Lago de Sobrado dos Monxes

La Laguna de Sobrado dos Monxes, situada cerca del Monasterio de Sobrado, es un tesoro natural protegido por la Red Natura 2000. Este humedal destaca por su rica flora y diversa avifauna, rodeado de prados y bosques caducifolios que albergan una variedad de árboles como abedules, alisos, fresnos, robles y saúcos. En su superficie acuática, el nenúfar y la espiga de agua crean amplias masas flotantes en verano. Con una forma casi circular, la laguna cubre unas 10 hectáreas, con una profundidad máxima de 4,5 metros y una media de 1,5 metros.

El origen de esta maravilla natural se remonta al siglo XVI, cuando los monjes construyeron la laguna entre 1500 y 1530, represando los arroyos que alimentan las fuentes del río Tambre. Los monjes tenían múltiples propósitos al construir la laguna de Sobrado dos Monxes: utilizarla para el riego de los campos circundantes mediante sistemas de canales que también alimentaban los molinos que trabajaban para los abades. Además, se buscaba convertir la laguna en una piscifactoría de truchas para garantizar el sustento de los monjes y otros monasterios cercanos.

En 1992, la Sociedade Galega de Historia Natural (SGHN) firmó un acuerdo de custodia de la laguna con su titular, el Convento de Sobrado dos Monxes, por un período de 10 años, con el objetivo de realizar actividades de conservación, científicas y de divulgación ambiental, siendo el primero de su clase firmado en Galicia. Posteriormente compró dos fincas en la ribera de la laguna, como continuación de esta experiencia de custodia del territorio. En una de ellas instaló un observatorio ornitológico, y la otra fue reforestada con especies autóctonas. El proyecto incluía también un centro de interpretación, del que se llegó a elaborar el anteproyecto del edificio, pero no a construir.

En el 2010, el Convento cedió estas propiedades a la Fundación Fragas do Mandeo como parte de su dotación fundacional. Actualmente, pertenece a la Red Natura 2000, y en 2003 fue incluida en el inventario de humedales de Galicia realizado por la Consellería de Medio Ambiente. (El reglamento cinegético actual (temporada 2013-2014) prohíbe la caza en la laguna, está vedada a la pesca (temporada 2014) y en el Plan Hidrológico de Galicia-Costa se propone su designación como “zona húmeda de especial interés para su conservación”.)

Las últimas actuaciones de mantenimiento del observatorio consistieron en la poda de los sauces que crecen delante e impedían la observación, la reparación de la puerta (reposición de la manilla y la substitución de las bisagras), de la escalera (destrozada por los gamberros) y del tejado (una de las planchas metálicas se estaba cayendo). Por último, la colocación de paneles informativos (el de aves instalado en su día por la SGHN fue hecho añicos), la reforma de una ventana para poder mirar con telescopio y facilitar su uso por personas pequeñas, y la reparación de una parte del murete que cayó con las últimas lluvias.

Aprovechando las reformas se instaló un refugio para quirópteros en el techo. Dentro de él hay espacio diseñado tanto para los murciélagos cavernícolas (los que descansan colgados del techo) como para los murciélagos frutícolas (los que se retiran en las grietas). Acompañando a este refugio hay dos cajas nido para aves. Debajo del observatorio se depositó un montón de leña para servir de cobijo a anfibios y pequeños mamíferos. Por último, se aprovechó la reparación del murete para crear pequeños refugios en su interior. El ecosistema del Lago de Sobrado dos Monxes se revela como un tesoro de biodiversidad, destacando elegantes especies como el ánade real y el somormujo lavanco.

En este enclave esencial para la observación ornitológica, la interacción armoniosa entre la flora y fauna crea un equilibrio que añade un valor significativo a este rincón natural.