El alumnado se dirigió a Arzúa, el camino se desarrolló tranquilo, aunque todos estaban inquietos porque no sabían qué hacer con “Degustación y Covadonga”.
Entrando por Arzúa y recorriendo sus calles observaron un obrador con en el que se leía “Panadería-Degustación Arzúa”, un par de alumnas se percataron, eso sí, con un poco de ayuda del profesorado (el compañero que llevaba la furgoneta de apoyo, estuvo antes comprando el pan. Y consiguió su colaboración).
Algunos de ellos entraron dentro del obrador. Allí apareció una señora presentándose como Covadonga y franciscana seglar. Les planteó el reto de hacer una tarta de Santiago, les dio la receta, aunque tendrían que ajustar las cantidades.
Ya en el albergue, después de la siesta, el alumnado tuvo que elaborar una tarta, siguiendo la receta de Covadonga, adaptándose a las herramientas y utensilios de los que disponían en el albergue. Hicieron la compra de los ingredientes, pero previamente calcularon las cantidades necesarias para la elaboración, pues las cantidades no eran las mismas que las que le proporcionó Covadonga, pues existía una modificación en el número de comensales, con lo que se hizo necesario modificar las cantidades y, para lo cual, emplearon factores de conversión y reglas de proporcionalidad, es decir, hicieron todas las gestiones necesarias, teniendo en cuenta que no podían malgastar ni desperdiciar recursos.
Hicieron la compra de los ingredientes, en las diferentes tiendas más próximas pero previamente calcularon las cantidades necesarias para la elaboración, pues las cantidades no eran las mismas que las que le proporcionó Covadonga, pues existía una modificación en el número de comensales, con lo que se hizo necesario modificar las cantidades y, para lo cual, emplearon factores de conversión y reglas de proporcionalidad, es decir, hicieron todas las gestiones necesarias, teniendo en cuenta que no podían malgastar ni desperdiciar recursos.
También se les pidió que fueran creativos, ya que sería importante para la superación de la prueba la presentación del plato y la forma de la tarta
Una vez terminada la tarta, fueron los profesores los que evaluaron las elaboraciones. Finalmente fueron obrador, donde la colaboradora les entregó la anhelada página y una pequeña bolsa (previamente se la dimos el profesorado) y les dijo: “Dentro lleváis un pigmento de color azul, decir esto en recepción del albergue de O Pedrouzo”.