Hola. Quiero dar mi testimonio.
Quizás el dolor muchas veces no es explicable con palabras. Me gusta pintar y es como me expreso.
Me he tenido que volver una mujer mosaico. Todos los dias hay algo nuevo. Creo que la imagen dice mucho.
De mis dolores podría hablar horas y de mis limitantes también. Ya las tengo asumidas...
Quizás somos cebras mosaicos y no lo sabíamos. Lo genial de ser un mosaico .... Es saber de que estás hecho de miles de pedazos de algo roto. Pero que al juntarlos de a poco reúne un cuadro maravilloso.
La vida brilla, solo hay que reacomodar las piezas y las articulaciones.
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