PRIMER VIERNES DE MAYO
El Primer Viernes de Mayo es, sin duda, la fiesta que mejor transmite el fervor de un pueblo. Dice la leyenda que en el año 758 un ejército musulmán intentó conquistar Jaca. Los jacetanos dirigidos por el conde Aznar Galíndez lucharon desesperadamente por evitar la derrota. Cuando estaban a punto de claudicar, las mujeres de Jaca decidieron salir en ayuda de sus maridos armadas con utensilios de cocina.
Al verlas llegar en el horizonte los invasores pensaron que eran ejércitos de refuerzo y huyeron despavoridos.Desde entonces, todos los primeros viernes de mayo se celebra la fiesta que conmemora esta hazaña, en la que a lo largo de los siglos se han mezclado datos rigurosos con otros de origen legendario. Es una fiesta corta pero intensa, cargada de colorido
y emoción.
Comienza a primera hora de la mañana cerca del cementerio de Jaca, en el Llano de la Victoria donde dice la leyenda que se celebró la batalla y posteriormente se levantó la ermita del mismo nombre (de la Victoria). Los jacetanos dan cuenta de un suculento almuerzo a base de migas, costillas y embutidos.