Zweig - Castalión contra Calvino

ZweigCastalionweb.pdf

Stefan Zweig, escritor y pacifista austriaco, famoso sobre todo por sus biografías, nació en Viena el 28 de noviembre de 1881, de una familia hebrea de ricos industriales.

Estudió filosofía en la Universidad de Viena, y terminados sus estudios, viajó a París en 1915, donde tuvo contacto con el simbolismo francés. Tradujo a Rimbaud, Verlaine, Baudelaire y al belga A. Verhaeren, con quien mantuvo estrecha amistad. Viajó luego por Inglaterra, España, Italia y otros países.

Al estallar la I Guerra Mundial, Zweig se hallaba en Bélgica. Fue movilizado por su país durante tres años, pero no estuvo nunca en los campos de batalla. Hizo su servicio en Viena, en un despacho de los archivos de la guerra. Ésta duraba todavía cuando obtuvo un permiso de dos meses, que él aprovechó para trasladarse a Suiza, donde junto con Romain Rolland y otros amigos de diferentes países beligerantes, fundó un grupo de escritores refugiados que defendieron, contra la guerra, la unidad espiritual de Europa.

Zweig se convirtió en un ardiente pacifista, y en 1917 hizo representar en Zurich una obra dramática en nueve cuadros, Jeremías, en la que denunciaba apasionadamente lo que él consideraba como la locura suprema de la guerra. Por su tendencia pacifista, la obra sólo podía ser representada en un país neutral.

Después de la guerra, Zweig se estableció en Salzburgo y escribió biografías, narraciones, novelas cortas y ensayos. Como escritor, Zweig se distinguió por su introspección psicológica. Entre sus obras destacan: Tres maestros (1920), estudios sobre Honoré de Balzac, Charles Dickens y Fedor Dostoievski, y La curación por el espíritu (1931), donde da cuenta de las ideas de Franz Anton Mesmer, Sigmund Freud y Mary Baker Eddy.

El ascenso del nazismo y el antisemitismo en Alemania llevó a Zweig, que era judío, a huir a Gran Bretaña en 1934. Luego emigró a los Estados Unidos de América en 1940, y a Brasil en 1941.

Los últimos escritos importantes de Zweig incluyen las biografías Erasmus de Rotterdam (1934) y María Estuardo (1935), la novela El juego real, publicada póstumamente en 1944, y su autobiografía El mundo de ayer (1941).

Stefan Zweig se quitó la vida en su casa de Petrópolis, Brasil, el 22 de febrero de 1942. En una carta, dejó escrito:

[…] después de los sesenta se requieren fuerzas especiales para empezar de nuevo. Y las mías están agotadas después de tantos años de andar sin patria. De esta manera, considero lo mejor concluir a tiempo y con integridad una vida cuya mayor alegría era el trabajo espiritual, y cuyo más preciado bien en esta tierra era la libertad­ personal.

Saludo a mis amigos. Ojalá puedan ver el amanecer después de esa larga noche. Yo, demasiado impaciente, me les adelanto.

El escritor André Maurois escribió sobre la muerte de Zweig: “Muchos hombres de buen corazón deberían reflexionar sobre la responsabilidad de todos nosotros y sobre la vergüenza existente en una civilización que ha creado un mundo donde Stefan Zweig no ha podido vivir”.