En general, para los protocolos de investigación con rigor científico las fuentes de consulta deben ser confiables y relevantes para la investigación en cuestión. Además, las fuentes deben estar actualizadas y ser accesibles para otros investigadores que quieran replicar o ampliar el estudio. Es importante asegurarse de que las fuentes hayan sido revisadas y validadas por expertos en el campo, y que se citen adecuadamente en el protocolo de investigación. En resumen, los requisitos para las fuentes de consulta en los protocolos de investigación incluyen su confiabilidad, relevancia, actualización, accesibilidad y revisión por expertos.
Entonces, las fuentes de consulta son esenciales en la preparación de la metodología de una investigación, ya que deben ser confiables, relevantes, actualizadas y haber sido revisadas por expertos en el campo. Deben ser utilizadas para medir los efectos de un programa sobre su población y para identificar y valorar el impacto ambiental de un proyecto. Además, las fuentes de consulta también permiten la elaboración de guías y la planificación y seguimiento de proyectos. Es importante seleccionar las fuentes de consulta adecuadas y citarlas adecuadamente en la metodología de la investigación para garantizar la calidad y confiabilidad de los resultados.