“En realidad experimento el sentimiento dramático de la poesía en el sentido de que me abre una rendija, una expectativa posible de instalar una fe en lo desconocido. Por eso siento que la poesía no concluye en ella misma, es decir, limitada al ámbito estético, sino que se proyecta a la región de lo secreto librando la batalla de tener razón contra la muerte y el sinsentido”
Entrevista con Ivonne Bordelois
Textos
Nuestros días mortales [1958]
[ Uvas rosadas ]
Contemporáneo del mundo [1962]
Las condiciones de la época [1967]
[ Epitafio ]
Señales de una causa personal [1977]
[ Diagnóstico ]
[ Evaciones ]
[ Paro cardíaco ]
[ Poética ]
[ Por alguna razón ]
[ Tema poético ]
Principios de incertidumbre [1980]
Violín obligado [1984]
Cabeza final [1991]
Apuestas en los oscuro [2000]
¿Hay alguien ahí? [2005]
Un arte callado [2008]
Cosas mortales (Antología Poética) [2022]
[ La taza azul ]
[ El puesto del gato en el cosmos ]
[ Fábula ]
[ Paisaje urbano ]
[ Instrucciones para ayudar a un ciego a cruzar la calle ]
[ El galgo ]
[ Susurro personal ]
***
«Una escritura de la incertidumbre y asimismo siempre volcada al mundo, nunca ensimismada. Como un planeta que logramos detectar solo cuando hemos descubierto lo que orbita a su alrededor: agotada o disponible, la poética de Giannuzzi es un cuerpo celeste con una irrefrenable fuerza gravitatoria»
Julia Enríquez
***
«La poesía de Giannuzzi no pregona ni vende liberación alguna. Tampoco golpes de efecto resueltos en un remate final. Al lector no se le ahorran los disgustos: el humor es sombrío; la fe en el destino de la humanidad, mínima; la conciencia de la continua degradación de la vida, implacable. Las notas líricas son breves y no tienen por objeto ofrecer una vaporosa sensación de belleza. Su escritura apela, más bien, a una extrema claridad, a una lucidez descarnada que nada tiene que ver con devaneos retóricos alrededor de los “temas graves y prestigiosos”. Todo parte de los datos que ofrece la realidad más inmediata. Estos, generalmente, se extrapolan y concluyen en una reflexión que forzosamente se torna metafísica, sin que por ello deje de tener los pies en la tierra»
Jorge Fondebrider
***
«Joaquín Giannuzzi impuso, hace ya mucho, un acento nuevo en la poesía argentina. Es obra suya, magistralmente suya, esa grata conjunción entre intimidad y pensamiento; ese aliento de todos sus poemas en que lo familiar y lo cercano se quebrantan para dejar florecer la palabra que se abisma en lo extraño, en lo imponderable de toda presencia, en la emoción y en el enigma de saberse vivo.»
Santiago Kovadloff