Río de las Avenidas, memoria viva de Pachuca.
Proyecto en torno a la recuperación de la memoria de este cuerpo de agua que atraviesa la ciudad, y la construcción de su historia, para compartirla con los habitantes de Pachuca. El proyecto se ha desplegado en varios formatos:
Traer al río. Pieza documental
Traer al río. Práctica de rastreo
¿Qué del río soy? Episodio #9 Podcast Crónicas al borde
¿Qué sueña el río? Archivo: imágenes, postales, audios, textos
Si el río suena. Imágenes intervenidas
Fanzine. Postales al río
Postales al río. Archivo+Paisaje
Traer al río. Práctica de rastreo
¿Qué del río soy? Crónicas al borde. Podcast
T R A E R A L R Í O
P r á c t i c a d e r a s t r e o
Francisco Arrieta
Río de las Avenidas
Coordenadas: 19°59´3”N 98°47´09”O
Pachuca. Una ciudad construida sobre montañas de plata.
Un río que derrama constantemente sus aguas sobre ella.
Cerros.
Vientos.
Cañadas.
El glifo de la ciudad de Pachuca describe un cerro cortado por un río.
Cañada. Tres cañadas: Tulipán, Rosario y Texinca.
¿Cómo traer a un río a estas páginas?
Invocarlo
Evocarlo
Escribir su nombre: río…río de las avenidas.
El río nace en la sierra de Pachuca. Nace en tres cañadas.
Tres nacimientos.
Un río que en un tiempo fue caudaloso
y que en diferentes tiempos ha inundado la ciudad.
Río que en un tiempo estuvo vivo.
Ahora un río intermitente, fantasmal, contaminado.
Del río nace la ciudad. Somos hijxs de un río que desconocemos, que borramos, que entubamos.
Me pregunto ¿Qué paisajes miraron nuestrxs ancestrxs?
¿Cuándo se acabó el río?
¿Cuándo se volvió un fantasma?
¿Qué minas se lo tragaron?
"Después de las acendradas de los mineros, lavatorios y beneficios de metales se sangra al río por tan diversas partes que queda su cauce casi sin gota de agua" dice fray Baltasar de Medina en su Crónica de la Santa Provincia de San Diego de México, publicada en 1682.
Un río que se sangra.
¿Por dónde comenzar?
¿Cómo invocarlo?
¿Cómo traer al río?
En 1949, el 24 de junio, por la tarde el río vuelve a reclamar su paso, su derecho a transitar, desbordado, por donde siempre, SIEMPRE lo ha había hecho. Pachuca se estremece, como ya lo había hecho en las inundaciones de 1785, 1867, 1880, 1884, 1889, 1930. Dicen que fueron aproximadamente 100 personas las que murieron ese día de San Juan.
Un año después, once jóvenes fueron enviados a la Ciudad de México para entrenarse como bomberos. En 1951, el presidente Miguel Alemán puso en servicio el edificio del Heróico Cuerpo de Bomberos, con los once jóvenes, ahora entrenados para ser bomberos, entre ellos mi abuelo: Othon Moreno.
El río convirtió a mi abuelo en bombero, práctica que nunca dejaría, hasta su muerte en febrero del 95, el día de la bandera. Othon no solamente cuidaba a la ciudad del fuego, también del río, de su desborde, de sus avenidas, que se traduce en memoria. La memoria del agua. Othon cuidaba a la ciudad de la memoria del río y de su agua.
¿Qué son las avenidas de un río y cómo nos relacionamos con estos acontecimientos?
¿Esperamos las avenidas?
¿Sabemos cuándo vienen?
¿Nos alegra o nos da miedo?
Las avenidas son las crecidas, las riadas, aguas altas.
El aumento del agua en el caudal del río a tal proporción que el lecho resulta insuficiente para contenerlo y se desborda.
Durante la temporada de lluvias, las avenidas, las crecidas, son un evento tan natural que nos parece sobrenatural y por lo tanto capaz de ser controlado y sometido. Controlan las avenidas de un río para que éstas no destruyan la ciudad que se ha construido al lado de él.
Avenidas. Río de las avenidas.
Atraviesas la ciudad de norte a sur. En el norte y sus tres cañadas.
Qué memorias de la ciudad se encausan hacia el presente en esas cañadas.
La mina San Buenaventura, la cascada, los compadres, colonia La Nueva Estrella, el antiguo camino real y la calle Humboldt, la mina de San Juan, en la cañada de Tulipán.
En la cañada de Rosario, el acueducto franciscano, la mina, el barrio La Camelia, la mina, el cerro de la Magdalena, la mina.
Cañada de Texinca y su acueducto de una arcada,
donde se hacían las romerías en las noches de San Juan,
los 24 de junio.
Las dos cañadas se unen y dejan escurrir sus aguas en el antiguo barrio de La Españita. Ahí se encuentran las aguas y se acompañan para entrar a la ciudad, que ha decidido que solo puede atravesar dentro de un canal cubierto o por un tubo gigante. Las aguas de las cañadas Rosario y Texinca se encuentran con las aguas de la cañada de Tulipán.
Ahora nace ahí el río de las avenidas, desde mediados del siglo pasado, nace debajo del asfalto, sin luz ni oxígeno, bajo el sonido estremecedor de los autos que pasan por las "vías rápidas".
Atraviesa la ciudad arrastrando sus secretos.
¿Qué secreta la ciudad?
¿Qué secretos entubados corren debajo de esta ciudad?
Extractivismo
Saqueo
Despojo
Maltrato
Olvido
El río atraviesa la ciudad entre latas,
vidrios,
bolsas de plástico,
animales muertos,
desperdicios de comida,
grafitis,
mierda
y orines
de todas las personas que habitamos Pachuca.
¿Qué paisaje miraron nuestros ancestros?
¿Qué paisaje miramos nosotrxs?
El río de las avenidas cuenta con la existencia de un elevado grado de contaminación, ya que se encuentra conectado con los canales generados con descargas de tipo industrial y aguas negras de los asentamientos ubicados en los márgenes del río. Aguas residuales de origen doméstico, también conocidas como aguas servidas, fecales o cloacales.
Este es el paisaje que vivimos ahora.
Me pregunto, ¿junto a qué queremos vivir?, ¿A qué ciudad tenemos derecho?, ¿Podemos pensar en un lugar donde la ciudadanía pueda compartir derechos junto a otros seres vivos no humanos?
¿Podemos pensar que los bosques, los ríos, son una inteligencia no humana que nos puede dar pistas sobre cómo seguir habitando esta ciudad?
¿Qué somos capaces de cuidar y sostener?
Escuchar al río.
Recordar que hay un ser vivo ahí abajo, atravesando el territorio del que fue despojado.
Traer al río. Honrar su presencia, su vida. Dejar de maltratarlo con el olvido.
El río sale a la superficie, muchas veces en forma de vapores tóxicos, para continuar su recorrido hacia el sur, hacia los campos de cultivo de La Noria, El Llano, Palma Gorda, La Higa, Tellez.
Un río contaminado que se nos regresa en forma de alimentos, puesto que el agua se usa para el riego de estos campos de cultivo.
¿Qué paisajes heredamos?
¿Qué preguntas surgen al rastrear a un río?
¿Qué sensación me deja el seguirlo?
Traer al río es contar su historia, hablar de él.
Acto de justicia poética y ética.
Recordarlo
Invocarlo
Evocarlo
Nombrarlo
Desentubar su memoria
¿Qué de mi hay en el río?
¿Qué del río hay en mi?
Me importa el río. Sanar los vínculos. Reconciliarnos con este cuerpo de agua. Reconocer al río como un ancestro.
Rastrear.
Hacer memoria.
Recordar… r e c o r d a r , volver a pasar por el c o r a z ó n al río.