El logro de los objetivos propuestos y la corroboración o rechazo se las hipótesis planteadas exige el diseño de un flujo de trabajo específico. En este sentido, el esquema metodológico propuesto se compone de 4 grandes bloques primarios que constan de un total de 8 fases, a los que se añade un bloque transversal que ocupa la fase 9.
De forma muy sintética, el bloque 1 aborda el marco teórico; el bloque 2, se centra en a recopilación y análisis de datos; mientras tanto, el bloque 3 aboga por un análisis integrado, facilitado por la utilización de análisis geoestadísticos, a la vez que el bloque 4 se centra en las aplicaciones, en concreto, en el diseño de productos. Por último, se ha incluido un bloque transversal que abarcará la difusión de los resultados principales que se obtengan de cada fase.
Como se observa, se apuesta por una secuencia lógica que parte de la aclaración conceptual, pasando por la obtención y análisis de datos, hasta concluir con la propuesta de productos turísticos específicos.
A nivel técnico e instrumental se recurre a la utilización de encuestas, necesarias para tener ese conocimiento cercano sobre la oferta y la demanda turística, centrada en los turistas rurales en su más amplio espectro y de cuya información podremos extraer la acogida que puedan tener los nuevos productos agroturísticos y agroecoturísticos que se planteen. Al mismo tiempo, permitirán conocer la disponibilidad de la oferta de alojamientos rurales para participar en dichos productos, e incluso recopilando opiniones sobre la voluntad de agricultores y ganaderos para implantar productos de este tipo en sus explotaciones. Además de la obtención de información, se requiere un tratamiento específico de datos, para lo que se propone la utilización de estadísticas univariantes y multivariantes, conducentes a la obtención de perfiles de oferta o de demanda, al propio tiempo que se aprovechará su integración en un Sistema de Información Geográfica para explorar técnicas geoestadísticas complejas, ya sea para obtener clústeres espaciales, ya sea para optar por la inferencia y la predicción, como será el caso del uso de la regresión espacialmente ponderada. Esta técnica ofrece, como cualquier tipo de regresión, la posibilidad de construir modelos y hacer predicciones, aunque va un paso más allá al considerar el territorio y la proximidad espacial como una variable explicativa más. Queda patente con ello que se recurrirá al SIG como un pilar fundamental para la realización de este proyecto, uniendo toda su capacidad analítica.
El diseño metodológico desarrollado implica la necesidad de recurrir a una serie de instrumentos y técnicas específicos, entre los que se encuentran:
1) Realización de encuestas/entrevistas: Resulta evidente que la única forma de disponer de información relativa a la actividad agroturística pasa por la realización de encuestas y entrevistas en profundidad. Las primeras dirigidas a la demanda y a los empresarios, vinculados de forma directa o indirecta con la actividad agroturística. Las segundas se orientan a los principales stakeholders para lo que se seleccionará un panel de expertos que permita extraer unas conclusiones orientadas a la mejora en la precisión del diagnóstico de la situación.
2) Delphi: Tal vez, la forma más efectiva de analizar las entrevistas en profundidad al panel de expertos que seleccionemos sea la aplicación del método Delphi, cuyo cometido principal es la obtención de un consenso frente a una temática o problemática común. Ofrece numerosas ventajas, como la flexibilidad a la hora de captar opiniones diversas, el consenso que se alcance tendrá elevada fiabilidad, permite involucrar a expertos que interactúan con otros de tal forma que se involucran en la resolución del problema, evita caer en el protagonismo y puede ser enormemente objetivo.
3) Análisis estadístico: La utilización de técnicas estadísticas, tanto descriptivas como analíticas, resulta necesaria para extraer los resultados que proporcionan las encuestas dirigidas a la oferta y a la demanda. Entre las que se pretenden utilizar se pueden mencionar desde las sencillas distribuciones de frecuencia o tablas de contingencia hasta otras más complejas como regresiones de diferente tipo o análisis de componentes principales.
4) Proceso de análisis jerárquico: Es una metodología multicriterio desarrollada a finales de la década de los 70 por Saaty aunque con plena vigencia en la actualidad, como lo refleja múltiple literatura especializada. Se basa en una combinación de la percepción humana, así como en el interés y la experiencia para priorizar opciones en situaciones confusas. Es decir, facilita la toma de decisiones en un mundo complejo, donde no todas las opciones tienen las mismas probabilidades de éxito.
5) Geoestadística: Este conjunto de herramientas configura una línea de investigación específica de varios miembros del grupo de investigación, y tiene como principal fundamento el complemento territorial a los análisis meramente cuantitativos, algo de notable interés para el turismo debido a que la conceptualización de la distancia es crucial. En este sentido cabe remarcar que no es necesario tener un recurso turístico, puede ser suficiente atractivo si se encuentra en las proximidades.
6) Sistemas de Información Geográfica: Se trata de una herramienta transversal, que se adapta al análisis de los recursos, a su gestión, pero también al diseño de itinerarios, a la realización de cálculos de estadística espacial, etc.