Cada 8 de septiembre tiene lugar la celebración del festejo que honra a la Virgen de Os Remedios. En Las ataduras, Alina recuerda la primera vez que había ido a Ourense con su padre un domingo de verano: «Cerca del río estaba la ermita de los Remedios, y un poco más abajo, a la orilla, el campo de la feria con sus tenderetes que parecían esqueletos de madera».
Desde el Puente Romano, símbolo de la ciudad, se ofrece su visión del paisaje que desde él puede contemplarse: «Luego, al volver, desde el puente, casi de noche, se veían lejos los montes y los pueblos escalonados en un anfiteatro, anchos, azules, y, en primer término, las casas de Orense con sus ventanas abiertas, algunas ya con luces, otras cerradas, inflamados aún los cristales por un último resplandor de sol».
Cada 8 de setembro celébrase a festa que honra á Virxe dos Remedios. En Las ataduras, Alina lembra a primeira vez que fora a Ourense co seu pai un domingo de verán: «Cerca del río estaba la ermita de los Remedios, y un poco más abajo, a la orilla, el campo de la feria con sus tenderetes que parecían esqueletos de madera»,
Dende a Ponte Romoana, símbolo da cidade, ofrécese a súa visión da paisaxe que dende este pode contemplarse: «Luego, al volver, desde el puente, casi de noche, se veían lejos los montes y los pueblos escalonados en un anfiteatro, anchos, azules, y, en primer término, las casas de Orense con sus ventanas abiertas, algunas ya con luces, otras cerradas, inflamados aún los cristales por un último resplandor de sol».