Ana Caro de Mallén

Ana Caro de Mallén fue una poeta y dramaturga española del Siglo de Oro, conocida en su momento como "la musa sevillana". Nació en 1590, y al principio se pensaba que su ciudad de nacimiento fue Sevilla, pero más tarde hubo investigaciones en las se descubrió que su bautismo fue en Granada, por lo que no está muy claro en que ciudad nació, lo que sí lo está, es que era andaluza.

Sus obras reflejan altos conocimientos mitológicos, clásicos e históricos, aunque se desconoce su formación, y además, presentaba un gran aprecio por ciertos autores contemporáneos, como Góngora. Fue una de las primeras mujeres que consiguió ser escritora como profesión y que esta fuese su medio de vida. En su momento gozó de fama y no únicamente entre otros escritores, sino que autoridades e instituciones le hacían encargos de obras.

Algunas de sus obras más importantes son:

-Valor, agravio y mujer

-El conde Partinuplés

-Peligro en mar y tierra

EL CONDE PARTINUPLÉS:

Comedia caballeresca publicada en 1653. Trata sobre las leyendas artúricas y carolingias.

(Emilio a Rosaura):

“Rosaura hermosa,

yo diré a lo que han venido;

perdonad y oye, Señora.

Ya sabéis la obligación

con que de estos reinos gozas,

y que por ella es preciso

tomar estado. No ignoras

tampoco que te ha pedido

tu imperio que te dispongas

a casarte, y te ha propuesto

el príncipe de Polonia,

el de Chipre y Transilvania,

Ingalaterra y Escocia.

Cásate, pues que no es justo

que dejes pasar la aurora

de tu edad tierna, aguardando

de que de tu sol se ponga.

Ésta es inolvidable ley,

y en tus años tan costosa,

que, a no de ejecutarla, dicen

que habías de ver tu corona

dividida en varios bandos,

y arriesgada tu persona.

Elige esposo, primero,

que la fe jurada rompa;

porque, de no hacerlo así,

tu majestad se disponga

a defenderse de un vulgo,

conspirado en causa propia.

Yo te aconsejo, yo, justo;

tú, emperatriz, mira ahora

si te importa el libre estado,

o si el casarte te importa.”

VALOR, AGRAVIO Y MUJER:

Comedia publicada durante el S.XVIII. Ironiza la sociedad en la que vive y ridiculiza algunos valores masculinos.

(Fragmento de la obra):

“¡Venganza, venganza, cielos! El mundo murmure, que ha de ver en mi valor, a pesar de las comunes opiniones, la más ilustre resolución que vio el orbe… Mi honor, en la altiva cumbre de los cielos he de ver, o hacer que se disculpen en mis locuras mis yerros, o que ellas mismas apuren con excesos cuánto pueden, con errores cuánto lucen valor, agravio y mujer si en un sujeto se incluyen.”