Somos intemperantes. Eso se puede concluir de todo lo siguiente: Si tener la voluntad llena de buenas intenciones fuera suficiente para que fuéramos virtuosos, entonces, si todos los seres humanos tuvieran buenas intenciones, todos los seres humanos serían buenos. Todos los seres humanos tienen buenas intenciones, pero no todos los seres humanos son buenos. O somos virtuosos, o somos intemperantes.
Indicaciones: 1) Hay que distinguir entre "tener la voluntad llena de buenas intenciones" y "todos los seres humanos tienen buenas intenciones. 2) Cuando se establece una relación de "condición suficiente" entre dos ideas, se está estableciendo una relación de implicación lógica. 3) La demostración del argumento requiere la aplicación de la regla de definición de la implicación.