Ventosa de la Cuesta (74 km)
Esta ruta empieza en el sur de la ciudad de Valladolid y recorre varios pueblos de la comarca de Medina del Campo o de la denominación de origen Rueda.
Se sale de Valladolid por el carril bici de Puente Duero y se recorre éste hasta llegar a la cañada. Allí cruzamos la carretera CL-610 y nos dirigimos al pueblo-barrio. Cruzamos el Duero por el viejo puente y tomamos la carretera de Viana, la CL-600 o carretera de las maricas (una marica es una urraca). Esta carretera tiene dos tramos claros, al menos en nuestro recorrido. El primero empieza en Puente Duero y termina en la desviación a Viana, que está donde la vía del AVE cruza por encima de la carretera. En este tramo la carretera tiene arcén y no tiene cambios de rasante ni curvas muy cerradas; así que los conductores deberían vernos bien. No debería ser peligroso circular en bicicleta por este tramo. El segundo tramo es más comprometido porque no tiene arcén y sí alguna curva sin visibilidad. Pero es corto y sólo lo recorren los coches que van a Viana. En horas que no sean punta no debería ser peligroso.
La carretera nos lleva al paso a nivel sobre la vía del ferrocarril Madrid-Irún, pero no lo cruzaremos. En su lugar nos internaremos en la pequeña urbanización que está a la derecha de la carretera, enfrente del cementerio, y buscaremos el camino que nos llevará a Valdestillas. Ver mapa para no perderse. Este camino, a diferencia de otros paralelos, no tiene arena y la cantidad de grava es tolerable. Debería ser un camino cómodo, pero se ve que usan una motoniveladora para mantenerlo y el resultado es un piso con estrías perpediculares a la dirección que llevamos. Esto nos obligará a circular despacio para no salir despedidos de la bici. Un tramo del camino es paralelo a la vía.
Cuando lleguemos a Valdestillas atravesaremos este largo y estrecho pueblo. Buscamos la calle Olmedo porque da salida a un camino que lleva a Matapozuelos. Hay muchos caminos que podemos seguir. Más al oeste del que se ha marcado en el mapa hay uno construido hace pocos años. Es una carretera de grava gruesa y espesa que hace penoso el avance. También puede resultar peligroso si no se llevan rudas anchas. El camino señalada puede tener tráfico de vehículos no agrícolas, aunque debido a la grava suelen ir despacio. En caso de perder la ruta, la alta torre de la iglesia de Santa María Magdalena nos servirá de guía.
Desde Matapozuelos, el mejor camino es seguir la carretera. Podemos elegir entre dos opciones. En el mapa está marcada la más corta, pero la más larga nos ofrecerá un paisaje más interesante. También es más peligrosa porque se circula más tiempo por la VA-404, que es una carretera sin arcén y que pasa por dos cortos túneles. Una vez que estemos en Ventosa tenemos que llegar hasta la iglesia y echar una ojeada al paisaje que se ve desde allí. Junto a la iglesia hay una fuente.
Bajaremos de Ventosa por el camino marcado y pronto iniciaremos una ligera subida. Cuando lleguemos arriba atravesaremos un paramillo en el que hay un olivar. Son olivos pequeños con un sistema de riego por goteo y que parecen preparados para recoger sus frutos de manera mecanizada. Al poco empezaremos la bajada hacia La Seca. Los caminos en esta zona son buenos, aunque algunos tramos son los típicos de esta zona: grava y piedras incrustadas en el suelo que pueden hacer incómodo pedalear a más de 20 km/h.
Atravesaremos La Seca y tomaremos la carretera CL-610 en dirección a Serrada. Poco después de terminar la subida llegaremos a una curva en la que nace un camino por su lado externo. Atravesaremos con cuidado la carretera y seguiremos este camino. La razón de tomarlo es evitar la carretera que, aunque no es especialmente peligrosa para el ciclista, nos evitará circular con coches que van a más de 100 km/h a poca distancia de nosotros. El camino no es bueno por la grava y piedras y, además, hay que estar atentos para no equivocarse en alguna de las varias bifurcaciones que encontraremos.
Llegaremos a Serrada y pasaremos junto a la colección de espantapájaros artísticos que hay en este pueblo tan inquieto para estas cosas (no perderse el 1500 con un torero que esta o estaba enfrente de las piscinas, muy cerca de los espantapájaros). Atravesaremos el pueblo y, si nos sentimos sobrados de fuerzas, seguiremos el camino paralelo a la CL-610 por el lado derecho. Si no nos sentimos así iremos por el arcén de la carretera hasta Villanueva de Duero. Desde aquí llegamos a Puente Duero en un rato tanto más largo cuantas menos fuerzas nos queden y con otro pequeño esfuerzo llegaremos a Valladolid por el mismo carril bici por el que salimos.
En este recorrido hay que salvar un desnivel de 400 metros entre todas las cuestas que encontraremos.
