Jacobo Fijman -  El “Otro”

Tarde de invierno.

Se desperezan mis angustias

como los gatos;

se despiertan, se acuestan;

abren sus dedos turbios

y grises;

abren sus dedos finos

de humedad y silencios detallados.


¡Bien dormía mi ser como los niños

y encendieron sus velas los absurdos!


Ahora el Otro está despierto;

se pasea a lo largo de mi gris corredor,

y suspira en mis agujeros,

y toca mis paredes viejas

un sucio desaliento frío.


¡La esperanza juega a las cartas

con los absurdos!

Terminan la partida

tirándose pantuflas.

Es muy larga la noche del corazón.