En la mayoría de los casos, las máquinas, herramientas, útiles y mecanismos están compuestos por varias piezas unidas entre sí para cumplir su función.
Existen dos tipos de uniones de materiales.
Uniones permanentes:
1.1 Soldaduras
1.2 Adhesivos
2. Uniones no permanentes:
2.1 Mediante sujetadores mecánicos
1. Uniones permanentes:
Se realizan con piezas cuyo desmontaje no se prevé durante la vida útil de la máquina o estructura o, en otros casos, por seguridad o exigencia del diseño. Para la separación de las piezas necesitamos romper el elemento de unión o, en muchos casos, deteriorar alguna de las piezas. Destacan el roblonado, el remache tubular, los diferentes tipos de soldaduras y los adhesivos.
1.1 Soldaduras: es un proceso de unión de materiales en la cual se funden las superficies de contacto de dos o más partes mediante la aplicación conveniente de calor o presión. Las ventajas que nos proporcionan las soldaduras son: Unión permanente, más fuerte que los materiales originales, es más económica y no se limita solamente al ambiente de fábricas, sino que también puede utilizarse en el campo.
1.2 Adhesivos: es un proceso en el cual se usa un material ajeno a los materiales que se desea unir para la fijación de ambas superficies.
Tipos de Adhesivos:
- Adhesivos naturales son materiales derivados de fuentes como plantas y animales, e incluyen las gomas, el almidón, la dextrina, el flúor de soya y el colágeno. Este tipo de adhesivos se limita aplicaciones de bajo tensión.
- Adhesivos inorgánicos se basan principalmente en el silicio de sodio y el oxicloruro de magnesio, aunque el costo de estos es relativamente bajo, su resistencia es similar a los naturales.
- Adhesivos sintéticos constituyen la categoría más importante en la manufactura; incluyen diversos polímeros termoplásticos y duroplásticos.
1.3 Remaches y roblones
Un remache es una pequeña varilla cilíndrica con una cabeza en un extremo, que sirve para unir varias chapas o piezas de forma permanente, al deformar el extremo opuesto al de la cabeza por medio de presión o golpe, obteniendo en él otra cabeza. A este proceso se le llama remachado o roblonado.
El remachado puede realizarse a mano o mediante una remachadora, que puede ser manual o mecánica.
Los remaches y roblones se fabrican de metal, de acero de bajo contenido en carbono, o de materiales más dúctiles como el aluminio.