Donna Strickland

Las herramientas de la fotónica, que permiten manipular la luz con precisión exquisita y han abierto la vía a nuevas aplicaciones industriales y médicas, han sido reconocidas con el premio Nobel de Física de 2018. La Academia de Ciencias Sueca ha concedido el galardón al estadounidense Arthur Ashkin, el francés Gérard Mourou y la canadiense Donna Strickland, que se convierte en la primera mujer en ganar el Nobel de Física desde 1963.

Los premiados reciben el galardón por “invenciones revolucionarias en el campo de la física de los láseres”, según el veredicto de la Academia de Ciencias Sueca anunciado hoy.

Arthur Ashkin, de los Laboratorios Bell con sede en Holmdel (Nueva Jersey, EE.UU.), recibirá la mitad del premio por la invención de “las pinzas ópticas y su aplicación a los sistemas biológicos”. Este avance permite manipular objetos extremadamente pequeños como células y virus, e incluso átomos y partículas, con pinzas hechas de luz láser.

Donna Strickland, de la Universidad de Waterloo (Canadá), y Gérard Mourou, de la Escuela Politécnica de Palaiseau junto a París (Francia) y de la Universidad de Michigan en Ann Arbor (EE.UU.), recibirán la otra mitad. Trabajandi juntos, inventaron un “método para generar pulsos ópticos ultracortos de alta intensidad”. Aquella investigación fue el trabajo de dotorado de Strickland -y su primera publicación científica-, que fue dirigido por Mourou.