ARTE O BASURA (Carlos Lastarria)
La galería Casaplan se ha caracterizado por mantener un muy buen programa de exposiciones. Especialmente en el campo del grabado donde tanto con expresiones tradicionales como con proyectos innovadores da cuenta de la evolución y cambios de esa antigua técnica gráfica. Lo mismo en pintura, collages y fotografías. Sin duda un espacio de primer nivel en la región, consolidado y con proyección.
Sin embargo en la actualidad exhibe en el subterráneo un exposición denominada "Basuraleza muerta (viva)" y que consiste en unas instalaciones en que su autor el mexicano Rolando Hernández, seguramente avecindado en Valparaíso ha empleado restos de elementos y desechos de basura, muy comunes en Valparaíso, para pretender hacer arte. Lo que se consigue con este tipo de exposiciones es simplemente verificar la falta de creatividad de su autor.
En Valparaíso hay montones de basura por todas parte y sin por ello esos restos puedan ser consideradas instalaciones de arte, por muy bien amontonado que estén los basurales y con la correspondiente transformación fruto de la descomposición. Qué finalidad tiene entonces lo que vemos todos los días llevarlo a una galería de arte. No por estar en ese sitio cambia su naturaleza. Siguen siendo desperdicios por más que tengan textos explicativos.
Podría pensarse que es una tomadura de pelo, pero ni siquiera es algo así. Tampoco una crítica. Nada que valga la pena. Hace bastante que pasó el tiempo de las instalaciones, se ha vuelto a los buenos oficios. Pretender hacer arte con la basura termina por seguir siendo basura y aun más ensuciar el panorama artístico. No constituye un aporte al arte, sino que solo una gran falta de creatividad y sobre todo de calidad, lo que no se condice con la categoría de la Casaplan.
Publicado en el Diario La Estrella de Valparaíso el 10 de Julio de 2018
http://www.estrellavalpo.cl/impresa/2017/07/10/full/cuerpo-principal/24/
Basuraleza Muerta (Viva), fue una exhibición de proceso que se enfocó en la visibilización de producción de desechos en Valparaíso. Consistió en un performance de 1 mes y medio de duración en donde todos los días se recogían desechos inorgánicos de las calles de la ciudad. El proceso de recolección, pero también de vida en la ciudad, fue registrado a través de distintos medios : Fotografías, Un Diario, Muestra de las Rutas Tomadas, Dibujos, obras que reflejaban parte de la investigación como instalaciones, o proyectos de documentación como la implementación de botes de basura para analizar cual era su uso.
A su vez, se realizaron una serie de actividades en colaboración con ONGs como Reciclo Valpo, El Colihue, Organizaciones de rescates de Parques y Basurales Clandestinos, quienes estan trabajando con temas de reciclaje y permacultura en la ciudad como talleres de permacultura, proyecciones de documentales en colaboración con 12na y Cristobal Sánchez, así como conversatorios para hacer que se conocieran las distintas iniciativas que trabajan estos temas en la ciudad.
Más que un proceso de creación relacionado al arte sonoro, fue un proyecto de escucha y resonancia de un tema social que atañe a las ciudades de hoy.
Basuraleza Muerta (Viva) fue ganador de la primer residencia latinoamericana otorgada por Tsonami Arte Sonoro/ Casaplan.
La crítica fue escrita en la segunda semana de exhibición del proceso sin ningúna idea por parte del crítico que la exhibición estaba en montaje.