Una ciudad concebida y diseñada para los peatones, los ciclistas y los usuarios de vehículos eléctricos pequeños y de baja velocidad. Una ciudad compacta, que no se extiende kilómetros y kilómetros. Una ciudad que se diseña o se transforma para que un buen porcentaje de los ciudadanos puedan cumplir con sus actividades en un radio de distancia que puede cubrir a pie o en bicicleta. Una ciudad surcada por vías normales y no grandes autopistas, donde casi no hay cruces. Hacer pasos elevados o deprimidos para evitar los cruces de vehículos de bajo peso, es muy poco costoso y fácilmente realizable con los recursos de ingeniería locales.Basta con que una vía baje 1.5mts y la otra suba 1.5mts. No solo se pueden hacer cruces de bajo costo sino que se pueden hacer ecológicos: con guadua en vez de cemento y hierro. (promoviendo su cultivo). Una ciudad que se recorre sin semáforos ni trancones, en vehículos pequeños, eléctricos, con velocidades máximas de 30 kms. por hora. Una ciudad donde el aire que se respira no está contaminado por los miles de exhostos. Una ciudad que no atormenta los oídos ni enerva a sus habitantes con los miles de vehículos que generan un rugido permanente. Una ciudad próspera, porque es eficiente, porque el dinero que consume su sistema de transporte estimula la economía local, donde el vehículo no representa un escalón más en las diferencias sociales. Una ciudad virtualmente libre de accidentes fatales, cuyos hospitales se ocupan de atender los enfermos y uno que otro raspón y moretón. Una ciudad que no hace exportación neta de capital para costosos e ineficientes sistemas de transporte masivo. Una ciudad que genera empleo con múltiples puntos de atención a los vehículos. Una ciudad donde la mayoría de sus habitantes son saludables porque hacen ejercicio al transportarse, en la que se llega fácil a todas partes. Una ciudad que no tiene que desbaratarse periódicamente, para hacer pavimentos cada vez más gruesos y resistentes, puentes cada vez más anchos, túneles cada vez más largos. Las obras públicas son sencillas, cortas, rápidas porque son en alto porcentaje para vehículos livianos.
Los carros tradicionales, en las fases iniciales, siguen siendo el principal medio de transporte, pero en la medida en que las vías se van dedicando cada vez más a los eléctricos, el carro tradicional va a servir cada vez menos. Eventualmente se ubicaran en grandes parqueaderos a la entrada de la ciudad. La carga y suministros llegan en vehículos grandes hasta ciertos puntos críticos y de allí son distribuidos en vehículos livianos eléctricos en las zonas donde no hay acceso.
Es fundamental entender que los dos tráficos no se pueden mezclar. Se tendrán que cruzar en algunos puntos pero no debe haber vías que combinen los eléctricos de baja velocidad con los motores de alta velocidad. Todo el presupuesto de obras públicas se dedica a lograr que las vías eléctricas cada vez sean más ágiles y con menos cruces. No se prohíben los carros tradicionales pero sus usuarios van aprendiendo que cada vez sirven para menos.