¡Por fin llegamos al estudio de los sonidos! Como hemos visto, los usuarios de una lengua somos capaces de interpretar enunciados lingüísticos, es decir, de asociar distintos contenidos mentales (conceptos o significados) a diferentes expresiones. En el caso de las lenguas de modalidad visual-gestual, las expresiones están constituidas por movimientos de las manos y el cuerpo, así como por gestos de la cara; en el caso de las lenguas de modalidad oral-auditiva, las expresiones están constituidas por sonidos. Las expresiones de las lenguas de modalidad oral-auditiva, sean simples (morfemas) o complejas (palabras y frases), están formadas por secuencias de fonemas cuya exteriorización o manifestación como enunciados se realiza a través de continuos sonoros. De esta manera, pues, la función del sonido en el lenguaje es ser la materia de la expresión de los signos lingüísticos.
Ahora bien, el sonido, como fenómeno de percepción, presenta cuatro propiedades: timbre, tonalidad, sonoridad y duración. El timbre de un sonido es su calidad, lo que lo distingue de otros tipos de sonidos. Por ejemplo, la diferencia entre el sonido característico de un violín y el de una flauta es de timbre; también es el timbre lo que nos permite distinguir un maullido de un mugido o la voz de una persona de la de otra. En el caso del lenguaje, los sonidos del nivel segmental o segmentos se distinguen por su timbre: el sonido [a] tiene un timbre distinto del sonido [i] y el sonido [f] tiene un timbre distinto del sonido [m]. Por su parte, la tonalidad es la diferencia de los sonidos por su agudeza o gravedad. Por ejemplo, dos notas distintas de un piano se diferencian por su tonalidad, pues una será más aguda que la otra (y esta más grave que aquella). Cuando cantamos también producimos notas más graves o más agudas y cuando hablamos podemos subir o bajar la tonalidad a lo largo del enunciado modificando la longitud y grosor de las cuerdas vocales. Por ejemplo, cuando preguntamos ¿Ya leíste el material de Fonética?, la tonalidad se eleva al inicio, luego va descendiendo y, finalmente, se eleva mucho. En cambio, cuando afirmamos Ya leí el material de Fonética, la tonalidad se eleva al inicio y va descendiendo hasta el final del enunciado.
Por otro lado, la sonoridad es la característica de los sonidos por la cual pueden ser más fuertes o más débiles; es lo que ordinariamente llamamos “volumen”. Las turbinas de los aviones producen un sonido fuerte, mientras que el movimiento de las alas de un colibrí, uno débil. Cuán fuerte o débil percibamos un sonido depende también de la distancia a la que nos encontremos de la fuente sonora. Al hablar podemos producir sonidos más fuertes o débiles graduando la fuerza con la que expulsamos el aire: podemos gritar o hablar “bajito”. También usamos diferencias de sonoridad para distinguir una palabra de otra; por ejemplo, la diferencia entre las palabras cártel y cartel o carne y carné, se debe a que pronunciamos sus sílabas con diferente sonoridad (además de otras propiedades que conforman el acento). Finalmente, los sonidos pueden tener mayor o menor duración: pueden durar más o menos tiempo, es decir, pueden ser más largos o más breves. En castellano, podemos dar mayor expresividad a lo que decimos alargando algunos sonidos: si queremos enfatizar la dimensión de un objeto podemos decir, por ejemplo, que es larguííííííísimo o que es grandaaaaaazo. En otras lenguas, la diferencia de duración de los segmentos puede diferenciar palabras, como podemos comprobar en los ejemplos del italiano y el finés que aparecen más abajo.
● Pronuncia en voz alta las vocales del castellano /i, e, a, o, u/. ¿Qué gestos articulatorios determinan el cambio de timbre de las vocales?
● Pronuncia en voz alta las siguientes consonantes del castellano: /m, n/. ¿Qué gestos articulatorios determinan el cambio de timbre de estas consonantes?
● Pronuncia en voz alta las siguientes consonantes del castellano /k, x/ (la última es el fonema que representamos con la letra <j>. ¿Qué gestos articulatorios determinan el cambio de timbre de estas consonantes?
● Pronuncia en voz alta las oraciones ¿Ya llegó Susana? y Ya llegó Susana. Ahora pronuncia la secuencia ta-ta-ta-ta-ta-ta con los mismos cambios de tonalidad de ambas oraciones.
● Pronuncia la oración ¡Cuidado con eso!, primero en voz baja (no susurrando), luego como si estuvieras conversando y, finalmente, gritando. ¿Qué parte de tu cuerpo controlas para modular la sonoridad (volumen) con la que pronuncias?
● Pronuncia la palabra lindo con una duración que te resulte normal. Ahora pronúnciala alargando el fonema /i/: liiiiiiiindo. Luego pronúnciala alargando el fonema /o/: lindoooooooo. Y luego el fonema /n/: linnnnnnnndo. ¿Qué hacemos con el aparato fonador para pronunciar un sonido breve y uno largo?
Las lenguas del mundo, como sistemas semióticos o de codificación de información, utilizan las cuatro propiedades del sonido para construir las diferentes expresiones de sus signos. A continuación aparecen algunos ejemplos de palabras que se diferencian unas de otras solo por una propiedad o rasgo sonoro. Los pares de expresiones que se diferencian solo por una propiedad se conocen como "pares mínimos".
pasa – tasa – casa
cama – cana – caña
rima – rema – rama – Roma – ruma
Los primeros tres ejemplos se diferencian entre sí por la consonante que aparece al inicio de la palabra: /p, t, k/. Esta diferencia está determinada por el lugar de la boca en que se articulan las consonantes. De manera análoga, los tres ejemplos siguientes, se distinguen por la consonante que aparece al medio de la palabra, /m, n, ɲ/, las cuales también se diferencian por el lugar de la boca en el que se articulan. Los últimos ejemplos se distinguen entre sí por su primera vocal: /i, e, a, o, u/. Las vocales presentan un timbre diferente según la posición de la lengua y la configuración de los labios con que se articulan.
les [le] ‘la/os’ – le [lø] ‘el’
lot [lo] ‘premio’ – long [lõ] ‘largo’
La diferencia de timbre que caracteriza al primer par mínimo del francés depende de la configuración de los labios al articular las vocales: en el caso de [le], los labios están estirados y, en el caso de [lø], los labios están redondeados. En cambio, la diferencia de timbre del segundo par mínimo radica en que, al articular [lo], la voz solo resuena en la cavidad oral, mientras que al articular [lõ], la voz resuena tanto en la cavidad oral como en la cavidad nasal. A continuación puedes escuchar estos cuatro sonidos. Estas grabaciones y las que aparecen en esta secciones han sido tomadas de Ladefoged (2005).
Estos cuatro morfemas del chino mandarín coinciden en los segmentos que los conforman, a saber, [ma], y se distinguen por la tonalidad que los acompaña durante su articulación. En el primer caso, la tonalidad se mantiene alta de principio a fin de la pronunciación del morfema. En el segundo caso, la tonalidad pasa de ser media, al inicio, a ser alta, al final. En el tercer morfema, la tonalidad inicia media, luego desciende y finalmente asciende. Por último, el cuarto morfema, presenta una tonalidad descendente: al inicio es alta y al final es baja. A continuación puedes escuchar estos cuatro morfemas del chino mandarín:
El primer par mínimo se diferencia porque la primera palabra presenta la antepenúltima sílaba acentuada, mientras que la segunda palabra presenta la penúltima sílaba acentuada. En el segundo par mínimo, la primera palabra presenta la penúltima sílaba acentuada y la segunda palabra presenta la última sílaba acentuada. El acento de una sílaba se consigue expulsando el aire con mayor fuerza, lo que trae cómo consecuencia que la sílaba acentuada tenga mayor sonoridad (además de mayor tonalidad y duración).
survey ‘encuesta’ – survey ‘encuestar’
Estas dos palabras del inglés, se diferencian por que la primera lleva el acento en la penúltima sílaba y la segunda lo lleva en la última. En esta lengua, las sílabas no acentuadas, además de presentar menor sonoridad que las sílabas acentuadas, son más breves y presentan un timbre ligeramente diferente. Mediante el siguiente enlace, puedes acceder a la página web del Diccionario Cambridge, específicamente, a la página correspondiente a las palabras survey ‘encuesta’ y survey ‘encuestar’. Haz clic en el ícono que permite reproducir las palabras y escucha con atención lo que las diferencia.
https://dictionary.cambridge.org/dictionary/english/survey
Este par de palabras se diferencia solamente por la diferencia de duración de la consonante que aparece al medio de la palabra. Mientras que, en la primera palabra, el sonido [n] es breve (representado ortográficamente por una sola letra <n>), en la segunda, el sonido [nː] es largo (representado ortográficamente por dos letras <nn>).
tulen ‘yo vengo’ – tuulen ‘de viento’ – tuullen ‘yo soplaría’ – tuulleen ‘del soplado’
tuleen ‘al fuego’ – tuuleen ‘al viento’ – tullen ‘yo vendría’ – tulleen ‘del venido’
Estos ocho ejemplos conforman pares mínimos que muestran que, en finés, la diferencia de duración de las vocales y la diferencia de duración de las consonantes permite construir palabras distintas. Como en el caso del italiano, los segmentos breves están representados ortográficamente por una sola letra y los segmentos largos, por dos.
Hemos visto en esta sección que las lenguas orales-auditivas utilizan las diferentes propiedades de los sonidos —timbre, tonalidad, sonoridad y duración— para construir la expresión de sus signos. Por lo tanto, los sonidos del habla que utilizamos para comunicarnos pueden presentar estas cuatro propiedades. Como veremos en la siguiente sección, la fonética es la ciencia que estudia los sonidos del habla: como se producen, cuáles son sus propiedades físicas y cómo se perciben.