En la década de los setenta James Lovelock formula la Hipótesis Gaia, en la que propone que dadas unas condiciones iniciales que hicieron posible el inicio de la vida en la Tierra, ha sido la propia vida la que las ha ido modificando y que por lo tanto las condiciones resultantes son consecuencia y responsabilidad de la vida que lo habita. Considerando esta teoría, la biomasa total del planeta actúa, como un organismo único con mecanismos homeostáticos que regulan principalmente el equilibrio químico y la temperatura. Estos mecanismos son sistemas buffers que tienen una determinada capacidad de regulación. Si los parámetros se alteraran drásticamente y salieran del rango de regulación actual, no se conocen cuáles pueden ser los nuevos parámetros. Si hay nuevos mecanismos de regulación o si por ejemplo, el calentamiento global, puede generar, superados ciertos límites, una espiral de acontecimientos que lo magnifiquen.
Esta biomasa necesaria para mantener las condiciones de habitabilidad tal cual el hombre necesita, se encuentra distribuida en la tierra en unidades fácilmente identificables denominadas ecosistemas, conformados por los distintos organismos que interactúan en un ambiente físico determinado. A principios del siglo XXI la ONU encargó a un importante grupo de científicos que realizaran la Evaluación de los Ecosistemas del Milenio, una suerte de auditoría del estado del planeta tierra. La figura siguiente tomada de ese trabajo, nos muestra categorizados los diferentes servicios.
Servicios Ecosistémicos
En la naturaleza estos servicios guardan un equilibrio cierto. En contrario, el hombre, prioriza los denominados Servicios de Suministro, fácilmente apropiables e intercambiables. La especialización en la producción de determinado servicio desequilibra la prestación de los demás, generando las denominadas externalidades, o sea que la producción de determinado bien lleva implícito que otros servicios puedan verse afectados. Estas externalidades pueden ser positivas o negativas. Lo primordial es que cada vez que se actúa sobre un ecosistema es necesario saber qué se gana y qué se pierde y quién gana y quién pierde. Porque demás está decir que la apropiación privada de determinado bien puede generar una pérdida a toda la sociedad. Ejemplo de esto pueden ser los desmontes, donde la renta obtenida de manera privada por un cultivo puede ser menor a los servicios ecosistémicos perdidos y cuyos costes son asumidos por la sociedad en su conjunto.
Esta evaluación global de los ecosistemas, mostró el crecimiento importante de algunos Servicios de Suministro como los cultivos, la ganadería y la acuacultura. Cierto equilibrio en las fibras tanto para papel como para vestimenta y la disminución en la captura de peces, de los recursos genéticos, productos bioquímicos y farmacéuticos naturales y del agua fresca.
De los importantes Servicios de Regulación, la mayoría muestra su declinación, tanto para la regulación del clima, la calidad del aire, el control de la erosión, la purificación del agua y el reciclaje de los residuos, como para la regulación de los peligros naturales, de pestes y la polinización.
Los Servicios Auxiliares o de soporte, son los servicios necesarios para la producción de servicios ecosistémicos, como la formación de suelo, los ciclos de los nutrientes y la producción primaria. Estos son de una importancia vital, ya que la vida depende de esa capa delgada de suelo superficial que permite la implantación de los vegetales, que son los denominados productores en los ecosistemas. Ellos son los únicos capaces de sintetizar sus alimentos usando la energía solar mediante la fotosíntesis. Los vegetales brindan la productividad primaria de un ecosistema, que es aprovechada por todos los otros miembros de la comunidad, denominados consumidores. En los ecosistemas naturales, el reciclaje de la biomasa producida se da prácticamente en el mismo lugar.
Contrastando con los sistemas naturales, se puede ver la cantidad de superficie agrícola perdida por erosión eólica, hídrica, salinización y las urbanizaciones desarrollados sobre suelo agrícola. El ciclo de nutrientes resulta alterado por la extracción sistemática, generando empobrecimiento de los suelos y la deposición en otro lugar produciendo contaminación. Y la apropiación del 40% de la productividad primaria del planeta para una sola especie, el Hombre.
Podríamos decir que el calentamiento global es el síntoma más visible de nuestra crisis de sustentabilidad. La insustentabilidad es el síndrome que nos aqueja como sociedad planetaria y las características de ese síndrome están dadas en parte por la disminución en la prestación de los servicios ecosistémicos. Estos servicios que los ecosistemas brindan son nuestra base de sustentación, ya que el hombre nunca ha existido separado de su ambiente y de la comunidad biológica.
Entonces es importante recordar, que la provisión de los distintos tipos de servicios es dependiente de la condición del ecosistema y también de su tamaño. Que los Servicios Ecosistémicos no son sustituibles y que los cambios en el uso de la tierra y sus impactos sobre la provisión de servicios ecosistémicos pueden ser permanentes e irreversibles.