El Templo

Parroquia de Nuestra Señora de Guadalupe. Valladolid. España

El proyecto que esta comunidad parroquial acometió tuvo por objeto la construcción de un modesto, pero digno templo parroquial, recuperando un edificio industrial en desuso en la calle Villacarralón nº 12, frente a las antiguas instalaciones de la Parroquia.

Para la construcción de la Iglesia se desmontó la cubierta de la nave principal y su fachada, aprovechando el máximo de elementos ya existentes (estructura de pilares, cerramientos lateral y de fondo, solera, acometidas, desagües, etc...).

La forma exterior de la fachada copia en su contorno la forma del edificio industrial, de esta forma se pretendió preservar el recuerdo de lo que fue el edificio, pero se renovó por completo la fachada para que ofrezca una imagen clara de su nuevo uso, es decir, de Iglesia.

El porche de entrada crea un espacio que ensancha la estrechez de la calle y al estar situado frente a los jardines de entrada del Centro Parroquial, produce una prolongación visual de dicho espacio libre.

La fachada, como toda la obra, es muy sencilla, de bloques de hormigón blanco y carpintería en color para contrastar y alegrar el conjunto en el que predominan los tonos claros.

Como el presupuesto tuvo que ser lo más restrictivo posible, el interior se ajustó también a esa condición; por eso se proyectó un solo espacio de nave, con muros blancos de bloque de hormigón (alternando texturas lisas y rugosas), un suelo de placa de gres en dos colores, delimitando la zona de bancos y un falso techo de paneles de madera aglomerada y chapada en pino.

La iluminación recorre los laterales y fondo del altar, proyectándose sobre los muros para resaltar sus texturas y se complementa con puntos de luz en la zona central y en los muros de cierre del presbiterio, además de los preceptivos puntos de luz de emergencia en cada salida. La zona de altar se eleva dos peldaños y avanza centrado para quedar más integrado con los asistentes a la celebración de los diferentes actos litúrgicos.

En resumen, un proyecto sumamente sencillo, compuesto por un cuerpo principal de templo, con un atrio de acogida sobre el cual se construye una entreplanta con la función de coro (al que se accede desde el interior del templo). Un pequeño espacio detrás del muro que da fondo al presbiterio permite acceder a una pequeña sacristía situada en el fondo de la nave lateral que acoge también un pequeño ropero y un cuarto de caldera de calefacción.

La ventilación cruzada del templo se consigue a través de las ventanas tras el presbiterio y las hojas practicables situadas a ambos lados del porche de entrada.

El aislamiento térmico es doble, con una capa bajo la chapa de cubierta y otra sobre el falso techo. Todos los muros exteriores se construyen con cámara y aislamiento térmico y la entrada incorpora vidrio doble. Se proyectó una calefacción económica servida por una sencilla caldera de gas.

Las salidas de la Iglesia se realizan a través de la puerta de dos hojas del vestíbulo cortavientos, existiendo también otras dos puertas como salida de emergencia, una junto a la entrada principal y otra en la sacristía, conectando ambas con la nave de la izquierda que dispone de salida independiente al lateral del porche.

El resto de la nave izquierda se dejó como estaba con funciones de dependencias del Centro Parroquial. Existen en esta zona unos pequeños aseos, que vienen a sumarse a los del actual Centro parroquial, situado frente al templo.

D. José Delicado Baeza, Arzobispo de Valladolid, presidió la Celebración de la Dedicación de esta iglesia, cuyo titular es Nuestra Señora de Guadalupe, el día 11 de mayo de 1999.

Fue construida sobre una antigua nave industrial por la Comunidad Cristiana, con la colaboración de la Diócesis, de instituciones públicas y de particulares, bajo la dirección técnica de D. José María del Fraile Galán, D. Emilio Tejeda Alegre, D. Marcelino Hurtado Acebes y D. Antonio del Fraile Martinez.

Cuentas de Final de Obras