Cinco directrices clave se han desarrollado bajo los auspicios del Grupo Consultivo de Coordinación Civil-Militar Humanitaria (UN-CMCoord) y del Comité Permanente entre Organismos (IASC, por sus siglas en inglés). Estas directrices establecen los principios y conceptos para la coordinación civil-militar de Naciones Unidas (UN-CMCoord); cuándo y cómo pueden considerarse y emplearse los Activos Militares Extranjeros (FMA, por sus siglas en inglés) en apoyo a operaciones humanitarias, y cómo las agencias de la ONU y la comunidad humanitaria en general deben interactuar y coordinarse con fuerzas militares extranjeras y nacionales.
Las directrices no vinculantes son:
a) Directrices sobre el Uso de Activos Militares y de Defensa Civil Extranjeros en la Respuesta a Desastres,
b) Directrices sobre el Uso de Activos Militares y de Defensa Civil para Apoyar las Actividades Humanitarias de las Naciones Unidas en Emergencias Complejas,
c) Documento de Referencia del IASC sobre las Relaciones Civil-Militares en Emergencias Complejas,
d) Directrices No Vinculantes del IASC sobre el Uso de Escoltas Armadas para los Convoyes Humanitarios, y
e) Prácticas Recomendadas para una Coordinación Civil-Militar Humanitaria Eficaz de Activos Militares Extranjeros (FMA) en Desastres Naturales y Provocados por el Hombre.
Estas directrices no incluyen detalles sobre la interacción con otros actores armados, como policías fuertemente armados o grupos armados no estatales. Las Prácticas Recomendadas plantean preguntas críticas sobre la relación operativa con estos actores, especialmente en lo que respecta al elemento clave de intercambio de información de UN-CMCoord.