El sacramento del Matrimonio es la unión de un hombre y una mujer para toda la vida.
El Matrimonio queda establecido por la alianza conyugal o consentimiento irrevocable de los cónyuges, con el que uno y otro se entregan y se reciben mutua y libremente.
Por su propia naturaleza la institución matrimonial y el amor conyugal se ordenan a la procreación y educación de la prole.
La preparación del matrimonio se realiza en la parroquia de los novios, es decir, a la que pertenecen por su domicilio. (la parroquia puede ser indistintamente de el o de ella).
Se confecciona el expediente matrimonial en una sola parroquia, a no ser que el domicilio de alguno de los novios sea de otra diócesis, en este caso han de confeccionarse por separado.
Los novios deben dirigirse al despacho parroquial al menos tres meses antes de la celebración de la boda.
Durante el proceso de preparación de la boda, el tiempo debe ser de aprendizaje y crecimiento en su amor mutuo y en la práctica de su fe católica. Por lo tanto, recomendamos encarecidamente a nuestras parejas que asistan juntos y fielmente a la misa dominical regularmente.
Además, frecuentar el Sacramento de la Reconciliación o la Confesión con la mayor frecuencia posible, pero en particular unos días antes de la ceremonia de la boda. La recepción fiel de estos sacramentos profundizará su vida espiritual y mejorará la calidad de la liturgia de la celebración del sacramento.
Los novios han de solicitar la apertura del expediente matrimonial, por lo menos tres meses antes de la celebración del matriomonio.
En el despacho parroquial (martes y jueves de 18:00 a 20:00 h) se les informará de todos los requisitos necesarios.
Partida de Bautismo de los dos contrayentes.
Partida de nacimiento.
Curso prematrimonial.
Para la celebración de la boda en la parroquia, los novios han de reservar dia y hora de acuerdo con las posibilidades de la parroquia.
Los detalles de adornos florares, música y ensayo, se concretará en el despacho parroquial en los días anteriores a la ceremonia.