Establecer metas y seguimiento con coaching

La imposibilidad de asistir al curso “Establecimiento de metas y seguimiento con coaching” en la Ciudad de México y mi abrupto regreso de Campeche se conjugaron para —finalmente— ir al curso como observador.

En esta capacitación de alto profesionalismo trabajamos en un “mapa de sueños”. Es un ejercicio que consiste en realizar un “collage” con imágenes que expresan las metas o proyectos que cada participante desea realizar.

Mi mapa era muy claro: contenía fotos de Europa que expresaban, por un lado, mi deseo de hacer un doctorado a España y, por el otro, llevar a mis hijos para conocer países del Viejo Continente.

Otra de las dinámicas del curso consistía en que los participantes le pidan a sus familiares una carta para darles una retroalimentación con sus cualidades y aspectos a mejorar.

¡Era una magnífica oportunidad para que mis hijos y su mamá me dijeran algo!, así que los contacté para pedirles sus escritos, pero no recibí nada. Me hubiera gustado saber porqué mis hijos se habían alejado.

Todos los participantes recibieron una nota de sus familiares queridos, menos yo. Un profundo dolor estremeció mi corazón. ¡Qué pesar tan grande es el sentirse excluido, olvidado, no querido! Especialmente cuando se ha sido un buen padre y esposo.

Para compensar el terrible momento, la conductora del curso me escribió una carta, que todavía conservo, dicéndome:

Quisiera agradecerte por compartir estos momentos con nosotros, por ser parte de este curso y de compartir tus experiencias y conocimientos.

Quiero que sepas que te admiro mucho porque siempre estás aprendiendo y preparándote para ser mejor persona, para ayudar a la gente y para realmente aportar al cambio y al desarrollo de las personas, lo cual no es una tarea fácil, pero tu trayectoria ha sido un legado muy importante.

Eres un ejemplo a seguir, te deseo muchos éxitos y que todas esas metas que tienes planeadas, estoy segura de que muy pronto se harán realidad, ya sea si decides continuar con tu camino en la ciudad o aprovechar la beca en España para continuar tu preparación.

Sé que seguiremos en contacto, y muy pronto tendremos buenas noticias para compartir en nuestros proyectos.

Con cariño y admiración,

AG

Me conmovió hasta las lágrimas y ¡no era para menos! Por lo menos una persona en este mundo me había dedicado unas palabras de atención y afecto.

A partir de ahí se empezó a gestar un cambio importante en mi vida que después identificaría como “recibir señales”. Este punto de quiebre fue precisamente el que me condujo a vivir una experiencia inolvidable en Londres, Inglaterra. Por supuesto que en ese momento no sospechaba de lo que me sucedería en el futuro.

También he creado el grupo “Sembradores y constructores del Puente” en Facebook, para que puedas comentar tus impresiones de los diferentes episodios de mi Anecdotario que iré publicando.

La idea es que al comentar con otros, se genere una riqueza de puntos de vista que puedan darte luz acerca de tus propias experiencias de vida.

Te invito a participar, aquí el enlace: