FORMULARIO SOBRE ALGUNAS CUESTIONES PARA REFLEXIONAR SOBRE EL MESTIZAJE
En este apartado partimos de un formulario con el que planteamos algunas cuestiones para pensar sobre el mestizaje. Llegado a este punto, le animamos a que participe en nuestro formulario y contraste sus respuestas con nuestros comentarios. Además, le mostramos los resultados de nuestra encuesta y pueda así situarse entre un gran abanico de respuestas. Nuestro objetivo no es medir sus conocimientos, simplemente hemos escogido algunas ideas que creemos que pueden ser de interés con el fin de reflexionar sobre el tema que aquí nos ocupa.
Pulse abajo, y ¡participe!
Cuestión nº 1. El fenómeno del mestizaje que se inicia en el siglo XVI puede verse como un proceso doble: de mestizaje biológico y de sincretismo cultural. Con todas sus diferencias regionales, el mestizaje en América supone la mezcla de poblaciones indias, ibéricas y africanas; pese a que tiene lugar un proceso de europeización, teniendo en cuenta la heterogeneidad cultural indígena, encontraremos variaciones según se adaptaron las formas europeas en cada lugar y dependiendo de la estructura socio-cultural de los pueblos que experimentaron este proceso (Esteva Fabregat, 2013: 201-203). Dicho esto, quizás podríamos hablar de un sincretismo biocultural.
Cuestión nº 2. Las palabras utilizadas para hacer referencia a este proceso son «mestizo» e incluso «mulato», que llegó a ser sinónimo del anterior concepto. La palabra mestizo aparece en las fuentes para Nueva España desde mediados del siglo XVI. En dicha centuria la proporción se inclinaba hacia la población india, pero su descenso demográfico para la primera mitad del siglo XVII favorece desde el punto de vista demográfico la relación europeos-africanos (Cramaussel Vallet, 2016: 159).
En el inicio los grupos que tomaron contacto y entre los que pudo darse este mestizaje fueron los indios y españoles; progresivamente a lo largo del tiempo, se fueron incorporando los afrodescendientes, dando lugar a una sociedad con gran variedad de fenotipos. Buen ejemplo de esto último es la pintura de castas: aquí recomiendo que lean nuestro comentario sobre estas obras que reflejan el resultado de este proceso.
Cuestión nº 3. La presencia asiática fue posible gracias al galeón de Manila, que llegaba por el puerto de Acapulco. De esta forma, se estima que en el siglo XVI un buen contingente de población asiática llegó a México. El comercio de esclavos orientales fue prohibido en 1597; si a esto le sumamos las dificultades de la ruta del Pacífico, su presencia acabo siendo prácticamente nula (Céspedes del Castillo, 2021: 187).
Cuestión nº 4. Para abordar esta cuestión, primero aclaramos que las tres calidades principales son indio, negro y español, y cada una corresponde a un estatus jurídico específico. En primer lugar, podríamos llegar a la conclusión de que se identificarían con facilidad según sus padres, ergo según la mezcla. Carmen Bernand y Serge Grusinzki han hablado en su Historia del Nuevo Mundo de la «segregación imposible», haciendo referencia a cómo los mestizos se fueron moviendo por esta sociedad, contraviniendo esta idea de las calidades (Bernand y Grusinzki. 1999: 230-258). En nuestro caso, Nueva España, sabemos que algunos individuos llegaban a cambiar varias veces de calidad a lo largo de su vida e incluso se da el caso en el que no se le asigna la misma calidad en toda la documentación en la que aparecen. Se han propuesto varias hipótesis, hablando de familias pluriétnicas o de calidades que eran negociadas. Todo parece indicar dos cosas: por una parte, las familias pluriétnicas serían la norma entre el grueso de la población, la endogamia sería algo propio de las elites; por otro lado, las calidades se convertirían en un lugar dentro de una estructura económica y social, más que de un sistema racial (Cramaussel Vallet, 2016: 164-170).
Sobre la cuestión 5 y 7. Los indios, por lo general, pasaban a ser mestizos en el momento en que adoptaban la cultura hispánica; los factores culturales y, en especial, la lengua, tendrían una gran importancia (Esteva Fabregat, 2013: 207). Sería más importante que se convirtieran al cristianismo y que se comportaran como buenos cristianos, es decir, que se asemejaran culturalmente a los españoles (López Sarrelangue, 1973: 5-13).