Actualmente me encuentro experimentando y creando en el mundo 3D.
En esta sección podrás encontrar información sobre el modelado 3d y especialmente sobre la impresión en 3 dimensiones.
Para mayor información visita el Instagram alice_design_uv
¡Gracias por seguir mi contenido!
Actualmente estoy trabajando con una Creality Ender 3, una poderosa herramienta que permite materializar todos los diseños en la tercera dimensión digital.
Entre las posibilidades materiales que permite la impresora se encuentran en PLA y el ABS, dos polímeros termoplásticos muy versátiles.
Es una máquina de alta precisión y calidad de impresión, por lo que es muy importante respetar los procesos y ritmos para obtener el producto deseado impreso por un filamento termoplástico de 1,75mm.
El volumen de impresión máximo de una sola pieza que permite la impresora Ender 3 es de 220 x 220 x 250 mm, sin embargo, es posible escalar figuras de mayor tamaño e imprimirlas por parte, por lo que las posibilidades son casi infinitas.
Personalmente prefiero y sugiero utilizar el filamento PLA o ácido poliláctico, un poliéster polímero sintético con origen de materias primas naturales del almidón de maíz, raíces de tapioca o caña de azúcar, glucosa extraída de las plantas y convertida en dextrosa mediante la adición de enzimas naturales o sintéticas.
Su origen orgánico y fabricación a base de recursos renovables lo categorizan como un material eco-amigable con posibilidades de reciclaje, degradación e incluso compostaje a diferencia de sus contrapartes fabricadas con base en el petróleo.
Además de biodegradable requiere poca energía para su manipulación en impresión, es seguro y las mínimas micropartículas que emite durante la impresión no emiten vapores tóxicos.
El ABS o Acrilonitrilo butadieno estireno es un material con grandes aplicaciones en la industria automotriz debido a su practicidad y resistencia. Es un termoplástico amorfo con aplicaciones industriales y domésticas, sin embargo, a pesar de que su origen material deriva del petróleo requiere de una temperatura mayor a 210 grados Celcius para derretirse tanto para su impresión como para el reciclaje.
Si bien, es un material seguro en su estado sólido, la impresión al punto de fusión provoca la emisión de un vapor tóxico que contiene nanopartículas UFP, las cuales con una dimensión de 0,1 micras son invisibles al ojo humano y al respirar pueden ingresar a los pulmones e infiltrarse en los tejidos e incluso en las células, por lo que la sangre se contaminaría por microplásticos, un tipo de contaminación pasiva pero muy riesgosa y con posibilidades carcirógenas igual o incluso mayor que un cigarrillo.
Todas las características mencionadas se suman a las complicaciones de uso y las dificultades tanto técnicas como de biodegradación y reciclaje que conlleva una impresión con filamento ABS al contrario del PLA que ofrece características muchísimo más atractivas y seguras tanto en impresión como para el usuario final.
La calidad es un factor muy importante para mis productos, por lo que prefiero quedarme con la calidad del fabricante y utilizo el mejor filamento de marca Creality.
Además de la impresión óptima el filamento PLA posee una amplia gama de colores, entre ellos se encuentran los más comunes como amarillo, azul, rojo, naranja, morado, verde, blanco y gris. Entre los colores menos comunes el café, turquesa, calipso, fucsia, los grises, colores flúor, pasteles e incluso filamentos arcoíris, que poseen dos o más tonos en el mismo rollo.
Existen además filamentos que imitan la madera y de seda brillante para una calidad profesional. Una línea especial de colores cobre, plateado y dorado, y unos poco comunes e incluso casi imposible de encontrar que brillan en la oscuridad y filamento transparente o cristalino.
En la versatilidad del PLA se encuentra la capacidad de ser cortado, moldeado, perforado, lijado, pulido, pintado y más.
De esta forma las piezas pueden adquirir acabados con calidad profesional.