En esta página esperamos describir algunos aspectos de la vida cotidiana en el colegio.
El silbato
Un objeto muy presente en el colegio era el silbato, que marcaba los compases del día y sus distintos tiempos. El silbato hacía comenzar la jornada, cuando se hacía sonar desde la ventana de la fachada principal
También anunciaba los cambio de clase, el comienzo y final del recreo, la hora de salida. ¡Cuánto nos hubiera gustado poder tocarlo al menos una vez!
Los últimos años, el silbato fue sustituido por música que se ponía para avisar de la entrada y salida. Se recuerda con cariño por ejemplo la música de "devuélveme a mi chica".
El candado de la entrada
Un objeto de gran importancia cotidiana pero que pasaría casi desapercibido es el candado de la reja/puerta de entrada.
Todas las mañanas se abría ritualmente, dando comienzo a la jornada. Éstas comenzaban especialmente animadas los días en que algún truhán había metido trozos de palillo para que no entrara la llave; el mundo esperaba en vilo mientras Beni/Don Benigno o algún otro se las apañara para despejar la cerradura y terminar abriendo.
Para evitar problemas, se sustituyó por un candado de apertura magnética, similar al de arriba.
La subida al "palomar"
A partir de la cesión del antiguo parvulario de Arritokieta al colegio (ver "historia moderna"), las clases de 5º y 6º de EGB se daban en ese edificio, que se dio en llamar "el palomar". Los profes solían recoger a sus clases en la entrada principal para subir todos juntos por los innumerables tramos de escaleras, una verdadera metáfora del ascenso hacia las cimas de la sabiduría (al parecer hubo también cursos que subían solos, y es que la juventud no cesaba de pujar).
El recreo
Gran parte de los recuerdos del recreo están descritos en la página de los patios.
Mención espeical merece el final del recreo, que era un espectáculo digno de recuerdo. Las diferentes clases formábamos en fila, en un orden predeterminado y encabezados por nuestro/a tutor/a, e íbamos entrando por turnos de menores a mayores y a ritmo de silbato.
Las notas
Un momento especial, que llegaba periódica y fatídicamente, era la entrega de notas en cada evaluación. Ésta es una foto de un boletín del curso 1976/77 (enviada por Manuel Tena)
Y más...
Iremos añadiendo otros aspectos del día a día del colegio.