El Frankenstein de Mary Shelley ha pervivido en la imaginación popular durante doscientos años. Iniciado como un relato de fantasmas por una autora intelectualmente y socialmente precoz de dieciocho años, la dramática historia de Victor Frankenstein y su extraña criatura puede leerse como la parábola definitiva de la arrogancia científica. Esta edición de Frankenstein acompaña la versión original de 1818 del manuscrito –meticulosamente revisada y corregida línea por línea por Charles E. Robinson, una de las autoridades más destacadas del mundo en el texto– con anotaciones y breves ensayos de estudiosos de primera fila que exploran los aspectos científicos, sociales y éticos de este maravilloso relato.
CUENTOS DE LA SELVA HORACIO QUIROGA
Casi todos los personajes de estos cuentos son animales silvestres que se relacionan con el ser humano, lo que manifiesta continuamente la dicotomía entre la naturaleza y el hombre. Debido a las moralejas implícitas y a la personificación de animales, tienen un estilo similar a las fábulas.
LEJOS DEL CORAZÓN LORENZO SILVA
El nuevo caso de Bevilacqua y Chamorro los lleva hasta el Estrecho. Un crimen que tiene como telón de fondo el submundo del narcotráfico y el dinero negro. Un joven de veinticinco años, con antecedentes por delitos informáticos, desaparece en la zona del Campo de Gibraltar. Hay testigos que aseguran haber visto cómo un grupo de hombres lo abordaban en plena calle y lo metían a la fuerza en un coche. Poco después de su desaparición, se reclama por él un abultado rescate en efectivo, que los suyos abonan sin rechistar. Desde entonces, no se vuelve a saber de él, lo que hace pensar que han acabado con su vida. Tres días después de la desaparición, el subteniente Bevilacqua y la sargento Chamorro reciben el encargo de tratar de esclarecer lo ocurrido. Viajan para ello al Estrecho, donde se encuentran con un microcosmos en el que las leyes son relativas, el dinero negro corre a raudales y su blanqueo es una necesidad cotidiana. Un lugar lejos del corazón de todo donde nada es de nadie y todo puede tomarse, donde nadie mira y nadie ve, y donde, en fin, cualquier cosa es posible.
MAUS ART SPIEGELMAN
La novela gráfica Maus, Art Spiegelman emplea a gatos y ratones para contar la historia de su padre judío durante la persecución nazi de la Segunda Guerra Mundial. Un relato en el que se cruza el horror, el amor y la pérdida, al tiempo que permite al artista reflexionar sobre lo que significa contar una historia verdadera disfrazada de fábula. Y es el libro más reciente MetaMaus, el que nos ayuda a comprender por qué Maus fue la primera novela gráfica en recibir el premio Pulitzer en 1992.
Art Spiegelman (1948) no se dejó llevar por la fantasía propuesta más arriba al recoger la relación entre gatos y ratones como metáfora de la relación entre víctimas y victimarios. En su relato autobiográfico, este autor estadounidense nos presenta las vivencias de su padre en una historia en que ratones y gatos antropomorfos le sirven para representar uno de los episodios más crueles del siglo XX: la persecución nazi a los judíos y el Holocausto.