CBP Formación/Retiro Espiritual Información
El Sábado Santo todos nos unimos al silencio de la Iglesia. Sabemos que Nuestro Señor conquistó el pecado ayer Viernes Santo con su sufrimiento y muerte en la cruz. ¡Sabemos que mañana vencerá a la muerte con su resurrección en el Domingo de Pascua! Pero hoy estamos esperando tranquilamente.
Esperamos con nuestra madre, María y los Apóstoles. No estaban seguros de lo que iba a pasar después de la muerte de Jesús, ¡pero nosotros lo sabemos! Sabemos que resucitará al tercer día, en la mañana de Pascua.
En nuestra espera, podemos mostrar nuestra gratitud por el maravilloso regalo que Dios nos ha dado, nuestra salvación, al encontrar formas de servir a nuestros seres queridos. Podemos ayudar en la preparación de la fiesta de Pascua que celebraremos mañana, ayudando con la preparación de la comida o con la limpieza de la casa para prepararnos para el día especial. Podemos ofrecernos para hacer las tareas del hogar o cuidar a los hermanos menores, para que nuestros padres y abuelos puedan completar sus tareas para la fiesta de mañana. ¡Podemos ofrecer silenciosamente nuestras obras, nuestros momentos felices y nuestras molestias a Dios como agradecimiento por las muchas bendiciones que nos ha dado!