objetos y acciones. En este modelo se enumera los diferentes objetos que componen la aplicación y se exponen a los usuarios finales, y para cada uno que acciones provee. Las acciones dependiendo de al tipo de objeto que aplican, tienen un patrón asociado.
Los elementos de este modelo son:
Clasificación semántica de los objetos
Objetos a exponer, para cada clasificación semántica
Acciones estándar que provee cada objeto según su clasificación semántica
Patrón asociado a cada acción, que incluye
Los patrones K2B estan construidos sobre los patrones que provee K2BTools, de forma de adecuarlos a la semántica de los objetos que K2B ERP maneja.
Pudes ver más sobre el proceso de diseño de nuevos objetos y acciones aquí
Cuando vas a diseñar una nueva funcionalidad, te recomendamos especificarla pensando qué acciones y sobre qué objetos es necesario accionar para implementarla.
Para guiarte en este análisis y lograr consistencia y una aplicación simple, en K2B contamos con el modelo objeto-acción que describe los objetos y las acciones existentes en K2B, sus estándar y patrones.
Mantener este modelo lo más pequeño posible, en cantidad de objetos y acciones, y que acciones similares, se resuelvan de simlares formas, es una de las claves para lograr una buena UX.