Los metales poseen propiedades características, físicas, mecánicas, químicas, y tecnológicas.
Propiedades Físicas
Las propiedades físicas están vinculadas a las características estructurales de los materiales, dependen del tipo de aleación.
Calor específico: Es la cantidad de calor necesaria para elevar en 1°C la temperatura de 1 kg de determinada sustancia. El calor específico varía con la temperatura. En la práctica se considera el calor específico medio en un intervalo de temperaturas.
Punto de fusión. Es la temperatura a la cual un material pasa del estado sólido al líquido, esta transformación que se produce con absorción de calor. El punto de solidificación es la temperatura a la cual un líquido pasa al estado sólido, durante la transformación hay cesión de calor. Casi siempre coinciden los puntos de fusión y de solidificación. El punto de fusión de los metales varia entre los -39º C del mercurio y los 3.410º C del volframio.
Color: Propiedad que caracteriza a los materiales y permite, en muchos casos, su rápido reconocimiento. La mayoría de los metales son de color grisáceo, pero algunos presentan colores distintos; el bismuto es rosáceo, el cobre rojizo y el oro amarillo. En otros metales aparece más de un color, y este fenómeno se denomina pleocroísmo.
Densidad: Es la relación entre la masa y el volumen. El iridio, con una densidad de 22,4 es el más denso de los metales. Por el contrario, el litio es el menos denso, con una densidad relativa de 0,53.
Conductividad eléctrica: Capacidad de los materiales de permitir el paso de la corriente eléctrica. Conductancia, a una temperatura determinada, entre las caras opuestas de un cubo (del material) cuyos lados tienen la unidad de longitud. Su inversa es la resistividad, (los metales y sus aleaciones son buenos conductores de la electricidad). La más baja conductividad eléctrica la tiene el bismuto, y la más alta a temperatura ordinaria la plata. La conductividad en los metales se puede reducir mediante aleaciones.
Conductividad térmica: Capacidad de los materiales para transmitir el calor (los metales y sus aleaciones son buenos conductores del calor). En otras palabras es también la capacidad de una sustancia de transferir el movimiento cinético de sus moléculas a sus propias moléculas adyacentes o a otras substancias con las que está en contacto. La inversa de la conductividad térmica es la resistividad térmica, que es la capacidad de los materiales para oponerse al paso del calor.
Dilatación: se llama así al cambio de longitud, volumen o alguna otra dimensión métrica que sufre un cuerpo físico debido al cambio de temperatura que se provoca en ella por cualquier medio. Todos los metales se expanden con el calor y se contraen al enfriarse. Ciertas aleaciones, como las de platino e iridio, tienen un coeficiente de dilatación extremadamente bajo.
Cristalización de los metales. La particularidad fundamental de la constitución de los metales es la distribución perfectamente organizada de sus átomos, característica de todos los cuerpos cristalinos. La estructura cristalina es la causa a la cual deben los metales una serie de sus propiedades. En un metal siempre se puede destacar un conjunto mínimo de átomos (cristal elemental), cuya distribución en el espacio es semejante y se repite reiteradas veces. El enlace de tales conjuntos de átomos forma la red cristalina o cristal, constituida por cristales elementales.
La mayoría de los metales tienen cristales elementales como: cúbico espacial centrado (figura A), cúbico centrado en las caras(figura B) y hexagonal compacto (figura C).
Los metales mas densos, que contienen la máxima cantidad de átomos en un mismo volumen, esto es, tienen distancias ínter-atómicas menores, son los que tienen cristales elementales cúbicos centrados en las caras y hexagonales compactos.
Red espacial cúbica centrada: Hierro (por debajo de 910 oC), Cromo, Volframio, Molibdeno, Tantalio, Niobio
Red cúbica centrada en las caras: Hierro (por encima de 910 oC),Cobre, Níquel
Red hexagonal compacta: Cinc, Magnesio, Otros
Propiedades Químicas
Resistencia a la corrosión y/o degradación: resistencia a la acción corrosiva o degradante de los agentes atmosféricos y químicos ( por ejemplo: la oxidación, la degradación de los colores, etc.)
La corrosión de los metales puede originarse por reacciones químicas con los agentes corrosivos