El 11 de Junio, de nuevo, los alumnos de Educación Emocional, han realizado un taller sobre emociones con los alumnos de 4º E.P. del CEIP Gabriela Mistral de Solana de los Barros.
Para poder realizar este taller, hemos estado preparando en clase la dinámica y actividades a realizar, partiendo de los objetivos que queríamos conseguir con estos alumnos del colegio.
Así, cada alumno de la asignatura ha hecho una o varias propuestas de actividades para realizar con los niños, habiendo revisado antes la temática más adecuada acorde al momento evolutivo de los alumnos de 4º de Primaria.
Las propuestas fueron múltipes y variadas, pero finalmente los alumnos votaron de forma mayoritaria la propuesta de Samuel G., que proponía trabajar vocabulario, expresión emocional e identificación de emociones a través de unas "coronas de emociones". Samuel se inspiró en material que encontró en internet del famoso libro "El monstruo de colores".
Y....¡ nos pusimos a trabajar!
En clase, elaboramos "las coronas" con cartulina blanca. En primer lugar los propios alumnos de Educación emocional hicieron sus propias coronas, dibujando en ellas caritas con las emociones que determinamos previamente. Después, elaboramos coronas "blancas" en las que únicamente constaba el nombre de la emoción cuya expresión facial tendrían que dibujar los alumnos del cole.
En el cole, a nuestra llegada, nos presentamos y explicamos a los niños las cosas que se aprenden en nuestra asignatura.
Después, organizamos la clase en grupos y repartimos las coronas blancas para que los niños dibujasen caritas con la expresión facial correspondiente a la emoción que aparecía escrita en su corona.
Los niños fueron muy creativos y dibujaron caritas muy acertadas, ilustrando la vergüenza con coloretes muy rojos, el asco con una boca con vómito, la ira enseñando los dientes, etc. Los alumnos de Educación Emocional estuvieron apoyando a los niños, comentándoles expresiones faciales comunes de las emociones representadas.
Una vez elaboradas todas las coronas, las recogimos y las pusimos a los niños en la cabeza, sin que supieran de qué corona y emoción se trataba y.... comenzaron a jugar.
Los niños tenían que averiguar la emoción de su corona a través de las pistas que sus compañeros les daban: los compañeros ponían una expresión facial propia de la emoción de su corona: tristeza, alegría, asco, ira, vergüenza, miedo, etc.
La actividad ha resultado muy divertida y provechosa. ¡Esperamos volver el próximo curso!
Responsable de la actividad: Guadalupe Lucas Honorato